En esta quinta ronda de los Consejos de Salarios, el Sindicato Único Gastronómico y Hotelero del Uruguay (SUGHU) negocia en cuatro subgrupos: “Rotiserías”, “Catering industrial”, “Catering artesanal” y “Hoteles de alta rotatividad”. En este último, el subgrupo 3.1 del grupo “Hoteles, restoranes y bares”, el SUGHU y la Cámara de Hoteles de Alta Rotatividad alcanzaron un preacuerdo que, en caso de aprobarse en las asambleas respectivas, se firmará como nuevo convenio la semana próxima.
El salario mínimo del sector ronda los 9.500 pesos nominales y “los más altos están en 11.200 pesos”, expresó Darío Vespa, delegado del comité de base del motel El Jardín y negociador del sector en el Consejo de Salarios.
El preacuerdo alcanzado establece “ajustes anuales” de 16% con el objetivo de alcanzar los 14.000 pesos al final del convenio, una meta que se propuso el SUGHU en todos los grupos. En el acuerdo alcanzado en la cuarta ronda, los trabajadores consiguieron incorporar el pago de 15% extra por nocturnidad y en el actual preacuerdo intentan incrementar este beneficio hasta 20%. Vespa expresó que además reclaman que el pago abarque todas las horas del turno de la noche, que va de 22.00 a 6.00, porque los empresarios abonan la nocturnidad “sólo desde las 0.00”.
En Montevideo existen unos 20 hoteles de este tipo y cada uno puede llegar a tener 30 trabajadores entre los tres turnos. Las categorías laborales establecidas incluyen cargos como mucama, garajista, pistero, lavandera, jardinero, limpiadora, planchadora y mozo, que “es el que lleva los pedidos a las habitaciones y cobra”, explica Vespa.
Según el delegado, el sector tuvo un crecimiento importante entre 2009 y 2011 y actualmente se ha “estabilizado”. El servicio se ha ido reconvirtiendo y adaptado a los nuevos consumidores, y la competencia entre los hoteles hoy se basa en la oferta de “habitaciones temáticas”, con decoraciones extravagantes, el agregado de accesorios (un caño para bailar, productos de sex shop), o especiales, por ejemplo, para swingers.
El costo por hora promedia los 500 pesos aunque “depende de la habitación”, porque “las que tienen jacuzzi son más caras”, agregó Vespa. Hay moteles que aún mantienen una atención personalizada y donde “lo más importante es la discreción”, y otros donde los clientes “no tienen contacto con los trabajadores”.
Comida caliente
Por su parte, la negociación colectiva del subgrupo “Catering industrial”, del grupo “Procesamiento y conservación de alimentos, bebidas y tabaco”, permanece estancada. El dirigente del SUGHU William Cox, dijo que se trata de un sector con “salarios sumergidos”, donde el sueldo mínimo “no alcanza a los 8.000 pesos” y mientras que los trabajadores proponen llegar mediante un convenio a dos años a los 14.000 pesos de salario mínimo, los empresarios plantean otorgar sólo 1% de recuperación salarial.
Las dos empresas más importantes del sector son multinacionales: Habitué-ISS, proveedor de bandejas para escuelas públicas, y Grupo Goddard, que abastece a las aerolíneas en el Aeropuerto de Carrasco y la obra de Montes del Plata y tiene la concesión del servicio de restaurante y cafetería del Palacio Legislativo. Cox informó que hay otras dos empresas, Fedir SA (Delibest), proveedor del Instituto Nacional de Alimentación, y Dano Ltda (de la empresaria Nora Rey), en el que “no hay comité de base” del SUGHU, entre otras cosas porque los trabajadores que se quieren sindicalizar “son despedidos”. Cox dijo que en el caso de Fedir SA “el incumplimiento de los laudos le permite bajar costos y así ganar todas las licitaciones a las que se presenta”. La semana pasada el SUGHU hizo un paro en el sector y la situación generó la intervención del director nacional de Trabajo, Luis Romero, con el que se hicieron “dos reuniones”. La negociación se retomará el lunes y el sindicato espera que “haya avances significativos”.
La secretaria general del SUGHU, Fernanda Aguirre, explicó que también se llegó a un preacuerdo en el sector “Rotiserías”, en el que la negociación es con el Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu), y en el caso del catering artesanal “se está negociando sobre la forma contractual y la cobertura mutual”, debido a que hay períodos del año en que “baja la actividad”. El SUGHU pretende extender a todos los convenios “los avances conseguidos en las condiciones de trabajo” en algunos sectores como beneficios por antigüedad, el incremento de la prima por nocturnidad a 20% y la inclusión de cláusulas de género y equidad. Con respecto a la exigencia de los empresarios gastronómicos, que incluyeron en el convenio de bares y restaurantes una cláusula que prohíbe a los trabajadores el uso de teléfonos celulares, Aguirre dijo que “no es ninguna innovación” porque “es una exigencia bromatológica para todos los que manipulan alimentos”. “En hoteles de alta rotatividad pretendían poner la misma cláusula y dijimos que no”, concluyó.