La propuesta de aumentar la edad de jubilación de 60 a 65 años, planteada el lunes por la senadora y precandidata nacionalista Verónica Alonso en su audición radial, no fue bien recibida por la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (ONAJPU) ni por el PIT-CNT.
Alonso sostuvo que ese cambio, “razonable debido al aumento de la expectativa de vida promedio de los uruguayos”, permitiría “mejorar las cuentas” del Banco de Previsión Social (BPS), así como las pasividades mínimas que este paga.
El secretario general de la ONAJPU, Daniel Baldassari, dijo que la propuesta es “fascista”, según informó ayer Radio Uruguay. Además, aseguró que no sería una solución, dado que, “por la vía de los hechos, los trabajadores se retiran a los 64 años” en la actualidad, a fin de atenuar cuanto pueden la pérdida de ingresos asociada con ese cambio. Si bien Baldassari opinó que es “imperioso” incrementar las prestaciones mínimas, que no llegan a 11.000 pesos, también señaló que para lograr esto hay que tener presente que el aporte patronal se redujo en momentos de crisis, con el fin de apoyar a las empresas. “Hace un tiempo se bajó de 15% a 7,5%”, lo que supuso “una renuncia de 85 millones de dólares por cada punto” porcentual de esa rebaja, destacó.
Desde el PIT-CNT, José Fazio, integrante del Secretariado Ejecutivo, dijo a la diaria que es preciso hacer un estudio más “pormenorizado” de la seguridad social, teniendo en cuenta los datos de morbimortalidad de la población. Fazio comentó que el representante de los trabajadores en el directorio del BPS, Ramón Ruiz, ha realizado varios informes que destacaron la necesidad de llevar a cabo un diálogo público sobre seguridad social. Acerca de la iniciativa de Alonso, sostuvo: “Hablar sólo de la edad de retiro no nos satisface”. Sin embargo, agregó que el solo hecho de que la senadora haya puesto sobre la mesa el tema de la edad de retiro es bueno, para que se aborde el problema de fondo de la seguridad social. Ruiz opinó mediante su cuenta en Twitter que “postergar la edad de retiro a 65 años es un parche” que “no resuelve prácticamente nada”, y que “es necesario impulsar una reforma integral”.
Desde filas nacionalistas, el diputado Pablo Abdala coincidió en que hay que abordar la seguridad social desde una visión “más integral”. “Todos sabemos que el sistema es deficitario, pero hay que analizar reformas incorporando todos los factores”, sostuvo. “No descalifico la propuesta de la senadora Alonso, pero no alcanzo a entender la relación entre subir la edad de retiro y aumentar las jubilaciones mínimas”, comentó. Para el diputado, entre los problemas urgentes en el BPS están los de administración y gestión, que deberían solucionarse antes de iniciar una reforma. Si bien dijo que su idea no es quitar beneficios, acotó que se tiene que revisar la manera en que son otorgados. “No estoy hablando ni siquiera de modificaciones legales, me refiero al reconocimiento de los servicios y a la forma de probar la causal o el derecho de acceder” a una pasividad, apuntó.
Alonso adelantó al plantear su iniciativa que va a solicitar varias reuniones para difundirla e intercambiar opiniones, una de ellas con el PIT-CNT. Destacó que le preocupan en especial las situaciones de los niños y los adultos mayores, y dijo que aspira a que su propuesta “se transforme en solución”. “Por eso una vez más apostamos al diálogo y a llegar a los acuerdos necesarios”, aseguró.