La campaña “Todos somos iguales” reunió las firmas de 2% de los habilitados para votar, requeridas para someter el recurso de referéndum contra la ley integral para personas trans a lo que la ley llama “facilitación” del procedimiento de consulta popular, anunció ayer el impulsor de la iniciativa, Carlos Iafigliola (Movimiento Adelante), precandidato del Partido Nacional (PN). La facilitación o “pre referéndum” es una consulta popular con voto voluntario, en la que 25% del padrón electoral debería apoyar la iniciativa para que se convoque al referéndum. Iafigliola dijo a la diaria que no va a ser posible realizar esa convocatoria antes de las elecciones internas, y que espera que se haga en agosto.
Tanto Iafigliola como el diputado del PN Álvaro Dastugue (Esperanza Nacional), caras visibles de “Todos somos iguales”, fueron denunciados penalmente por la Campaña Nacional Ley Integral para Personas Trans, alegando que en la campaña por el referéndum incurrieron en “incitación al odio”. Sobre esto, Iafigliola dijo: “Todo lo que escuché fue a través de la prensa, no hemos recibido ninguna comunicación desde el Poder Judicial. Yo dije desde el primer día que esto es un disparate totalitario, pero estoy a la orden de la Justicia para contestar las consultas que me hagan”.
De todos modos, admitió que en la recolección de firmas no se explicaron todos los alcances de la ley, sino, “obviamente” sólo “los puntos más importantes”.
“Parece que piensan que la gente es tonta, que firmó porque fue engañada. Tuvimos la gran capacidad de haber engañado a 70.000 uruguayos para que firmaran. Por favor, respeten a la gente que firmó. Si firmó es porque entendió, leyó la ley antes, dábamos links de dónde poder leer la ley. La gente entendió que es una mala ley y por esa razón firmó. Puso su nombre, su apellido, tres huellas digitales. Hoy hay un pre referéndum para que la ciudadanía decida si quiere mantenerla o derogarla. Es lo que me parece correcto y eso se llama democracia”, declaró Iafigliola.
Iafigliola afirmó que la iniciativa no es contra las personas trans sino contra la ley. “Estamos en democracia y a alguno quizá no le gusta. Yo respeto a las instituciones, y al Parlamento que votó una ley; ahora nos tienen que respetar a nosotros”, alegó.