La discusión en la interna del Frente Amplio (FA) sobre la situación política en Venezuela volvió a ponerse sobre la mesa tras las declaraciones del ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, el ex presidente José Mujica y el candidato a la presidencia por esa fuerza política, Daniel Martínez, quienes afirmaron que en el país caribeño hay una dictadura. Hasta entonces los principales dirigentes del FA habían evitado calificar el gobierno de Nicolás Maduro de esa forma. El cambio de posición despertó críticas en la oposición por considerarlo un planteo tardío y de oportunismo electoral, pero los tres líderes del FA también fueron cuestionados desde las propias filas de la coalición de izquierda.
Entre quienes se expresaron sobre las declaraciones de Astori, Mujica y Martínez, estuvieron los ex precandidatos frenteamplistas Óscar Andrade, Carolina Cosse y Mario Bergara. El primero en hacerlo, el domingo, fue el dirigente sindical, por medio de su cuenta de Facebook. Andrade escribió: “Elegir las redes sociales o los medios para anunciar virajes en temas sensibles es por lo menos irresponsable”, y añadió: “Vendrá ahora, imagino, el debate en el FA, ya condicionado por las declaraciones públicas”.
Por su parte, en declaraciones a la radio 1410, Cosse expresó: “Vamos a calmarnos un poco y a pensar en las consecuencias de lo que estamos diciendo”, y pidió: “No dejemos de ser el FA”. La ex ministra manifestó que “hay que ser cuidadosos con las declaraciones en cualquier tema” y apuntó que le “dolería mucho” que dichos de dirigentes frenteamplistas “se usaran como pretexto para una intervención armada en Venezuela”.
La ex precandidata aseveró que la situación política que atraviesa el país caribeño es “terrible, dolorosa y desgraciada”, pero “la tienen que resolver los venezolanos”. Asimismo, señaló que el contenido del informe sobre Venezuela de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet es “lapidario”, pero recordó que en sus conclusiones llama al diálogo con los venezolanos como protagonistas. “No podemos renunciar al principio de no intervención. Si nos empujan a una definición binaria hay que preguntarse ‘¿por qué nos están empujando a eso?, ¿hay alguien que necesita un pretexto para tener una intervención armada en ese país que tiene petróleo?’”, concluyó la ex ministra.
En tanto, Bergara publicó en un hilo en su cuenta de Twitter:
Fue la derecha la que instaló que decir la palabra dictadura era el parteaguas en la campaña electoral, como si eso definiera el carácter más o menos democrático de las fuerzas políticas.
— Mario Bergara (@Mario_Bergara) 29 de julio de 2019
Además, se refirió al planteo del ex presidente Julio María Sanguinetti, que durante a la campaña a las internas sostuvo que el balotaje será entre quienes consideran que Venezuela es una dictadura y quienes creen que es democracia:
Sanguinetti fue particularmente claro en eso, el mismo que fue ministro de un gobierno colorado en el que había represion estatal con muertos en la calle, presos torturados, uso abusivo de las medidas prontas de seguridad y bandas paramilitares.
— Mario Bergara (@Mario_Bergara) 29 de julio de 2019
Asimismo, Bergara reafirmó su respaldo a la postura del gobierno uruguayo “de trabajar para un diálogo que lleve a los venezolanos a elecciones con garantías para todos”.