Más de dos horas estuvieron reunidos este martes el ministro de Desarrollo Social designado, Pablo Bartol, con la ministra actual, Marina Arismendi, en el primero de los encuentros de los titulares de la cartera en esta transición.
A la salida de la reunión, Arismendi, en conferencia de prensa, dijo que tenían que encontrarse para “empezar a trabajar en conjunto” ya que el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) “es complejo”. Según la actual ministra, la cartera tiene “muchos programas y muchas demandas, algunas que no son del Mides”.
Para la ministra es importante cuidar a los trabajadores del ministerio porque por el tipo de tarea que realizan, “el desgaste de los equipos es importante”. Según sostuvo, es importante “cuidar a los que cuidan”.
Arismendi afirmó que habrá más reuniones, y recordó que Bartol ya se juntó con la directora general de Secretaría del ministerio, Graciela Mazzuchhi, y con la subsecretaria, Ana Olivera, en diciembre. Por su parte, Bartol coincidió con la ministra actual en que se debe ayudar a los funcionarios a “cuidarse”, pero también dijo que hay que hacer una tarea “más articulada y más fina con las distintas familias”.
Según Bartol, una de las tareas que llevará a cabo el Mides es determinar cuál es el actor que más cercanía tiene con esa familia y hacer el seguimiento. “Siempre son familias que tienen múltiples vulnerabilidades y por lo tanto son abordadas por distintos programas”, expresó. Dijo que la cartera continuará apostando a la primera infancia “porque es una necesidad en Uruguay”: “En esos primeros mil días de vida de una persona se define mucho de su futuro”.
Además, Bartol dijo que por su “experiencia” en el territorio, sabe que en “una casa que tiene vulnerabilidades a veces hay riesgos”, incluso “puede haber una irregularidad grande con respecto a la ley”. Aseguró que no es bueno que las personas que van a ayudar a las familias se involucren “con temas que tengan que ver con algún delito”. En esa línea, sostuvo que “tiene que estar claramente definida la misión” de los operadores territoriales.
En tanto, el futuro subsecretario del Mides, Armando Castaingdebat, dijo a la diaria que estuvo recorriendo el país junto con el próximo director general de Secretaría, Nicolás Martinelli, y el actual director nacional de Gestión Territorial, Mauricio Guarinoni. Las recorridas se descontinuaron por las licencias de los funcionarios pero se reiniciarán a partir del 15 de este mes. El objetivo de estas recorridas, sostuvo Castaingdebat, es “entender un poco el ministerio” y definir qué “hacemos con el mundo de direcciones que tiene el Mides”. “La idea es achicar bastante, no sabemos si eliminarlas o no llenarlas [las direcciones], porque a veces se necesita una ley. La idea es no llenar todas las direcciones”, dijo. Una de las posibilidades que se maneja, sostuvo, es unificar direcciones porque “el Mides es monstruoso, inmenso”.
“Tenemos una estructura fija de 2.000 funcionarios y unos 3.000 y pico que están contratados a través de ONG, el Mides tiene prácticamente todo tercerizado”, comentó. De todas formas, aclaró que se trata de un área muy sensible porque “cualquier cosa que se toque afecta a alguien, y ese alguien hoy entiende que es un derecho que tiene, por eso hay que tener mucho cuidado. La indicación de Luis [Lacalle Pou] es seguir con las prestaciones y achicar el costo de funcionamiento, y en esa línea es que yo estoy trabajando. En el interior hay dos estados paralelos y la idea es maximizar la estructura de las intendencias”, dijo.
Castaingdebat reiteró que se hará énfasis en el deporte comunitario “como instrumento social”. “El deporte va a estar muy presente en la gran mayoría de los proyectos: pensamos usar convenios hasta con entrenadores de fútbol, básquetbol, rugby, y usar el deporte para entrar en determinados lugares y después poder aterrizar con otras políticas del Mides”. El futuro jerarca aclaró que ya está pensado un convenio con el fútbol femenino, “que va a jugar un papel fundamental”.