El frenteamplista Andrés Lima asumió nuevamente al frente del gobierno departamental de Salto en un evento que contó con la presencia del ministro de Desarrollo Social, Pablo Bartol, y el intendente de Canelones, Yamandú Orsi. Los tres coincidieron en subrayar la importancia de la articulación y colaboración entre los gobiernos departamentales y el nacional ante la pandemia de covid-19. A su vez, los intendentes saludaron lo que perciben como señales positivas por parte del Ejecutivo de Luis Lacalle Pou hacia los gobiernos departamentales.
“En estos cinco años Salto precisa del gobierno nacional, y mucha cosa va a ser posible en la medida que podamos trabajar en conjunto”, dijo Lima. Para el intendente, el Ejecutivo de Luis Lacalle Pou será el “primer socio” y el “socio estratégico” de su administración. “Ha habido señales muy positivas que queremos destacar”, manifestó antes de señalar que el gobierno nacional decidió un mes antes de las elecciones departamentales iniciar la construcción de la Central Hortícola del Norte. Esa iniciativa fue impulsada por Lima y el Ejecutivo de Tabaré Vázquez. “No importó lo electoral, si eso jugaba a favor o no, se priorizó una necesidad que tiene el departamento”, dijo.
En una línea similar se había manifestado antes Orsi, quien consideró que con la asunción de las autoridades departamentales se termina un extenso ciclo electoral y ahora es hora de “tomar las cartas que nos unen y dejar a un lado o en un segundo plano aquellas que nos diferencian, que son muy útiles a la hora de las elecciones, porque la gente tiene que comparar”.
Por su parte, Bartol dijo que “cuando se trata de los problemas de la gente tenemos que estar unidos” y “potenciar la capacidad de acción de unos y otros”.
En clave departamental
En cuanto a su gestión, Lima dijo que en el quinquenio pasado su administración trató de cumplir “con aquellas tareas básicas” de los gobiernos departamentales ‒“caminería, alumbrado, recolección” de residuos, enumeró‒, pero los próximos cinco años “tienen que ser distintos” y el gobierno centrará sus esfuerzos en “el desarrollo del departamento y la región y la generación de empleo”.
Para ello, se impulsará la “agenda 2030”, diseñada junto a la anterior administración, instituciones educativas y organizaciones civiles presentes en el departamento. Incluye tres “grandes líneas”: la diversificación del turismo ‒Lima anunció que el Ministerio de Turismo le confirmó que destinará 300.000 dólares a potenciar las termas‒; “Salto como ciudad del conocimiento” ‒debido a la presencia de varias instituciones educativas‒; y la producción de alimentos ‒para lo cual subrayó la importancia de la Central Hortícola del Norte‒.
En la gobernanza de la Central Hortícola del Norte “deben estar presentes los productores, el gobierno departamental y el nacional, a través del Ministerio de Ganadería”, consideró el intendente, que también señaló que la central no será sólo para Salto sino para toda la región. Además, apuntó que se debe potenciar el trabajo para aumentar la venta de alimentos a Concordia, la ciudad vecina de Salto, para lo cual es necesaria la “coordinación” con el gobierno nacional.
“Tenemos la potencialidad y las condiciones para crecer, desarrollarnos y vivir mejor. Va a depender, naturalmente, de la capacidad que tengamos de trabajar en equipo, dejando algunas chacras de lado, pensando y priorizando al departamento”, añadió, refiriéndose tanto a los dos niveles de gobierno como a los distintos actores vinculados al proyecto de la central.