Durante la interpelación al ministro del Interior, Luis Alberto Heber, que empezó en la mañana del martes y terminó a las 6.00 del miércoles, la bancada del Frente Amplio (FA) realizó un pedido de renuncia y la coalición oficialista defendió en bloque la gestión del jerarca.
La moción que en la noche del martes tenía redactada el oficialismo afirmaba que, una vez oídas las respuestas de Heber en sala, hay “total y absoluto respaldo a lo expresado y actuado”, y se manifiesta el “compromiso” con la implementación de políticas dirigidas a la transformación del sistema carcelario, cuyas condiciones son “deplorables” en varias unidades. Además, los diputados oficialistas reivindicaron la “incidencia positiva” de la ley de urgente consideración (LUC) aprobada en 2020 “en el combate efectivo a la inseguridad, que se refleja en el descenso sostenido de la cantidad de delitos cometidos, revirtiendo la profunda inseguridad en la que nuestro país estuvo subsumido durante años”.
En cambio, en la moción prevista por el FA, se pidió la renuncia de Heber y se cuestionó “la información poco precisa, confusa y contradictoria vertida por el ministro durante los últimos 15 días” y la expresada en sala “con marchas y contramarchas” en relación “a la fuga del recluso Hugo Pereira, situación que al momento sigue sin esclarecerse”. Además, expresó que “estas contradicciones e improvisaciones del ministro dañan la credibilidad de la conducción de la cartera ministerial, y dañan la convivencia y la seguridad pública”.
En conferencia de prensa durante un cuarto intermedio, la miembro interpelante, Lucía Etcheverry, manifestó que Heber evidenció “que no sabe, que no está preparado y que no asume su responsabilidad en el liderazgo de la gestión de política pública de seguridad ciudadana”.
Además, señaló que el gobierno tiene “una actitud refundacional con una pérdida de garantías para la ciudadanía y también para la institución policial”, y agregó que el sistema carcelario “está colapsado, en una situación extremadamente crítica, y no hay ahí un rumbo claro y recursos” para que cambie.
Más tarde tomó la palabra el coordinador de la bancada de diputados del FA, Daniel Caggiani, quien dijo que “luego de haber escuchado las explicaciones del ministro en sala” y “considerando la situación de extrema emergencia que está viviendo el sistema carcelario y el sistema de seguridad”, su fuerza política promovería al final de la interpelación una resolución para determinar “insatisfactorias” las declaraciones de Heber y “solicitar la renuncia”.
“Menos fugados”
En paralelo, el ministro Heber dio una conferencia de prensa en la que afirmó haber respondido a todas las preguntas de Etcheverry. A su vez, dijo que está “dando una batalla dura contra la delincuencia” y que las cifras le van dando “la razón de que este es el camino”. No obstante, señaló que el aumento del encarcelamiento “tiene como contrapartida una situación carcelaria penosa” y “sobre todo en los cuatro módulos del Comcar, 3, 4, 10 y 11, y la cárcel de Canelones, que son realmente penosos”. Si bien afirmó que “no todo el sistema carcelario uruguayo es desastroso”, en los lugares mencionados se vive “un infierno”. “Nos avergüenza”, confesó. En este sentido, recordó el plan de construcción “de tres nuevas cárceles y tres barracones en el interior del país”.
Por otro lado, se defendió de los cuestionamientos por la fuga de Pereira, motivo central de la interpelación. “Hemos tenido 19 fugas en lo que va del año, 17 fueron recapturados, sólo dos están pendientes de captura. Son 19 [las fugas], los años anteriores son más de 40”, aseguró, y agregó que este año será el de “menos fugados”.
Por otro lado, anunció un nuevo convenio con la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) para hacer análisis de salud a los 13.900 presos que hay en todo el país. Sobre este plan, aseguró que es para que no vuelva a pasar “lo que pasó lamentablemente en el módulo 11” del ex Comcar, donde se descubrió que un preso estuvo secuestrado durante dos meses por otros reclusos, sufriendo desnutrición y torturas. Heber también aseguró que en los “módulos conflictivos” habrá un estudio “permanente”, ya sea “una vez por semana” o “una vez cada 15 días”.
“Hemos capturado a más de 2.000 delincuentes, eso genera más problemas en las cárceles, pero no estamos dispuestos a aflojar en el combate a la delincuencia. El camino es buscar soluciones en el sistema carcelario y dar todas las garantías de que la gente sea tratada como seres humanos”, expresó Heber.
“Inverosímil”
Los planteos del FA encontraron rechazo en todas las ramas del oficialismo. El diputado del Partido Colorado Conrado Rodríguez dijo a la diaria que es “increíble que se pida la renuncia de un ministro que exhibe buenos resultados en el combate al delito”. Además de manifestar que el pedido de renuncia “es inverosímil”, el representante colorado aseguró que esta “no era una instancia que ameritara una interpelación”, en referencia a la fuga de Pereira.
“El delincuente fue recapturado, no como en otros tiempos, en los cuales uno de los delincuentes más complicados y que era requerido por la Policía italiana, reconocido mafioso que se escapara de Cárcel Central en las narices del ministro [Eduardo] Bonomi y que no hubiera sido recapturado. Ese episodio sí daba lugar a una remoción del ministro, y eso no sucedió”, dijo Rodríguez en referencia a la fuga de Rocco Morabito.
Por su parte, el diputado de Cabildo Abierto [CA] Álvaro Perrone dijo a la diaria que “nunca” hubo en su fuerza política, “en lo más mínimo, ningún tipo de cuestionamiento a la gestión” de Heber. “Que el FA venga a hacer una interpelación por la fuga después del caso más notorio, que es el caso Morabito, nos parece completamente fuera de lugar. Y la situación del sistema carcelario, la situación edilicia y de falta de personal es conocida, viene de tiempo; hay algunos números que dio el ministro de los lugares en donde falta personal, hay mucho personal certificado, son cosas que hay que ir trabajando. Pero este ministro tiene cuatro meses”, expresó Perrone.
También dijo, con respecto al sistema carcelario y las críticas de la oposición, que es “como que el FA desconoce completamente la situación carcelaria o como que gobernaron hace 20 años y se encontraron con esto ahora”.
De fugas y gaches
Durante la interpelación, Heber dio un discurso enfocado en defender la gestión del gobierno en seguridad pública, en el reconocimiento de la violación de derechos humanos en algunas de las cárceles uruguayas ‒pero acotando que la degradación de los centros penitenciarios viene de períodos de gobierno anteriores‒, y en que habrá que esperar al informe que elaborará el Grupo Multidisciplinario Técnico Científico Honorario, conocido como el “GACH carcelario”, para establecer un nuevo plan para el mejoramiento de las cárceles.
Dijo que “es verdad lo que dice el comisionado parlamentario [Juan Miguel Petit] cuando dice que no hay una política carcelaria en Uruguay. No la tenemos. No la ideamos. ¿Se quiere culpar a todos? Culpen a todos, no me importan las culpas. La verdad es que no tenemos nada arriba de la mesa, como una guía para poder trabajar”. En esta línea, defendió la creación del Grupo Multidisciplinario Técnico Científico Honorario, que evalúa distintos planes de rehabilitación.
Durante sus respuestas a la diputada interpelante, Heber dijo que la política de seguridad del gobierno fue “plebiscitada tres veces” en 2019: en las elecciones internas, en la primera vuelta de las elecciones nacionales y en el balotaje. “Estamos cumpliendo con nuestra palabra. Dijimos que veníamos para cambiar esta realidad, que implica muchos de los cuestionamientos que he escuchado en sala, que son referentes a la LUC. La LUC fue votada por este Parlamento. No solamente fue plebiscitada en el balotaje, donde la gente eligió al presidente y la fórmula para lograrlo, sino que detrás de ese acuerdo había una serie de compromisos a los que varios partidos políticos nos comprometíamos para llevar adelante como norte en materia de seguridad pública”, señaló, y argumentó que al plantear quejas sobre su utilización, “hay un no reconocimiento de una voluntad popular y de una ley que fue votada”.
Por su parte, la diputada interpelante formuló decenas de preguntas, buena parte de ellas sobre la fuga del recluso Pereira en agosto. “El ministro es y debe ser quien ocupa ante la sociedad el lugar de mayor responsabilidad, en tanto debe expresar la coherencia de las acciones que ejecuta el ministerio. Esto significa que es el actor sustantivo en la definición de los problemas, en la toma de decisiones y en la supervisión de la ejecución de las mismas. Esta definición de responsabilidad, de liderazgo político en la gestión de la seguridad pública, no se condice con la actuación del señor ministro en relación a la fuga del recluso Hugo Pereira”, consideró. En ese sentido, dijo que el objetivo de la interpelación era encontrar “certezas” sobre este caso, del que opinó que la actuación de Heber “fue errática e improvisada”.
Etcheverry hizo una recapitulación de la fuga de Pereira y de las contradicciones en las versiones que dio Heber –que primero dijo que el interno se fugó por la puerta, disfrazado, y luego por el alambrado perimetral–. “El ministro dio dos explicaciones totalmente distintas sobre el mismo hecho en 48 horas, pero, además, a diez días de que el hecho había sucedido. ¿En esos diez días no se verificaron las cámaras de vigilancia del centro? ¿No se hizo un relevamiento exhaustivo del cercado perimetral? ¿No hubo una comunicación entre los ministros del Interior y de Defensa?”, inquirió, ya que el alambrado perimetral de la cárcel es custodiado por militares.
Acusaciones
Etcheverry siguió su ponencia con la nota que presentó la Asociación de Defensores de Oficio a la Suprema Corte de Justicia en la que denuncian falta de garantías en el proceso de detención y una serie de ejemplos que la diputada calificó de “graves”. Heber respondió que durante 2021 hubo menos denuncias de abuso policial que en años anteriores y cuestionó a la Asociación de Defensores de Oficio, que lo que hace “es pelearse con el mundo entero, desconocer la actuación de la Fiscalía, del Ministerio del Interior, de ASSE y de la propia Justicia, porque cuestiona los allanamientos y da por válido lo que dice quien fue allanado y procesado. La Asociación no le cree a la Policía y de alguna manera combate su actuación cuestionando la LUC, desconociendo que actuamos con un fiscal y un juez, que es quien firma el allanamiento”.
A su vez, el ministro dijo que “el policía es inocente hasta que se prueba lo contrario, como todos los ciudadanos inocentes de este país, ni más ni menos, y si es culpable le caerá todo el peso de la ley” y “será separado del cargo porque no honra al uniforme, lo desprestigia”. Heber dijo que “es verdad” que “algunos manchan” el uniforme, pero también la actividad política “algunos la manchan, y no por eso somos todos como el que la manchó”.
A su tiempo, la diputada interpelante respondió: “No hay acusaciones genéricas, no hay aquí quienes estemos a favor o en contra de la Policía, todos estamos a favor de la Policía”. Luego añadió que esto “implica defender el prestigio de los funcionarios policiales honestos, de los buenos funcionarios policiales”.
Luego retomó el episodio de la fuga de Pereira y las contradicciones en las versiones de Heber y dijo que el ministro agregó “una tercera versión” durante la interpelación, que es que hasta ahora no pudo comprobarse ninguna de las dos versiones anteriores.
En respuesta, Heber dijo que “la situación del señor Pereira no está resuelta, no hay una tercera versión, estamos esperando a que la fiscal termine su investigación, mientras tanto estamos haciendo la investigación administrativa que corresponde al Instituto Nacional de Rehabilitación. No estamos de brazos cruzados”. “Todavía no sabemos por dónde se fue”, reconoció.