Este martes desde las 9.30 se reunirá la Cámara de Senadores y entre los temas a aprobar se encuentran dos solicitudes del presidente Luis Lacalle Pou para ausentarse del país durante las próximas semanas. El mandatario tiene previsto participar el próximo fin de semana de los “actos conmemorativos del 211er aniversario de la independencia de Paraguay”, y entre el 21 y 25 de mayo realizará junto a varios ministros una visita oficial a Londres, en respuesta a una invitación del primer ministro británico, Boris Johnson.
Para el viaje a Paraguay, Lacalle Pou solicitó autorización para ausentarse del país entre el viernes 13 y domingo 15. Este último día será feriado en la nación guaraní con motivo de la conmemoración de la independencia y se prepara un “extenso programa” para los tres días, a cargo de la Secretaría Nacional de Cultura, con “una gran cantidad de actividades artísticas, representaciones históricas, gastronómicas y recreativas para toda la familia”, consignó la Agencia de Información Paraguaya.
El mandatario Mario Abdo Benítez invitó a Lacalle Pou a esta celebración, y ambos tienen previsto un encuentro bilateral. También integrará la delegación el canciller Francisco Bustillo. En febrero del año pasado el presidente paraguayo visitó Uruguay y tuvo una reunión en la residencia presidencial de Punta del Este enfocada en aspectos comerciales y de integración regional.
En la agenda de Boris Johnson
La otra autorización que votará el Senado para que el presidente salga del país tiene relación con la visita oficial a Gran Bretaña, que surgió tras una invitación de Johnson. Fuentes diplomáticas dijeron a la diaria que el primer ministro británico está emprendiendo una agenda activa hacia el continente, que incluyó un reciente diálogo con el presidente chileno Gabriel Boric así como próximos contactos con los gobiernos de Colombia y México.
La delegación estará integrada nuevamente por Bustillo, pero esta vez se sumarán otros ministros, como la titular de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, y el titular de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini. De acuerdo a fuentes oficiales, la agenda del viaje a Gran Bretaña aún está en preparativos. Lo que sí es seguro es que Johnson y Lacalle Pou mantendrán una reunión bilateral, y está previsto que ocurra lo mismo con los ministros y sus pares del gobierno británico.
El foco de la visita será la agenda comercial, y si bien las fuentes consultadas dijeron que la idea es no generar “expectativa” en torno a un posible tratado de libre comercio (TLC), el tema está sobre la mesa en el marco de un proceso de acercamiento entre ambos países. En setiembre del año pasado estuvo en Uruguay Ranil Jayawardena, ministro de Comercio Internacional británico, quien dijo que su visita fue para iniciar un “diálogo comercial” bilateral que permita incrementar el intercambio de bienes y servicios, más allá de las cuestiones tarifarias.
El brexit, la salida de la Unión Europea (UE) que se resolvió en una consulta popular a mitad de 2016, “es una gran oportunidad para Reino Unido. Al abandonar la UE tomamos control de nuestra política comercial por primera vez en 50 años, y como resultado de eso tenemos mucho trabajo por delante. Estoy aquí en Uruguay para ver qué potencial hay para hacer más cosas juntos”, dijo Jayawardena a Búsqueda en esa oportunidad. Si bien se planteó la posibilidad de estudiar un TLC con Reino Unido a nivel del Mercosur, Uruguay insiste con flexibilizar el bloque y permitir acuerdos bilaterales, una discusión que el gobierno de Johnson sigue de cerca, indicó el diplomático.
Tiempo atrás, el presidente de la comisión de comercio exterior de la Cámara de Industrias, Washington Durán, dijo a la diaria que visualizan una oportunidad comercial en la relación con Reino Unido: “tienen una visión más liberal del comercio” que la UE, bloque con el que el Mercosur negoció un TLC aún no ratificado, y “si existiera voluntad política de ambas partes entiendo que sería más sencillo” negociar. Esto último asociado a que se puede “tomar como base el texto que ya hay acordado con la UE” y adaptarlo al caso británico, país que “se podría transformar en un socio muy importante para la región”, evaluó.