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Durante el banderazo, en Montevideo (archivo, setiembre de 2024).

Foto: Gianni Schiaffarino

El FA aprobará plan para definir el vínculo entre el partido y el gobierno, y Pereira llama a pensar en un nuevo “ciclo progresista”

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La coalición de izquierda mantendrá una reunión el 20 de enero para definir las prioridades legislativas y el rumbo en el primer año de la nueva administración.

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Leído por Natalia Rodríguez Olmos.
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El Frente Amplio (FA) será la fuerza política gobernante en el próximo quinquenio y, en paralelo a los pormenores de la transición, algunos dirigentes comenzaron a pensar sobre el rol que deberá asumir la coalición de izquierda y la necesidad de pensar la relación entre el gobierno, el Parlamento y el territorio.

Uno de los aspectos centrales de la autocrítica que realizó el FA en el Congreso de 2021 fue la pérdida de contacto con las bases. “Teníamos las mayorías parlamentarias y entonces la discusión se volvió puertas adentro. Las alianzas políticas se descuidaron porque el FA parecía imparable, y las alianzas sociales no se alimentaron, porque por momentos como fuerza política creíamos saber más de las reivindicaciones o problemas que tenían los actores sociales que ellos mismos”, se puntualizó en aquella oportunidad.

Con ese aprendizaje a cuestas, en filas frenteamplistas consideran que se deberá seguir “fortaleciendo a la fuerza política, como se hizo en este período, donde incluso se aumentaron los comités de base”. Así lo entiende la senadora electa Bettiana Díaz (Movimiento de Participación Popular), quien sostiene que, luego de “la última derrota”, el FA aprendió de sus errores y, por lo tanto, cree que eso “se va a ver reflejado en este relacionamiento fuerza política-gobierno-Parlamento”.

Para Díaz, se trata de “tres espacios de coordinación” en los que juega un rol muy importante la conducción del FA -la Mesa Política y la Presidencia-, y destacó que, particularmente, durante estos años en los que el FA fue oposición hubo una “coordinación aceitada” que permitió que la fuerza política estuviera “en conocimiento de qué estaban haciendo los compañeros y compañeras que estábamos en el espacio parlamentario y en los 34 cargos que ocupamos en la gestión como oposición haciendo contralor”, señaló.

En ese sentido, la senadora electa destacó que las figuras elegidas en el Ejecutivo tienen esa impronta ya adquirida. “Hay muchos compañeros y compañeras que habitualmente están en la militancia y participan en la vida política del FA como fuerza política y eso creo que es un diferencial importante”, afirmó.

Pereira: “Hay que pensar en un nuevo ciclo progresista”

El presidente del FA, Fernando Pereira, adelantó que la coalición de izquierda deberá elaborar en febrero un plan hasta 2030, que incluso mire más allá y piense “en un ciclo progresista”. El plan deberá definir “con claridad un documento que ya se aprobó en 2004 sobre el vínculo entre partido político y gobierno, que tiene mucha actualidad, pero que hay que ponerlo en acción”.

Pereira entiende que el FA tiene que tener “una sintonía con las mismas organizaciones con las que se habló para construir el programa, para ver cuáles fueron nuestros errores y los problemas que estaba atravesando Uruguay. Fueron más de 2.000 organizaciones a lo largo de todo el país con las que el FA sí o sí tiene que seguir teniendo vínculo a través de la departamental, pero también por medio de la dirección nacional y de los parlamentarios”.

De hecho, la bancada del FA ya tiene agendada una reunión el 20 de enero convocada por la Presidencia del FA y la vicepresidenta electa, Carolina Cosse, para hablar no sólo de la tarea legislativa, sino también de la que “hay que cumplir en el ámbito político, que refiere a lo territorial y al vínculo con la sociedad”.

“No se puede pensar al gobierno lejos de la gente y al mismo tiempo no se puede pensar que todo lo haga el gobierno. Hay una parte que le toca al partido y el partido tiene que tener un nexo con el gobierno”, afirmó Pereira. “Ahí vemos la posibilidad de que quien sea el nexo en el gobierno sea Alejandro Sánchez [secretario de Presidencia] y que Daniel Mariño [secretario político de la coalición de izquierda] lo sea en el FA”, agregó.

La agenda parlamentaria

La bancada de senadores del FA se reunió con la vicepresidenta el 18 de diciembre para empezar a delinear el trabajo de la próxima legislatura. La senadora Silvia Nane (La Amplia) sostuvo que la tarea parlamentaria “sin dudas será ardua”, y que en la cámara alta ya empezaron a analizar qué proyectos fueron archivados y buscarán reflotar en la próxima legislatura.

Según dijo Nane, el análisis fue presentado en la reunión de la bancada con Cosse, al igual que un resumen con las 48 prioridades programáticas que presentó la fórmula en Colonia y “cuáles de estas nosotros entendíamos que requerían acción legislativa”.

Nane incluyó entre sus prioridades varios proyectos que quedaron en el tintero y que buscará volver a discutir, como el que establece la imprescriptibilidad de los delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes, el que busca aumentar la edad mínima de matrimonio a los 18 años y el que propone la creación del Comisionado Parlamentario de Infancia y Adolescencia, entre otros.

La senadora expresó que también va a haber que revisar algunas leyes y, a modo de ejemplo, señaló la que creó la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo y la discusión que se da en cada reelección del directorio sobre cómo se deben elegir los candidatos. Para la senadora, “si cada gobierno lo va a interpretar según le pinte, lo que hay que hacer es legislar y que quede saldado”.

“Yo creo que pasaron muchas de esas cosas, que la LUC las dio vuelta inmediatamente y que si hubiese tenido un sostén institucional un poco más fuerte, se hubiese podido dar por lo menos otro tipo de discusión. Entonces me parece que, de acuerdo a las prioridades del gobierno y de las cosas a las que se quiera dar una mayor prestancia institucional, va a haber que mirar las cosas desde ese lado”, expresó.

Por otra parte, 2025 será el año de la última rendición de cuentas del gobierno saliente y del presupuesto quinquenal del gobierno electo. Al respecto, Pereira sostuvo que “el presupuesto tiene sentido si le cambia la vida a la gente; si baja la desigualdad, si se abaten los niveles de pobreza, que por momentos son dolorosos, entonces ahí hay una clave más que importante, que es encontrar la forma de que el presupuesto marque el camino que el FA va a llevar en el gobierno durante los cinco años”.

En ese sentido, el presidente del FA sostuvo que hay una confianza muy importante en que Orsi y el Parlamento lleven adelante el programa de la fuerza política, en el que se fijaron las prioridades, y que el FA “sea también discutidor del presupuesto, pero sobre todo amplificador de las medidas que pretendemos que el presupuesto cambie”.

También adelantó que, a nivel parlamentario, va a haber temas que deben ser pensados en clave de políticas de Estado y habrá que buscar acuerdos, como en educación y seguridad. Por otro lado, apuntó que hay proyectos que quedaron pendientes en esta legislatura, en los que ya hay construidos acuerdos con los partidos de la coalición republicana, como el de ingreso por concurso a las intendencias o el del voto en el exterior.

“El Partido Nacional fue a Buenos Aires a buscar a los votantes del Partido Nacional, nosotros fuimos a conversar con los frenteamplistas. ¿No sería lógico que esos uruguayos que viven en el exterior votaran donde viven? Si todos estuviésemos de acuerdo en que la gente debería poder votar en el exterior, deberíamos encontrar cuál es el acuerdo que nos permite llegar a votación de todos los partidos políticos para habilitarlo”, ejemplificó.

La presidencia del FA

Para Díaz también fue y será clave el rol de Pereira al frente de la presidencia del FA. En ese sentido, destacó que hubo un “cambio sustantivo” en lo que fue la última presidencia del FA, con Javier Miranda al frente, y esta con Pereira, cuando la coalición de izquierda ganó fuerza política e incluso eso se vio a nivel mediático.

El estatuto del FA determina que la fuerza política no hará elecciones internas en años electorales, por lo que Pereira seguirá al frente de la conducción hasta 2026, cuando se convoque a un nuevo Congreso. Consultada sobre si ve deseable que Pereira sea reelecto, Díaz dijo que “depende realmente de él también, pero creo que sería una buena cosa”.

Pereira, por su parte, dijo que es “difusa la fecha de elecciones”, pero es “lógico pensar que en 2025 es inviable que haya elección”, por lo que ven factible que se haga en 2026. “Opté por quedarme en este momento de mi vida en el FA hasta que termine el mandato, lo conversamos así con muchos compañeros, incluyendo a Yamandú. Hay una clara vocación mía de sentir que estoy haciendo un aporte que vale la pena seguirlo dando un tiempo, el FA verá cuándo es el tiempo, yo hasta 2026 parecería que es claro que voy a estar”.

Consultado sobre si desearía estar en un segundo período al frente del FA, Pereira dijo que la fuerza política deberá “optar si el camino es seguir con esta línea o si el camino es otro. Si fuera por mí creo que podría continuar algún tiempo más; no son cargos para toda la vida, son cargos para un tiempo, pero se podría pensar en algunos años más. Siempre dependerá de lo que el colectivo sienta que yo puedo entregarle en ese lugar o en cualquier otro”.

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