Este lunes la diaria Radio recibió a Marcelo Abdala, presidente del PIT-CNT. Abdala repasó la visión de la central sindical sobre la Ley de Presupuesto y adelantó las principales reivindicaciones de cara al próximo paro general parcial nacional y con movilización, que se realizará el miércoles 29 de este mes. También opinó sobre el caso de Jorge Bermúdez.
Según Abdala, la movilización se da en un contexto marcado por “una serie de conflictos importantes” —como en el rubro de la carne y el sector lácteo—. Adelantó que acaban de acordar una reunión con el presidente Yamandú Orsi para “analizar los efectos de la discrecionalidad arbitraria que muchas veces se manifiesta en las intendencias” y buscar “generar las condiciones para un ámbito de negociación colectiva” este martes por la mañana junto con la Federación Nacional de Municipales e integrantes de Adeom Salto. La reunión será luego de la desvinculación de casi 300 trabajadores públicos en ese departamento.
Otros sectores de trabajadores que están en conflicto también solicitaron reuniones con el mandatario. Este martes “hay otra reunión prevista por el tema de la carne, también con Orsi, que han solicitado desde la Federación Obrera Industria de la Carne y Afines (Foica)” y “la Federación Láctea está concretando cuándo se dará la entrevista, pero también podría ser mañana”, informó Abdala. “Estos conflictos son la manifestación de la ausencia de una estrategia nacional de desarrollo”, consideró.
Así, la antesala del paro se hará en simultáneo a una campaña de sindicalización y, además de la reunión con Orsi, el PIT-CNT prevé una “gran acción” en solidaridad con Palestina “por terminar el genocidio, la paz y la libertad”, que se fijó para el jueves.
Sobre los 299 trabajadores salteños, Abdala cuestionó “si es correcto el modelo de relacionamiento basado en la disponibilidad arbitraria” para que el Estado ofrezca bienes y servicios de calidad. “¿No es correcto defender los convenios colectivos y un estatus de actuación que termine con esa discrecionalidad que le hace mal a los trabajadores, a la administración y a la población?”, preguntó.
En la misma línea, se refirió al proyecto de ley que regula el ingreso a las intendencias y dijo que “definitivamente nos parece que contribuye”. “Queremos que las formas originarias de contratación den garantías de terminar con esa discrecionalidad en la que una parte del personal es cesada en los cambios de administración”, finalizó.
En otro eje, sobre el caso del dirigente sindical Jorge Bermúdez por presunto desvío de fondos, Abdala reafirmó “la ética de la transparencia y la rendición de cuentas” y aseguró que “las finanzas de la central son absolutamente transparentes para las filiales”.
“Nosotros estaremos siguiendo lo que resuelva la filial porque es lo que nos corresponde y exhortamos a que se investigue y se vaya al fondo del asunto. Hasta que no se resuelve que cometiste una falta, sos inocente”, definió. Además, dijo que la FUS es “autárquica” a la hora de designar a su representación frente a la institución.
“Para un movimiento que quiere generar las condiciones para vivir en una sociedad donde el leitmotiv del funcionamiento no sea la acumulación, nos reporta la necesidad de tener la guardia en alto y educar desde la ética”, finalizó.
Discusión presupuestal
Sobre la discusión presupuestal, el líder sindical opinó sobre las posibles redistribuciones y reasignaciones en el Proyecto de Ley. En el marco actual, dijo que es “absolutamente equivocado” el presupuesto que se destinará a la educación y, además, “si se dieran los parámetros de crecimiento del PIB, la educación pierde peso”. “Invertir más en educación y generar partidas para las instituciones vinculadas al desarrollo sería bien visto por el movimiento sindical”, señaló.
“El incremento del 0,2% del PBI parte del llamado espacio fiscal disponible sin tomar en cuenta que el capital transnacional, desde el primer trimestre de 2024 al primer trimestre de 2025, envió al exterior como remesas 5.020 millones de dólares” y que “desde las exoneraciones fiscales hay alrededor de siete puntos del PBI que se entregan al capital sin una evaluación cualitativa”, indicó. Sobre este punto, dijo que en ese lapso de tiempo más de 5.000 millones de dólares salieron como “remesas de utilidades”.
“En Uruguay la inversión extranjera directa no viene por una dotación elevada de mano de obra barata, viene por nuestros recursos naturales” y el Estado “debería poner reglas del juego sobre cómo se ubica la inversión extranjera para que no sea solamente la conveniencia de ellos”, opinó.
Para Abdala, en el país hay “un dogma” que no permite “tocar la estructura tributaria” y no permite a las políticas públicas “avanzar en el criterio de que quien tiene más, pague más”. No obstante, indicó que, a pesar de que “algunas de las medidas tributarias son muy tímidas para solventar una estrategia de desarrollo y un conjunto de necesidades sociales que se han agravado por ajustes de la administración anterior”, igualmente “van en una dirección adecuada”. “No decimos que el presupuesto actual es exactamente igual que el anterior, pero la economía política subyacente es mucho más de continuidad que de transformación”, resumió.
En este sentido, el presidente de la central sindical se refirió a algunas de las propuestas, fundamentalmente el Impuesto Mínimo Global y el posible impacto en el régimen de zonas francas que acusa la cámara que las agrupa. Discrepó con que generaría problemas para la futura captación de inversiones y opinó que “habría que ver cuál ha sido el nivel de inversión en el estado de cosas actual”, al cual evaluó como “una meseta de estancamiento”, y aseveró que “la inmensa mayoría de las empresas son pequeñas y medianas: habría que buscar la forma de tener apoyaturas y las exoneraciones, apoyos y estímulos positivos tendrían que estar orientados” hacia ese sector.
“Es inadmisible que en Uruguay, país que exporta alimentos para decenas de millones, uno de cada tres chiquilines esté por debajo de la línea de pobreza”, sentenció. “Hay que recordar que en el plebiscito [de 2024] algunas personas que hoy ocupan jerarquías en el Poder Ejecutivo nos endilgaron que pretendíamos superar el hambre de los adultos mayores a costa del hambre infantil”, recordó, no sin antes agregar que “la propuesta del 1% tiende a resolver de una manera más sustantiva el problema de atención a la infancia que se estableció como énfasis”.
Los votos de Cabildo Abierto y los salarios en las Fuerzas Armadas
Sobre la posibilidad de que Cabildo Abierto vote las modificaciones tributarias, pero solicite aumentos salariales para personal subalterno de las Fuerzas Armadas, como adelantó el líder del partido, Guido Manini Ríos, Abdala dijo que “hay que verlo en cantidad y calidad”: “No nos anima un sentimiento antimilitarista vulgar”. “Si es para el salario de la tropa, es una cosa, pero para la alta oficialidad es otra”, aclaró.
Sin embargo, planteó: “No hay mejor defensa de la soberanía marítima que tener una política pesquera adecuada asociada al desarrollo de la industria naval y que las empresas estén obligadas a renovar la flota”.
Por otro lado, Abdala evaluó positivamente los acuerdos salariales con distintos sectores del ámbito público, pero los caracterizó como “convenios de empate” y dijo que “les hace falta conquistar avances”. Asimismo, advirtió por tercerizaciones injustificadas o el pasaje de trabajadores permanentes a monotributistas. “Estos acuerdos no significan que no se tenga una opinión crítica sobre el presupuesto, sino que son avances”, dijo.
Finalmente, con referencia al ámbito de negociación privado, Abdala comentó que “los criterios del Poder Ejecutivo son mejores que los de la administración anterior, pero aún insuficientes” y “para que tengan un funcionamiento eficaz debe acertar en sus proyecciones de inflación”. Al mismo tiempo, cuestionó el comportamiento del sector empresarial, ya que “las cámaras están en una actitud de ofensiva del capital tan importante que prácticamente no se discute nada”.