Un grupo de fotógrafos se reúne, levanta su cámara en dirección a la bandera argentina y unas 400 personas a su alrededor los aplauden y piden justicia por Pablo Grillo, el fotoperiodista lesionado de gravedad por las fuerzas públicas este miércoles en Argentina, que permanece en estado delicado, según los últimos reportes de la prensa argentina. La escena fue parte de lo que se vio este jueves fuera de la embajada de Argentina, en el Centro de Montevideo, en el marco de una convocatoria para repudiar el accionar del gobierno de Javier Milei en la movilización que convocaron los jubilados en Buenos Aires.
La embajada de Cuareim y Mercedes ya estaba enrejada mucho antes de las 18.00, hora en la que había sido convocada la movilización por redes sociales. De un lado y del otro de la reja, policías custodiaban la sede diplomática del país vecino mientras algunas banderas argentinas y carteles decoraban la escena: “Maldito el soldado que apunta su arma contra el pueblo” o “Hay que ser muy cagón para no defender a los jubilados” –parafraseando la famosa frase del exfutbolista Diego Armando Maradona– eran algunas de las leyendas.
A las 18.30 una persona comenzó a golpear una olla con una cuchara de madera y el resto de la muchedumbre comenzó a aplaudir, abandonar las aceras y cortar la calle Cuareim. “Milei, basura, vos sos la dictadura”, fue el primer cántico, que sonó mientras algunos militantes colocaban a los pies de la embajada una pancarta blanca, que luego sería pintada con la frase “Con nuestros abuelos siempre”.
También hubo cantos contra Patricia Bullrich, la ministra de Seguridad, encargada del operativo que culminó con una decena de heridos, cientos de detenidos y un accionar denunciado en redes sociales y algunos medios de comunicación como “salvaje”, como consignó en su edición de este jueves el periódico Página 12.
“Soy nacida en Uruguay, pero tengo familia y viví mucho tiempo en Argentina. Es terrible lo que está pasando en Argentina, y te da mucha impotencia estar acá y no poder hacer nada”, dijo a la diaria una de las manifestantes, de unos 30 años de edad, que portaba una de las banderas argentinas. Más allá de la impotencia, según dijo, a esta chica la llevaron a movilizarse las declaraciones de Bullrich, quien en la noche del miércoles justificó la represión y acusó de “militante kirchnerista” al fotógrafo lesionado. “Es como dice el Diego: hay que ser muy cagón para no defender a los jubilados”.
Otra manifestante, de unos 60 años, dijo a la diaria que en la noche del miércoles vio los disturbios y el “ataque a los derechos humanos”, y que eso fue lo que la trajo el jueves a la embajada de Argentina. “Las personas que estamos acá estamos comprometidas con los derechos humanos y en contra del nuevo ataque a los derechos civiles, a los derechos del pueblo, a la gente. Porque aquí hay una represión muy muy fuerte”, sintetizó.
Otra de las personas que se acercaron a la sede diplomática, un joven de 30 años, cuestionó a Bullrich por “justificar toda la represión”. “Reivindico el derecho de los jubilados de ni siquiera vivir, de sobrevivir, porque con lo que les están pagando de jubilación... Encima les sacan los medicamentos, después van y les pegan... Ese es el principal motivo por el que estoy acá”. Este manifestante recordó que a fines de enero hubo otra movilización en Uruguay ante el discurso del presidente Milei en el Foro de Davos.
Sobre la razón de la manifestación en Uruguay, expresó: “Capaz que es para mandar un mensaje al mundo de que acá hay gente que no está ni ahí con ese discurso, para que sepan del otro lado del charco que acá también nos preocupamos por esa realidad y estamos atentos a lo que pasa”.
Megáfono abierto y una proclama
Una representante de la agrupación feminista Pan y Rosas tomó el megáfono y anunció que estaría abierto para el que quisiera expresarse, antes de romper el hielo: “La respuesta que tuvimos solidariamente con nuestros pueblos hermanos es una demostración de que tocan a uno y tocan a todos. ¡Tocan a uno, tocan a todos!”, vociferó.
“Nuevamente, la ministra Bullrich desplegó su protocolo antipiquete y desencadenó una cruel represión con quienes laburaron toda su vida y hoy cobran miserias. Hubo más de 100 detenidas y detenidos, hubo decenas de personas heridas, gaseadas o con perdigones de balas de goma en su cuerpo. Vimos imágenes crueles, como jubiladas que recibían golpes de la Policía y caían en seco al suelo. Vimos el ensañamiento con la prensa y al periodista Pablo Grillo herido gravemente en su cabeza, que hoy pelea por su vida. Ayer el gobierno del misógino, reaccionario y ultraderechista Javier Milei nuevamente dio una demostración de odio”, añadió.
Luego defendió la presencia de los hinchas de clubes de fútbol y cuestionó al gobierno por “criminalizar” la protesta. “Mientras Milei, su hermana y sectores de su séquito son denunciados por ciberestafa y están negociando un nuevo saqueo con el FMI, su gobierno manda a reprimir a los que laburaron toda su vida. ¡Canallas! Mientras ocurre todo esto, gran parte de la supuesta oposición política sostiene al gobierno. Si no, veamos las direcciones sindicales totalmente vendidas y ajenas a los intereses de la clase trabajadora. ¡Canallas también!”, cerró.
Otra chica, perteneciente a un grupo de argentinos residiendo en Uruguay, tomó la palabra para anunciar que se estaría recolectando dinero para los damnificados por las inundaciones en Bahía Blanca. A las 19.30, por el mismo megáfono, anunciaron que se quedarían “algunos minutos más” y pidieron que la gente no se fuera “sola”, sino que lo hiciera “acompañada”.
PIT-CNT: “Exhortamos a parar de inmediato esta brutalidad salvaje”
La Mesa Representativa del PIT-CNT aprobó una moción por unanimidad en la que condenó el episodio y cuestionó la “violencia desmedida de los cuerpos represivos”. “Golpear brutalmente a jubilados y jubiladas cuyas armas son un bastón, una bandera y su voz no parece ser una respuesta adecuada a una supuesta desestabilización del orden público”, puntualizó la central. El PIT-CNT responsabilizó a Milei y a Bullrich por “esta barbaridad autoritaria y antidemocrática” y exhortó a “parar de inmediato esta brutalidad salvaje”.