Este jueves, la Comisión de Hacienda del Senado siguió tratando el proyecto de ley del Poder Ejecutivo que modifica la ley integral contra el Lavado de Activos y el Código del Proceso Penal. En la sesión los senadores recibieron a representantes del Colegio de Abogados del Uruguay y de la Asociación de Escribanos del Uruguay (AEU).
Luego de la sesión, Jenifer Alfaro, presidenta de la AEU, señaló a la diaria que consideran que el proyecto de ley “es un retroceso”, sobre todo porque “se vuelven a duplicar controles de operaciones que se realizan con dinero bancarizado, sin diferenciar el monto”. Sostuvo que eso de por sí es de “gravedad, porque todos los controles que se agregan es tiempo del profesional y, por lo tanto, costos, perjudica a todo el sistema”.
Alfaro explicó que con las normas actuales “se presume que si pagás con dinero bancarizado”, es decir, con una transferencia, una letra de cambio o un cheque, “ya hay un control primario del banco”, cuando el dinero ingresó. Y si no hay otros indicios de riesgo, que evalúa el escribano, como una transacción que involucra a personas “de países riesgosos o una estructura de sociedades”, el profesional no tiene que hacer “diligencia intensificada”.
“¿Qué cambio se propone ahora? Ya no se presume más que al estar bancarizada está controlada, por lo tanto, requiere más estudio del escribano. Pero no es sólo al escribano que perjudica, porque si me requiere más estudio, te voy a pedir más cosas a vos”, dijo. Entonces, sostuvo que el escribano “va a tener que pedirle más información” a su cliente, aunque lo conozca, “y evaluar el riesgo con otra severidad”.
Subrayó que pedir información es “violento”, incluso para clientes que conocen desde hace mucho tiempo, pero se la tienen que pedir igual, “y les cae mal”. Alfaro sostuvo que a veces incluso por esto pierden clientes. “Parece que eso no fuera importante, pero es muy importante: se rompe la confianza porque parece que querés indagar de más. Cuanto más chico es el pueblo, peor. Además, por ley no podés presumir que lo conoces, tenés que investigar igual”, insistió.
Además, Alfaro también criticó que en la iniciativa se incluya la permuta, sin importar el monto, porque en ese tipo de intercambio estrictamente no hay dinero, y a veces hay “compensaciones pequeñas” por las diferencias entre los valores de lo permutado. Aseguró que ese cambio radica en que “se está pensando en el criptoactivo”, o sea, cuando se vende una casa y se paga “con un bitcoin, una moneda virtual, porque eso no es dinero, la DGI ya dijo que entiende que eso es permuta, cosa por cosa”.
“Ahora, si es eso en lo que están pensando, deberían poner criptoactivo, no cualquier permuta de bajo monto; es demasiado abarcativa [la iniciativa]. Entonces, ¿qué es lo que se espera que uno analice? ¿Si lo que equivale tiene el mismo valor? Hay situaciones extremas, en las que es claro que están falseando el precio, pero en la mayoría de las operaciones los escribanos no tenemos capacidad para estar revisando si las cosas que se cambian son razonables. Entonces, otra vez ponen en el escribano obligaciones que exceden la formación y la información que tenemos”, sostuvo.
Alfaro dijo que “si les preocupan las operaciones muy grandes”,se debería establecer “un umbral”, es decir, que desde tal monto, “aunque sea bancarizado”, rige la norma, “pero para operaciones que sean atípicas, anormales, esas que aparecen en los diarios, no la casa normal del vecino”.
Por su parte, el senador blanco Sergio Botana, del Partido Nacional, vicepresidente de la comisión, dijo a la diaria que la comparecencia de la AEU “estuvo muy buena” y que tanto ese gremio como los representantes de los abogados marcaron “algunos apuntes sobre el funcionamiento de la ley, y en los dos casos hicieron defensa de sus respectivas profesiones, de no caer en situaciones de responsabilidad jurídica que no corresponden”. Botana señaló que “fueron planteos muy serios y que algún resultado van a tener”.
Por último, consultada por la diaria sobre lo expuesto por Alfaro, la senadora del oficialismo Liliam Kechichian dijo que todavía no lo evaluaron.