Salud Ingresá
Salud

Foto: Mariana Greif

La Sociedad Uruguaya de Pediatría advierte sobre los riesgos de la utilización de pirotecnia por parte de niños

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

La SUP indica que estos artefactos deben ser utilizados exclusivamente por adultos y con los cuidados necesarios para evitar lesiones.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

La Sociedad Uruguaya de Pediatría (SUP) emitió un comunicado advirtiendo sobre los riesgos de la utilización de pirotecnia por parte de niños y niñas. Exhorta a evitar esta práctica excepto cuando se trate de artefactos que se haya probado que son inofensivos, como por ejemplo los denominados “chasquibum” o bengalas “estrellitas”, aunque siempre bajo supervisión de un adulto. También recuerda a los mayores que manipulen este tipo de productos que lo hagan tomando los recaudos necesarios y en estado de sobriedad.

La campaña se denomina “No son juguetes” y se propone hacer visible el riesgo inminente en la manipulación de fuegos artificiales, específicamente por parte de niños. En este sentido, destaca que año a año se sigue observando “una gran cantidad de personas” con importantes quemaduras y lesiones diversas relacionadas al uso de pirotecnia, como amputaciones de dedos; estas últimas, como consecuencia de la utilización de los denominados “megapetardos” o “superbombas”, según la SUP. Este tipo de artefactos, con distintos nombres comerciales, suelen tener forma cilíndrica, una base y una mecha, y son señalados como los más peligrosos.

Según indica la pediatra Patricia Dall’Orso, integrante del Comité de Prevención de Lesiones No Intencionales de la SUP, en 2018 no se han registrado lesiones graves en niños por manipulación de pirotecnia, aunque advierte que normalmente los casos comienzan a sucederse a partir del 20 de diciembre, cuando empieza la “época festiva”. También señala que desde que se comenzaron a contabilizar los casos, en 2014, hasta la fecha las cifras vienen en descenso: hubo 11 casos en 2014 y dos en 2017.

La SUP exhorta también a ajustarse a las instrucciones y advertencias impresas en los productos y utilizar solamente aquellos que contengan la leyenda “autorizado por el SMA” (Servicio de Material y Armamento). “Otro punto clave es nunca tratar de volver a encender fuegos artificiales que no hayan funcionado en el primer intento”, dice el comunicado. En tal caso, la SUP indica rociar los artefactos con agua y posteriormente desecharlos.

¿Te interesa la salud?
Suscribite y recibí el newsletter de Salud en tu email.
Suscribite
¿Te interesa la salud?
Recibí el newsletter de Salud en tu email.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura