“Tenemos doctora, psicólogos, enfermeros, abarcamos todo un grupo de calidad de vida. Tenemos caminatas, especialistas del corazón que nos vienen a hablar, reuniones con distintos especialistas que nos dan charlas sobre cosas que necesitamos saber, muchas cosas las ignoramos, en parte porque estamos grandecitos y venimos de un grupo de la medicina muy atrasado”, contó Marley, usuaria del Centro de Salud de Sayago de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), que fue reconocido por el trabajo del grupo Calidad de Vida, en el que participan adultos mayores con enfermedades crónicas. El grupo promueve hábitos saludables por medio de actividades fuera del centro de salud: caminatas, talleres de cocina saludable y actividades intergeneracionales; se habla de todo, incluso de la vida sexual. Carmen, una de sus compañeras, dijo que el grupo “va más allá de ir a un doctor que le diga lo que tenemos que hacer, los análisis, retirar medicamentos e irnos; formamos parte. El doctor sale del escritorio, nosotros nos sentamos a la par y ellos nos aconsejen, nos dan las vías para poder salir adelante”.
Este grupo y otras 19 “muy buenas prácticas de resolutividad en el primer nivel de atención” fueron premiados ayer por el Ministerio de Salud Pública (MSP) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS). En 2019, por segunda vez, el MSP y la OPS convocaron a la presentación de buenas prácticas en el primer nivel de atención, que es en el que debería resolverse 80% de los problemas de salud. El primer nivel de atención lo conforman, por ejemplo, las policlínicas y todas las acciones de promoción de salud que los centros organizan en la comunidad. Es el nivel que requiere menos equipamiento, a diferencia de los hospitales –que son de tercer nivel– y del segundo nivel, que tiene un nivel intermedio de equipamiento y un mayor nivel de especialistas que el primero. El buen funcionamiento del primer nivel permite la atención oportuna del usuario, el seguimiento y la continuidad asistencial. Eso es lo que quieren promover el MSP y la OPS con este concurso, que apunta también a reconocer lo que se hace bien y a que otros centros de salud puedan tomarlo como referencia. El ministro de Salud, Jorge Basso, dijo en diálogo con la prensa que la idea es que en un futuro haya un proceso de certificación de las instituciones de salud; por el momento, los proyectos se publicarán en la web del MSP y servirán de orientación para los usuarios al elegir dónde atenderse.
Marley y Cristina fueron elegidas para contar su experiencia como usuarias. También lo hicieron Valentina y Lucas, dos adolescentes que se atienden en Crami, mutualista de la Federación de Prestadores Médicos del Interior en Las Piedras (Canelones). También ellos valoraron la resolutividad del primer nivel de atención. “Hacía mucho tiempo que no iba a algunos especialistas, y uno tiene la instancia para poder hacer todo en un mismo día. Eso es muy importante, porque a veces uno no tiene tiempo, no se da la ocasión de conseguir fechas. Está bueno ir una hora y hacer todo, y que se genere un ambiente muy lindo, más personal, de más calidez del especialista hacia uno como usuario. De esta manera se puede conversar de otra manera, sobre cosas que no se conversan con los padres”, planteó. Lo que hizo el servicio fue cambiar la metodología de atención: ahora los adolescentes, cuando van a sus controles de salud, son atendidos en modo de “circuito” por profesionales de medicina, ginecología, nutrición y odontología, con lo que se reduce la cantidad de veces que deben ir.
Formas de resolver
Se presentaron 93 buenas prácticas: 49 del sector público y 44 del sector privado. Eran de distintos puntos del país, aunque hubo seis departamentos (Rivera, Tacuarembó, Cerro Largo, Treinta y Tres, Lavalleja y Rocha) que no presentaron ninguna. Adriana Brescia, directora general de Coordinación del MSP, explicó que las 93 eran buenas prácticas, pero que este año fueron más exigentes y no se tuvieron en cuenta las prácticas de manera aislada, sino integradas al servicio de salud. Se evaluó cuál era la población beneficiaria, el objetivo, los resultados, la accesibilidad, los recursos con los que contaban, la dinámica de trabajo. El tribunal estuvo integrado por profesionales de diferentes áreas, entre ellos representantes de las facultades de Medicina y Enfermería de la Universidad de la República. De las 93 experiencias que se presentaron, el tribunal seleccionó 41, a las que visitaron.
Basso remarcó que para dar una mejor calidad de atención se requiere “mucha voluntad política de las instituciones, compromiso de los funcionarios, mucho trabajo de equipo, mucha articulación con los usuarios, con la comunidad, salir del consultorio, preocuparse por el mundo real que ocurre fuera del consultorio”. Varias de las experiencias cumplieron con ese cometido de “salir del consultorio”. Por ejemplo, el seguimiento y la atención en domicilio que hace la policlínica de Ombúes de Lavalle a adultos mayores con dificultades de accesibibilidad, puérperas y pacientes que estuvieron internados; los visitan luego de que fueron dados de alta para reafirmar las indicaciones, identificar factores de riesgo y evitar ingresos o reingresos. La policlínica Salvador Allende, de Barros Blancos, también hace visitas domiciliarias a personas con dificultades de acceso y a quienes requieren cuidados paliativos, así como el Centro de Salud de la Ciudad de la Costa y el de la policlínica del Saint Bois (todos ellos liderados por equipos de medicina familiar y comunitaria). También salió del consultorio el equipo de salud de Carmelo, que brinda talleres semanales en los liceos de la localidad, en los que abordan temas de interés de los adolescentes; y la unidad de cuidados paliativos de Camedur (Durazno), que extiende esos cuidados en domicilio a quienes lo necesiten.
Otras prácticas abordan algunos de los objetivos sanitarios nacionales, definidos en 2016 por el MSP. Entre ellos están, por ejemplo, la atención a personas que viven con VIH que hace el Centro de Salud Ciudad del Plata, que trabaja en red con la Red de Atención Primaria de ASSE; la atención integral a adolescentes embarazadas menores 15 años que hace el Centro de Salud de Maroñas, que las acompaña en territorio aplicando un protocolo de seguimiento que prioriza la respuesta a sus necesidades; y el acompañamiento en la lactancia materna que hace el Servicio Médico Integral. También hay enfermedades crónicas, como el asma infantil, para lo que Comeca, de Canelones, involucra a instituciones educativas y deportivas para mejorar la atención de niños y adolescentes.
Muy buenas prácticas premiadas
- Programa de educación y atención del asma infantil. Comeca, Canelones.
- Fortalecimiento de la participación comunitaria para la atención integral a los problemas de salud de forma colectiva. Policlínica Helios Sarthou, UDA Saint Bois. ASSE, Montevideo.
- Cuidados paliativos en domicilio. Camedur, Durazno.
- Grupo Calidad de Vida: promoviendo hábitos saludables. Centro de Salud Sayago. ASSE, Montevideo.
- Programa Internos: atención integral al adulto mayor. Comeca, Canelones.
- Servicio de salud para adolescentes. Policlínico central de Crami, Las Piedras (Canelones).
- Atención en el primer nivel a personas que viven con VIH. Centro de Salud Ciudad del Plata, ASSE, San José.
- Seguimiento, guía y atención en domicilio. Policlínica Ombúes de Lavalle. Camoc, Colonia.
- Dispositivo de salud mental con enfoque comunitario. Policlínica Salvador Allende. UDA Canelones al Este, ASSE, Barros Blancos, Canelones.
- Atención integral a adolescentes embarazadas menores de 15 años, Centro de Salud Maroñas, ASSE, Montevideo.
- Espacio transdiciplinar para el abordaje de complejidad en el primer nivel de atención. Policlínica Balneario Buenos Aires, UDA Rural Maldonado, ASSE, Maldonado.
- Atención y seguimiento de grupos de obesos, diabéticos e hipertensos. Policlínica San Fernando, ASSE, Florida.
- Visitas y atención domiciliaria a usuarios con enfermedades crónicas. Policlínica Salvador Allende. ASSE, Barros Blancos, Canelones.
- Promoción y prevención de salud de adolescentes en centros de educación secundaria. Camoc, Carmelo (Colonia).
- Reperfilamiento de oficina de atención al usuario. Centro de Salud Giordano, ASSE, Montevideo.
- Inserción de la medicina familiar y comunitaria. Centro de Salud de Ciudad de la Costa, ASSE, Canelones.
- Acompañamiento en lactancia materna. Clínica del Niño y Adolescente, Servicio Médico Integral, Montevideo.
- Abordaje del tabaquismo con enfoque integral y grupal. Mutualista Hospital Evangélico, Colonia del Sacramento.
- Nefroprevención en el primer nivel. Comeca, Canelones.
- Práctica integral e interdisciplinaria con enfoque de atención a la salud individual, familiar y comunitaria. Policlínica rural de Migues UDA Canelones al este, ASSE, Migues (Canelones).