Luego de la situación de desabastecimiento del miércoles, el jueves “salió leche fresca” de forma normal a los comercios, según dijo a la diaria Daniel Fernández, presidente del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu). Fernández planteó que los comercios que fueron más afectados por el desabastecimiento fueron los más pequeños y en los barrios de zonas “más carenciadas” donde “la leche fresca es la vida”.
En diálogo con la diaria Luis Goichea, de la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC), comentó que “el día que estuvo complicado” en la distribución de leche fue el miércoles en la madrugada, en el que no se entregó en Montevideo y en el área metropolitana. En principio, Goichea planteó el miércoles a Telemundo y Subrayado que el problema surgió porque las cámaras de distribuidores decidieron no hacer el reparto dado que, tras las medidas del sindicato, el horario de carga era más tarde.
Sin embargo, explicó a la diaria que los distribuidores le comentaron al sindicato que, en realidad, la decisión de no distribuir fue de Conaprole: “La empresa envió a todos los distribuidores una comunicación para que no fueran a cargar porque no había stock en cámara. La decisión salió de la empresa”. Para compensar la escasez del miércoles, Goichea comentó que en la madrugada del jueves “los distribuidores lácteos de Montevideo y área metropolitana cargaron un 10% más de lo que llevan habitualmente”.
“No va a haber problemas con la leche”
Uno de los planteos que hizo AOEC fue que debido al conflicto podía haber escasez de otros productos lácteos, como yogures, postres y algunos quesos. Con respecto a eso, Fernández comentó que “siempre falta alguno” de esos productos y que el problema es que los camiones de distribución salen con una cantidad que no da para abastecer a todos.
“Nosotros esperamos que se normalice. Lamentablemente los otros productos uruguayos, que son de muy buena calidad, no llegan a suplir todo el faltante que significa Conaprole. [Los clientes] terminan yendo a comprar esos productos argentinos que están hoy en plaza”, comentó Fernández.
En cuanto a la evolución de la situación entre la empresa y el sindicato, Fernández señaló que “Conaprole es famosa por los conflictos” y que “siempre en un día, en dos o en cuatro terminan solucionándolo”. Añadió que no recuerda “un conflicto salvaje” en Conaprole de larga duración y recordó que por ley no se puede dejar de entregar leche fresca, pero que el problema es que “no te entregan la cantidad que tienen que entregarte”.
Por su parte, Goichea afirmó que “no va a haber problemas con la leche” porque los trabajadores seguirán “produciendo normalmente”, ya que las medidas sindicales que están tomando no afecta “el envasado”. De todas formas aclaró que sí puede haber problemas el miércoles de la semana que viene, día en que el sindicato celebrará una asamblea general nacional extraordinaria, ya que Conaprole “puede hacer la misma jugada” que hizo en los últimos días e impedir que los distribuidores carguen leche fresca.
En términos generales, el dirigente valoró que el sindicato tiene “controlado el conflicto” y está teniendo “el efecto” que pretende. Recordó que el gobierno y el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social hablaron mucho sobre las cláusulas de paz y prevención de conflictos y que “el año pasado el ministro [Pablo Mieres] salió a vender que no la queríamos”.
“Hoy somos nosotros los que estamos reclamando que se aplique y la empresa no. Ni una sola vez salió a pedir la cláusula de paz ni de prevención de conflictos”, afirmó. Además, añadió que “alrededor de 30” trabajadores de la planta de leche ultrapasteurizada (UHT) de Rodríguez están desde el 2 de mayo sin actividad: “No están de paro como dice Conaprole; los compañeros y compañeras UHT están dispuestos a ir a trabajar si se les respetan los acuerdos que teníamos en las formas de trabajo”, aseguró.
Un conflicto “irracional”
En un comunicado, las Cooperativas Agrarias Federadas (CAF) manifestaron su “total respaldo” a Conaprole en el conflicto. De acuerdo a la institución, el agravamiento del enfrentamiento “genera un desabastecimiento en el mercado local” y perjudica a “los consumidores, almaceneros, distribuidores y a sus respectivos empleados al vender menos productos de leche”. Además, apuntaron que la situación afecta “a los productores de leche, principalmente pequeños y medianos familiares, a los cientos de trabajadores de la cooperativa y demás integrantes de la cadena”.
Las CAF destacaron el rol de Conaprole en el abastecimiento de leche y señalaron que incorporar tecnologías manteniendo puestos de empleo y sin afectar el salario ni las condiciones laborales de los trabajadores “es clave para asegurar la continuidad a largo plazo de la cooperativa como una empresa de vanguardia que apuesta a la calidad”.
Por eso, señalaron que esperan que “el sindicato tome una actitud razonable, abandonando este irracional conflicto y ajustándose a las actuales circunstancias”. Indicaron también que apelan al diálogo para “generar acuerdos” que “redunden en beneficios de las partes en un ámbito de cordura y sensatez”.