El presidente Luis Lacalle Pou estuvo este martes en Bella Unión en la inauguración de las obras viales realizadas por el Ministerio de Transporte y Obras Públicas en la ruta 3. Habló con la prensa sobre varios temas de actualidad, entre ellos la situación en la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande y la compra de nuevos frigoríficos por parte de la empresa brasileña Minerva Foods.

La CTM de Salto Grande ha estado en el centro del debate luego de que se aprobara una partida extrapresupuestal de 200 millones de pesos, autorizada por Presidencia de la República. Según su presidente, el nacionalista Carlos Albisu, la partida es “para ponerse al día con los costos de funcionamiento”; sin embargo, el Frente Amplio considera que se trata de casos de “corrupción” y “clientelismo”. Estas denuncias provocaron que desde Presidencia se encomiende una revisión de los contratos y las funciones de quienes ingresaron a la comisión en este período.

“En cuanto a la gestión de Salto Grande, nosotros hemos visto una muy buena gestión que a la gente de acá, del norte, le pueden preguntar. Hace muchos años que reclamaban que las regalías de Salto Grande no fueran al sur o terminaran en el gobierno central. Pedían, y es lo que se está cumpliendo, que haya una fuerte inversión en la sociedad de la región, que no es sólo Salto, también es Paysandú, Río Negro, Artigas”, dijo en primer término Lacalle Pou.

En segundo lugar, resaltó el respaldo que tiene a Albisu: “Una persona de confianza, que ha trabajado muy fuertemente por el departamento y que además cuenta con mi aprecio y mi afecto personal”. No obstante, remarcó que su opinión sobre el jerarca no es la mirada del gobierno sobre la gestión de la comisión.

En relación con los contratos, dijo que desde el gobierno están “haciendo un estudio acabado de cada una de esas contrataciones. No puedo decir hoy, no puedo ser concluyente, si no ha habido una exageración en el tipo de contratos y en la forma que han ingresado algunos de estos contratos en Salto Grande”.

Lacalle Pou comentó que se están “estudiando y analizando tranquilamente” los contratos de los integrantes de la comisión, “porque si hay que tomar alguna medida, se va a tomar, como no nos ha temblado el pulso en ninguna otra situación desde que empezó el gobierno”.

El presidente aseguró que se han hecho auditorías internas y externas “constantemente” en la comisión de Salto Grande, y agregó que si algún dirigente político solicita más se van a hacer, porque “el primero que quiere que las cosas se hagan bien es el gobierno, porque como defiende una gestión general en Salto Grande, si hay excesos de alguna manera, vamos a ser contundentes al respecto”.

En concreto sobre las acusaciones de clientelismo que surgieron desde la oposición, el presidente señaló que esperará los resultados de los estudios antes de pronunciarse, aunque repitió: “No lo descarto, no descarto quizá una práctica exagerada”.

“Nosotros estamos analizando la forma de selección y las tareas de cada uno. Yo conozco algunos, los que son de acá conocen algunos y conocen el trabajo importante que están haciendo para CTM. No puedo decir que todos los contratados lo hagan. Por eso espero tener toda la información; no cobrar el grito, pero tampoco dormirnos por si hay algo para hacer”.

“Hay preocupación” por la compra de Minerva

El presidente también fue consultado por la posible adquisición de nuevas plantas frigoríficas por parte de la multinacional brasileña Minerva Foods, que inquietó a las gremiales rurales y también a actores del gobierno, ya que podría concentrar casi la mitad de la industria frigorífica del país. Lacalle Pou admitió que “hay preocupación” por el tema, pero destacó la “inversión importantísima” que hay detrás.

“Vamos a alegrarnos de que hay importantes firmas internacionales que ponen su vista, ponen sus ojos en lo que hace a nuestro país”, remarcó el presidente, y agregó que “si esto genera o no algún tipo de concentración –no monopolio–, le corresponde a Defensa Comercial”, en referencia a la Comisión de Promoción y Defensa de la Competencia, del Ministerio de Economía y Finanzas, que deberá autorizar la compraventa.

Lacalle Pou apuesta al “profesionalismo y la independencia” de esa dependencia, que hará un informe para determinar si la compra es perjudicial para el comercio nacional, y a partir de esos resultados el Poder Ejecutivo tomará una decisión.

Consultado por los tiempos que lleva elaborar estos informes, el mandatario aseguró que deben hacerse con rapidez, para traer “certidumbre” sobre el negocio, ya que “lo que tiene que generar Uruguay en todas las actividades, en todos los rubros comerciales, es certidumbre: se puede o no se puede, y no andar durmiéndola o haciendo moñas”.

“Cuanto antes Defensa de la Competencia reciba la información que se requiere para estos temas, y antes tenga un dictamen, más tranquilidad para todos. Para los posibles compradores, para los posibles vendedores, para los productores que están preocupados en este sentido por la concentración, y para el gobierno que da lineamientos claros”, finalizó.