Danubio obtuvo un triunfo de mucha importancia, 2-1 en Jardines ante Juventud de Las Piedras y se sumó al grupo de punteros del Clausura. Con dos magistrales definiciones de Fabián Canobbio en sendos tiros libres, la franja pudo superar a un rival que no le hizo fáciles las cosas.
La tarde estuvo muy fría y ventosa y a algunos desprevenidos los agarró mal parados. El encuentro en el inicio tuvo supremacía local. Matías Zunino generó la primera posibilidad de gol, tras trepar por la derecha de la ofensiva y mandar la pelota al medio. Gonzalo Pérez remató e hizo despertar el primer “uh” de la hinchada, que todavía se estaba acomodando en las tribunas.
El equipo de Leo Ramos se benefició con muchas subidas de Zunino en el primer tiempo, lo que hizo que prácticamente en la defensa quedaran tres hombres. El mágico Canobbio probó de media distancia e hizo reaccionar al Gallego Berbia en dos oportunidades, la segunda con una pirueta bastante particular.
A los 21 minutos llegaría la primera alegría de la tarde para Danubio. Hubo una falta que en la cancha parecía un tanto dudosa. Canobbio se hizo cargo de la ejecución y la pelota besó la red. “¡Bien, Fabián!”, exclamó la voz del estadio.
Los pedrenses apenas tuvieron un disparo del Oveja Reyes, que se fue lejos. No lograban hacer entrar en acción a los delanteros y no estaban finos Hebert Collazo y Guillermo Chavasco por los laterales. Pero a pesar de esto, a Lucas Cavallini le quedó un mano a mano y no falló. Un empate que festejaron mucho los 120 hinchas de Juventud que se fueron hasta Jardines.
Los defensas visitantes seguían haciendo faltas cerca del área, sin darse cuenta de que el número 8 rival estaba inspirado. Apenas algunos segundos después de la igualdad, Fabián tuvo otra pelota quieta de frente al arco. Distinta forma pero igual resultado: 2-1.
Antes del final de la primera parte, Gonzalo Pérez tuvo una clarísima tras una salida muy lejos de su arco de Berbia, pero De Barros la sacó en la línea.
Los segundos 45 minutos tuvieron un giro. Es que Danubio le entregaba la posesión del balón a su rival y se replegaba en su propio campo. De todas formas, los vestidos completamente de azul en la tarde de ayer no supieron encontrarle la vuelta al juego. Sobre el cierre el DT De Armas puso varios futbolistas en la zona de ataque. Las más claras para llegar al empate fueron del ingresado Icart, con un remate que pasó cerquita del palo derecho, y de Poncet, que forzó una buen atajada de Castillo.
La franja casi lo liquida de contraataque pero no pudo. Un cabezazo de Carboni que sacó Berbia, una en los pies de Matías Pérez y un disparo en el horizontal de Hugo Soria fueron las chances con las que contaron los orientados por Leo. Luego del pitazo final del árbitro, los cuerpos locales se aflojaron y pudieron festejar la victoria. Es que, después de mucho tiempo, pueden ver a Danubio en lo más alto.