Mañana amenazante en Sayago. Los nubarrones grises estaban al acecho cuando la pelota comenzó a rodar en el césped del Parque Roberto, donde Racing y Cerro se veían las caras en la mañana dominical ante buena cantidad de público.
Parecía que los albicelestes arrancaban mejor que su rival, pero rápidamente el trámite se emparejó y el ida y vuelta ganó la escena. Mario Regueiro cayó en offside varias veces, en el afán de ganar las espaldas de los defensas rivales.
A los 15 minutos, la escuelita estuvo cerca; Gabriel Fernández le pagó y Mathías Cubero la desvió, en una buena intervención, con la mano derecha. En la segunda jugada, Ignacio Nicolini volvió a rematar y la pelota se estrelló en el palo. De un lado se veían los empujes de Didí Zabala y del otro, las salidas por el lateral derecho de Andrés Ravecca.
Apenas 10 minutos más tarde llegó el gol. Juan Pablo Rodríguez desbordó por la banda izquierda y metió el pase al medio para que Zabala definiera y pusiera el 1-0, luego de que Cubero no pudiera agarrar el balón, que se le escabulló entre las manos.
Y un rato después, un momento histórico: Ernesto Dudok recuperó la pelota en la mitad de la cancha, se la quitó a Carlos Grosmüller y la abrió para Cristian Tabó, que se la devolvió para que el volante anotara su primer tanto en Primera División con la camiseta de Racing, único club al que defendió en toda su carrera.
Después de varios minutos, Cerro se aproximó con Juan Delgado y un remate de Regueiro. Pero nada cambió y el score para irse al descanso marcaba 2-0 para el local.
Ta, bo
Pablo Rodríguez hizo dos cambios para la segunda parte, y Cerro quedó con una línea de tres hombres en el fondo. Esto le dio mayor poder ofensivo, pero también dejó más espacio para que los atacantes adversarios se movieran.
No se habían jugado ni 10 minutos cuando los cerrenses descontaron con un golazo: una gran combinación entre el recién ingresado Hugo Silveira y Regueiro le permitió al primero definir antes de que la pelota tocara el piso. Se pusieron 1-2 y todavía faltaba mucho por jugar.
Cerro pudo haber empatado: entre Silveira, Regueiro y Fabricio Núñez casi lo hacen, pero los rebotes ayudaron a los de Sayago. Grosmüller realizó una buena jugada individual que terminó con una atajada bien abajo de Jorge Contreras para impedir la igualdad.
En la cancha de enfrente, Cubero le sacó un disparo cruzado a Zabala y Tabó dio otro tiro en el palo. Y tanto insistieron Tabó, la figura de la cancha, y Racing, que el gol llegó. El número 9 la tomó en la derecha, pasó a cuatro hombres de camiseta azul y mandó la pelota a mimosear con la red, anotando uno de los goles más lindos de lo que va del Apertura. La cosa no quedó ahí: ya con Cerro totalmente desarmado, Lalo Aguilar sentenció el resultado final.
Ganó 4-2 ante Danubio y 4-1 ayer. El elenco de Mauricio Larriera arrancó con todo y está en lo más alto de las posiciones; ahora deberá enfrentar a Atenas de visitante. Para los albicelestes la historia es totalmente opuesta, e intentarán recuperarse frente a Juventud en la etapa que viene.