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Hasta la victoria, siempre

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Wanderers goleó 4-1 a Tacuarembó y provocó el descenso de los norteños.

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Y el fútbol es así. El descenso es parte de la competencia y el dramatismo está implícito en cualquier brega deportiva. Pero no es dramatismo de fantasmitas del siglo XXI que entran volando en drones ni nada por el estilo. Para muestra basta un botón: una tribuna con tacuaremboenses de pie aplaudiendo a un equipo que descendió goleado en el Parque Viera. Porque esos hinchas reconocieron el enorme Torneo Clausura de Tacuarembó, que compró vidas a lo Candy Crush, ganando partidos desde hace unas cuantas fechas para no descender. Tuvo un Apertura muy malo, en el que tal vez pagó el precio de acostumbrarse a la categoría, con un equipo que contó con escasas incorporaciones respecto al que ascendió -y además dejó de lado al exitoso entrenador que en una rueda enormemente exitosa lo había dejado en la A- condenó a los norteños.

El partido fue intenso porque al Tacua lo apretaba la necesidad y al bohemio no le sobra nada si mira la tabla del descenso del año que viene. Eso de irse de copas, de noches de Avellaneda y Barinas, les puede hacer pagar un precio que los del Prado quieren afrontar antes de que termine la temporada. Cada pelota sacaba chispas. Pero de arranque nomás, Maxi Olivera acompañó una bocha a la salida de un córner y Wanderers se ponía 1-0.

Felipe Carvalho, el zaguero atlético del Tacua, agarró la lanza y se fue arriba. Alimentado por el zurdo Fagúndez, de exquisita pegada, y con la presencia del inoxidable Aldo Díaz, los norteños buscaron el empate. Y estuvieron cerca en ese primer tiempo. El bohemio perdonó al no concretar varios contragolpes.

El segundo tiempo aumentó en intensidad. El Tacua no quería despedirse así nomás. Al bohemio le costó liquidar el partido, pero dos goles del gurí de 18 años Santiago Bellini ayudaron. El primero con una gran habilitación del Nico Albarracín, y el segundo asistido por Maxi Olivera (el gurí crece a pasos agigantados). Tacuarembó descontó con un penal que Esteban González ejecutó muy bien. El final fue una muestra del recambio bohemio: Lea Paiva apoyó a Reymúndez para que definiera muy bien y pusiera el definitivo 4-1.

Así el Tacua se va para volver. Seguro. Hasta la victoria.

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