Mientras Peñarol y El Tanque Sisley jugaban sin hinchadas, en otras tres canchas hubo fútbol a puertas y arcos abiertos. Defensor Sporting debutó con victoria 2-0 sobre Racing y se jacta de ser líder invisible. Lo evidencia la tabla de puntos perdidos: en la de ganados lo superan varios, pero todos ellos ya jugaron dos partidos. Los de Juan Tejera deben el encuentro de la primera fecha ante Sud América, que también debutó este fin de semana en el Apertura. En San José, los buzones igualaron a uno ante el invicto Fénix. El equipo de Capurro suma tanto como Wanderers, que obtuvo su primera victoria tras superar 3-2 a Villa Teresa en el Nasazzi.
La paz sin altura
Tras clasificar a la segunda fase de la Sudamericana en la capital boliviana, Defensor Sporting aterrizó en el Apertura y conquistó la paz de saberse capacitado para dar la pelea de siempre. Por ahora, el cuerpo banca la doble actividad y los escollos que depara el camino. Por ejemplo, quedarse con diez jugadores con el segundo tiempo apenas comenzado. Le pasó tras la roja vista por Sebastián Ariosa, que recibió dos amarillas y dejó en evidencia la dualidad de criterios del árbitro Leodán González.
El violeta ganaba el partido desde los ocho minutos, cuando Martín Rabuñal robó una pelota arriba y Felipe Rodríguez definió contra un palo. El acierto cotizó lo que el dólar. La primera parte sólo dejaría espacio para una segunda situación de riesgo. Fue para Racing, pero Martín Campaña respondió con jerarquía ante un cabezazo de Pablo Lacoste, tras un tiro libre frontal de ese interesante volante que es Leandro Ezquerra. Con su fútbol, el de su compadre y también talentoso Ignacio Nicolini, tres medias puntas y un delantero neto, Racing fue un cúmulo de buenas intenciones, pero le faltó profundidad. Los zagueros de Defensor anularon a Líber Quiñones y Campaña cortó centros y pases bajos. Del otro lado, Brian Lozano fue el mejor de un ataque que, incluso ante la escasez de espacios del primer tiempo, se mostró de más calidad que el locatario. El juvenil fue clave para cerrar el partido. Apiló y habilitó a Santiago Barboza, que empujó la pelota para el 2-0. Iban 15 del segundo tiempo. No faltaba media hora. Más bien, sobraba.
Hacer de tres
Alto partido se jugó en el corazón del Prado: Wanderers y Villa Teresa, duelo que terminó con victoria de los bohemios 3-2. El bohemio sacó ventajas porque supo pegar en los momentos claves, aunque fuera el Villa el que propusiera en buena parte del trámite. Los recién ascendidos, siempre corriendo el marcador de atrás, lo intentaron y vendieron cara la derrota.
El primer gol en el Nasazzi lo hizo Gastón Rodríguez, que sacó jugo de un pase que le metió Diego Scotti, y definió rasante ante el achique del arquero Pablo Tourn. Se pusieron 1-0 cuando iban 23 minutos del primer tiempo. Cinco minutos más tarde, cuando aún Villa Teresa buscaba reponerse tras la adversidad, con la intención de seguir plantando cara, Kevin Ramírez, el otro punta bohemio, puso el 2-0 luego de una buena jugada conjunta con su socio Javier Cabrera. El segundo tiempo rindió en emociones. Ni dos minutos iban cuando puso el descuento Cristian Gutiérrez, que ingresó para el comienzo de la parte suplementaria. El descuento para el Villa, que a partir del gol se entusiasmó, afianzó su mediocampo y logró quitarle la pelota a Wanderers, que hasta ese momento mandaba con tranquilidad. Diego Rata Martiñones pudo empatar, pero la bola se fue, caprichosa como siempre. Pudo ser lo más justo, según lo que se veía en la cancha, pero el fútbol de justicia sabe poco y nada.
Con magia, el bohemio logró sacar el partido a su favor. Fue interesante la asociación entre Gastón Rodríguez y Matías Santos, que terminó con pase quirúrgico del primero para el segundo, y el Mago la mandó a guardar. Era mucha cosa, fue 3-1. En la hora y de tiro libre, Adhemar Martínez, el buen volante central oriundo de Cerro Largo, clavó un tiro libre imposible para Leonardo Burián y decretó el definitivo 3-2.
A mano en San José
El interesante choque entre Sud América y Fénix jugado en la tarde del sábado en el Casto Martínez Laguarda maragato finalizó con un justo empate. Si bien los dos tuvieron chances de abrir el marcador en varias ocasiones, las emociones en el field maragato se reservaron para la recta final del partido. El interesantísimo volante argentino Ángel Luna abrió el marcador a los 79 minutos para los naranjas que dirige el también argentino Jorge Vivaldo, y ya sobre el tiempo reglamentario Lucas Cavallini marcó el empate para los de Rosario Martínez.