La de ayer fue una tarde soñada para Defensor Sporting. Goleó 3-0 en el Franzini a Universitario de Perú y quedó muy bien perfilado para seguir de largo hacia los octavos de final de la Copa Sudamericana, donde sus potenciales rivales son los argentinos Lanús o Belgrano de Córdoba. Héctor Romário Acuña entró a jugar 30 minutos y se convirtió en la gran figura de la tarde, con dos anotaciones.
El peligro comenzó a acechar el arco peruano bien temprano. No habían llegado a acomodarse los hinchas que llegaron al Franzini cuando, a los dos minutos, Defensor Sporting tuvo la chance de abrir el score. Estuvo bárbaro el Tato Santiago Barboza para bajársela a Nicolás Olivera, que quedó de frente al arco, entrando por el sector medio del área grande, y remató. ¡Uh! Qué cerca pasó del palo derecho del golero peruano. Pudo haber sido el primer gol en el amanecer lluvioso del partido. El horario era atípico para un partido internacional, y el tiempo no acompañó mucho, pero siempre es lindo ir a ver fútbol entre semana de tarde.
Universitario amagó con complicar a Defensor y al toque, en la recarga, el duraznense Henry Giménez apareció para meter un derechazo que pasó cerca del palo derecho de Martín Campaña. Después, a pesar de que los cremas manejaban muy bien el balón, sobre todo los habilidosos Edison Flores y Raúl Ruidíaz, la viola, que complicó muchísimo a la U por la derecha, inclinó la cancha y en varias ocasiones tuvo la chance de poner el primer gol.
Una serie de rebotes en el área chica, un taco de Olivera y una tapada de Carvallo; de todo pasó en los minutos finales del primer tiempo, pero la pelota no entró. Después, Barboza -cada vez más parecido al cantante de Los Cafres-, tuvo la más clara: el rochense la bajó con la parte externa del pie izquierdo, tras un pelotazo largo desde el fondo, y definió muy bien de derecha, pero la pelota se fue besando el palo. Otra vez tuvo el primero Defensor, y se le volvió a escapar.
El primer tiempo se fue 0-0 por esas cosas del fútbol. Fue muy buena la primera etapa del volante de Juanicó, Felipe Rodríguez, que al cambiarse de andarivel -él pasó a jugar por la derecha y Brian Lozano por la izquierda- fue determinante.
La calidad
Los primeros minutos del segundo tiempo cambiaron de color. Si bien los tuertos presionaron bien y atacaron con velocidad, fue otra vez el uruguayo de Universitario, Giménez, el que metió un zurdazo cruzado y la pelota dio en el caño izquierdo porque Campaña llegó a tocarla. Peligro en el área defensorista. Los peruanos se posicionaron un poco más adelante en la cancha y buscaban el importante gol de visitante.
Tras un rato de paridad y poca cosa en las inmediaciones de las áreas, apareció el grito de gol sobre el arco de Julio Herrera y Reissig. Pase en profundidad del Bocha Mathías Cardacio para la subida por la derecha de Emilio Zeballos, centro preciso al medio y la aparición del baixinho Acuña, terrible goleador, para anticipar el balón en el primer palo y poner el 1-0. El petiso había entrado hacía poco, diez minutos antes, y ya ponía arriba a los tuertos.
Después Mauro Arambarri, a quien le gusta aparecer en el área rival, tuvo el segundo, pero el arquero José Carvallo, de gran partido en el arco crema, tapó el 0-2 en su contra. A esa altura del encuentro Barboza era fundamental en el ataque de Defensor, pivoteando, bajando y asistiendo para que le llegaran por los costados. Notable, Tato. Y exquisito el Huevo Lozano, como dándole la razón a Tabárez por haberlo citado a la selección. Fue él el que la acarició sutilmente con la derecha, en un tiro libre al borde del área que pasó por encima de la barrera y subió a 2-0 al marcador.
El segundo violeta fue tremendo golazo, y el equipo siguió yendo en busca de encarrilar aun más la serie. Y lo consiguió: encontró el tercero, otra vez a partir de una gran jugada de Felipe Rodríguez y un remate seco de Acuña, que es un goleador espectacular, para concretar el definitivo 3-0, un gran resultado para Defensor, que fue el justo ganador del partido y podrí ahaber marcardo alguno más, como para viajar comodísimo para la revancha en Lima.
El violeta hizo los deberes otra vez, y esperará a la definición, que será en un par de semanas.