Con el yanqui Kristian Clarkson, enorme figura para levantar el equipo en el último tramo del campeonato, que ayer hizo 36 puntos y bajó 15 rebotes, sumado a las manos calientes de Gastón Semiglia y Camilo Antunes, que pusieron 23 y 14 unidades, respectivamente, Unión Atlética le ganó anoche a Montevideo en la cancha de Aguada 85-75 y se adjudicó la Liguilla del Metropolitano, que le asegura un lugar en la Liga Uruguaya de Básquetbol (LUB) 2016-2017. Con la derrota, Montevideo perdió sus chances de subir en esta temporada. Stockolmo, que anoche venció a Nacional 103-82 en la cancha de Tabaré, y Sayago, que hizo lo propio 75-72 ante Larrañaga en el escenario de Cordón, jugarán a partir del sábado la eliminatoria por el tercer ascenso disponible.
Con la oreja pegada a la radio, whatsapp caliente y a voz en cuello; así se vivió en la cancha de Aguada buena parte de la definición de la Liguilla. Montevideo le hizo las cosas difíciles a Unión Atlética, y los hinchas azulgranas, en la desesperación de querer saberlo todo y deseando que Stockolmo perdiera para evitar sorpresas, se impacientaban a dos bandas. Pero el azul del Prado no quiso sorpresas: al término del primer tiempo ganaba 62-41, y cerró el partido con un 103-82 que no daba lugar a sobresaltos. Fue recién en el último cuarto que Unión Atlética pudo quebrar a Montevideo: le sacó 19 tantos cuando faltaban cinco minutos, y el alivio se transformó en festejo. El equipo azulgrana volverá a la LUB luego de aquel descenso de enero de 2014.
El riverense Rodrigo Riera, entrenador de Unión Atlética, que cuando el equipo descendió defendió la camiseta azulgrana como jugador, fue determinante para el regreso del club a la LUB. Muchas de las características de juego con las que Riera insistió se vieron en el encuentro de ayer. Mucho tiro exterior, principalmente con Semiglia y Antunes (en el primer cuarto se fueron a puro triple y entre ambos metieron cinco de seis tiros desde los 6,75 metros), se sumó a la seguridad en la base que aportaron Germán Cortizas y el mercedario Cristian Mazzuchi.
Por otra parte, el juego interior de Clarkson se impuso tras un momento complicado, porque Montevideo siempre estuvo cerca. Se fueron al entretiempo 36-33. Cada vez que Unión Atlética quería despegar en el tercer chico, Harrison, Federico Pereiras y Nicolás Sánchez se las arreglaron para pegarse en la pizarra. El 60-50 con el que finalizó el tercer cuarto no daba garantías. La tribuna cantaba pero vivía con la presión en la sien. Hasta que Unión Atlética se hizo fuerte en la defensa, cerró los caminos a Harrison en la pintura (el fraybentino Hugo Timote se impuso con cuatro tapas).
Amortizando puntos luego de recuperar la bola, aquel viejo equipo llamado Unión de Sociedades de Basket-Ball que nació en la esquina de Cerrito y Misiones, en la Ciudad Vieja, y terminó en Nuevo Malvín con el nombre de Unión Atlética, luego de la triple fusión con el Club Buceo de Basket-Ball y el Deportivo Nuevo Malvín de Hockey, se metió en la LUB una vez más.