La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) comunicó ayer que presentó ante la Justicia de Paraguay una denuncia contra sus tres últimos presidentes por la presunta comisión de los hechos punibles de lesión de confianza, apropiación indebida, lavado de dinero, producción de documentos no auténticos, y asociación criminal.
De acuerdo a la investigación interna realizada por la Conmebol, los paraguayos Nicolaz Leoz y Juan Manuel Napout y el uruguayo Eugenio Figueredo, los tres últimos presidentes de la entidad, son responsables por el desvío de por lo menos 129 millones de dólares.
Con su denuncia ante la Justicia la Conmebol pretende conseguir recuperar al menos una parte del dinero, además de pedir la condena de los tres implicados, quienes ya están en prisión domiciliaria por sus vínculos en el entramado de corrupción denominado FIFA gate, que estalló en mayo del año pasado a instancias de la investigación promovida por la Fiscalía de la ciudad estadounidense de Nueva York.
La investigación realizada por la Conmebol abarcó el período de 2000 a 2015 y en ella el que quedó peor parado fue Leoz, quien de acuerdo a los datos recabados desvió casi 27 millones de dólares para dos cuentas, una registrada a su nombre y otra registrada a nombre de la empresa NL Stevia SA, que era propiedad de Leoz y sus dos hijas. Según informó el portal brasileño globoesporte.com, desde la Conmebol también se comprobó el desvío de 33 millones de dólares desde la entidad para cuentas de bancos con sede en Panamá y las Islas Caimán en el período de 2000 a 2004, en el que Leoz era presidente.
Mientras Figueredo está en prisión domiciliaria en Uruguay y Leoz en Paraguay, Napout –quien comandó la Conmebol entre agosto de 2014 y diciembre de 2015– fue extraditado a Estados Unidos, donde será juzgado. A diferencia de los otros dos ex mandatarios, Napout en todo momento se declaró inocente de los cargos que se le imputan.