Con goles convertidos por Hugo Silveira y Sebastián Rodríguez, Nacional se impuso 2-0 a Cerro como visitante en el estadio Luis Tróccoli. Con la victoria, los tricolores se adjudicaron el grupo B y el domingo jugarán la final del Intermedio con Defensor Sporting, ganador de la serie A.
Por superioridad manifiesta, así ganó Nacional ayer en la cancha albiceleste. Salvo en los diez minutos iniciales, en los que Cerro se adueñó de la pelota y los tricolores sólo atinaron a defenderse, fue todo de Nacional. Marcó presencia en la mitad de la cancha, como acostumbra, aunque ayer lo hizo con un mediocampo atípico respecto de las últimas oncenas titulares: Felipe Carballo y Gonzalo Porras se alternaron el eje, mientras que Sebastián Rodríguez jugó un poco más suelto. Desde ahí, como eje neurálgico de creación de fútbol, comenzaron a hilvanarse las chances de gol de Nacional. También se destacaron en el conjunto albo las sociedades por las bandas: por la izquierda, Alfonso Espino y Kevin Ramírez, y por la derecha, Jorge Fucile y Tabaré Viudez. Precisamente, desde lo colectivo y hacia lo individual, el jugador más decisivo fue Viudez. Por momentos se recostó atrás para asociarse a los volantes y lo hizo bien, pero también se volcó hacia la banda derecha, bien pegado a la raya, como los viejos punteros, y fue decisivo: de él partió el centro para que Hugo Silveira convirtiera el 1-0 con su materia preferida: cabezazo fuerte y arriba.
Esa sociedad Viudez-Silveira, sobre todo en el primer tiempo, fue la fórmula tricolor para crear peligro. Si no fuera por la muy buena actuación del arquero de Cerro, Yonatan Irrazábal, la diferencia podría haber sido mayor en los primeros 45 minutos. La mejor intervención del uno cerrense fue minutos antes del gol: luego de un desborde de Viudez y un preciso centro, Silveira la tocó con el pie e Irrazábal la sacó formidablemente con una reacción de malabarista, al zambullirse hacia su izquierda para salvar en la línea.
El gol fue vital en el desarrollo del juego. Marcó distancias y dio aun más tranquilidad a Nacional, que, ante la duda, sabía que tenía la tabla de posiciones y el saldo de goles como aliados para quedarse con el grupo. En la parte complementaria, la intensidad cambió por lógicas en la dinámica del juego: el suelo, muy mojado, empezó a estar cada vez más pesado y comió piernas. Cerro fue con rebeldía en busca del empate. El Japo Jorge Rodríguez y Maureen Franco contaron con sus chances, pero todas terminaron en las manos de Esteban Conde, que tuvo además una notable atajada tras un cabezazo dentro del área. Pero el cierre definitivo del partido se dio con el segundo tanto de Nacional. El tiro libre lo ejecutó Seba Rodríguez desde la izquierda. Fue más centro que otra cosa, pero en la atropellada nadie la tocó; Irrazábal quedó congelado ante las piernas que no llegaron, y la pelota entró al segundo palo, luego de picar en el área chica. La brecha de dos goles fue demasiado. A Cerro le pesaron las bajas –Jonathan Barboza fue probado y descartado en los últimos minutos antes de empezar el partido, a lo que hay que agregarle que Richard Pellejero no estaba para jugar, si bien estuvo en el banco de suplentes como alternativa–. En un plantel corto como el cerrense, esas dos bajas fueron demasiado margen en contra. Y no sólo por extrañar, sino porque el director técnico colombiano, Diego Alonso Barragán, debió improvisar la conformación de la mitad de la cancha: ubicó al Japo Rodríguez casi como volante central y al juvenil Agustín Sant’Anna, lateral de profesión, como ocho. Ni uno ni otro se adaptaron. Hay ausencias que son como el olvido: recuerdan las distancias.
La final del Intermedio será entre los dos mejores equipos en lo que va del año. Lo dice este torneo, en el que Nacional ganó 19 de 21 puntos, y Defensor 17 sobre 21. También lo dice la Tabla Anual, en la que ambos han sacado luz respecto del resto. Y también lo dice lo que pasa en la cancha, donde ganar (y perder) es cuestión de método.
Día y hora
Nacional y Defensor Sporting jugarán la final del Torneo Intermedio el domingo a las 16.00 en el estadio Centenario. Según determina el reglamento del campeonato, en caso de que haya empate en los 90 minutos de juego habrá alargue, y en caso de ser necesario el título se definirá por penales. Los detalles sobre las localidades que ocupará cada parcialidad, así como los precios de las entradas serán acordados por las dirigencias de los clubes en el correr del día de hoy. La final del Intermedio no puntúa para la Tabla Anual y lo que estará en juego será una plaza para la Copa Sudamericana del año que viene. Además, el ganador del Intermedio jugará con el Campeón Uruguayo la Supercopa Uruguaya al comienzo de la próxima temporada. En caso de que un club gane ambos torneos, disputará la Supercopa con el vicecampeón del Intermedio.