El Danubio Fútbol Club tiene desde ayer nuevo presidente: el doctor Leonardo Goicoechea, tal como lo anunció la secretaría de prensa de la institución franjeada. El cambio se debe a que el doctor Boris Igelka presentó la renuncia a su cargo por “razones personales”, ocho meses después de haber ganado las elecciones, en diciembre del año pasado.
En la edición de la diaria del miércoles 14 de junio se daba cuenta de que se avizoraba un cambio en las autoridades danubianas. Consultado acerca de las versiones que circulaban con respecto a una supuesta licencia de su cargo como presidente del club de la Curva de Maroñas, Igelka había respondido: “En principio estoy evaluando una licencia por razones de trabajo. Me surgieron unas actividades en el exterior que no estaban previstas, y eso me obliga a viajar a América Central. Voy a tener que seguir viajando cada vez más seguido, y Danubio exige una actividad permanente por la gran institución que es. No solamente se trata de la división mayor, sino que tenemos un trabajo bastante arduo en el club”. El presidente danubiano había agregado en aquella ocasión: “Yo no sé de dónde sacaron que me iba. No sé por qué me lo preguntan. Es una licencia. Esto es dinámico”. Casi dos meses después de esas declaraciones se confirmó la renuncia y desde hoy Goicoechea ocupará el cargo por lo menos hasta fines de 2018, momento en que habrá nuevos comicios en Danubio.
A pesar de que va y viene –porque su estudio de abogados de Montevideo sigue funcionando–, Igelka se instaló en Guatemala para seguir adelante con sus negocios personales.
¿Y la pelota?
En lo estrictamente deportivo, los dirigidos por el riverense Gastón Machado están abocados a los trabajos de pretemporada en El Pinar. Allí se quedarán hasta el sábado, para luego pasar a entrenar en doble horario en el complejo que los danubianos tienen en la ruta 101.
Para hoy de mañana está previsto un partido amistoso con Villa Española. Con respecto a las incorporaciones, Machado ya cuenta en su plantel con el delantero ex Villa Española Pablo Silva, que venía desempeñándose en Comunicaciones de Guatemala. También se sumó al grupo el volante ofensivo David Terans, formado en Rentistas y con pasaje en Santiago Wanderers de Chile; además, volvió Gonzalo Pollo Pereira, que estaba a préstamo en Villa Española.
Los encargados de prensa del club danubiano le confiaron a la diaria que la “urgencia mayor” es el lateral izquierdo. Para ese puesto hay un nombre: el cardonense Matías Pérez, que ayer se despidió de Fénix en su cuenta de Twitter. Inmediatamente, algunos hinchas empezaron a preguntarle si volverá a ponerse la camiseta franjeada, y todo parece indicar que en las próximas horas firmará contrato con el club en la sede de la calle 8 de Octubre.
Otro que puede pegar la vuelta a Danubio es Ribair Rodríguez. El volante central de 29 años, que viene de jugar dos temporadas en el ascenso mexicano, en Leones Negros de Guadalajara, está entrenando en el club, pero si le surge una posibilidad desde el exterior, partirá. En caso de que no se concrete lo de Ribair, Machado buscará un jugador para ese puesto.
Dos ascendentes jugadores juveniles, el Puma José Luis Rodríguez y Marcelo Saracchi, forman parte del patrimonio del club y están en vidriera, pero por ahora se quedarán; el sanducero Ignacio González también podría irse si llega una buena oferta. Si bien en un momento se coqueteó con su regreso al club que lo vio nacer, esa posibilidad no se concretó porque Nacho aún tiene contrato con Wanderers, pero según confiaron desde el club, hay “un 99%” de certeza de que volverá el año que viene.
Danubio deberá trabajar para suplir las ausencias que tendrá a la hora de afrontar el próximo semestre. El primero en irse fue el lateral izquierdo Lucas Olaza, una de las figuras del equipo y dueño de todas las pelotas paradas. El zurdo formado en River Plate emigró a Argentina, donde defenderá los colores de Talleres de Córdoba. También partieron otros futbolistas que conformaban la base del equipo titular: Carlos Grosmüller, que se fue a Sandefjord de Noruega; Giovanni Zarfino, que jugará en Extremadura de España; el goleador salteño Jonathan dos Santos, que partió hacia México para jugar en San Luis; el golero Salvador Ichazo, que volvió a Torino de Italia; uno de los zagueros, Matías de los Santos, que jugará en Millonarios de Bogotá; y Juan Manuel Olivera, que jugará en River Plate. Además, no seguirán el lateral volante brasileño Diogo Silvestre, el volante Rodrigo de Oliveira, que volverá a vestir la camiseta de Cerro Largo, y el delantero de la selección sub 20 Joaquín Ardaiz, que fue vendido a principio de año –lo compró un grupo inversor inglés, pidió pase para El Tanque Sisley y el club fusionado lo cedió a Danubio–, pero aún no tiene destino confirmado.