El director de Aduanas, Enrique Canon, reconoció ayer que puede haber entrado a Uruguay dinero proveniente de coimas cobradas por el kirchnerismo, aunque opinó que si eso ocurrió no fue gastado en el país. “Para los que dicen que la Aduana es un desastre, les decimos que no es así, sino que es doblemente desastrosa: falla en los controles para evitar que entre efectivo sin declarar y también en los controles para evitar que salga”, aseguró el jerarca. Mientras tanto, la Policía y la Justicia continúan realizando allanamientos en busca de empresarios argentinos que estarían involucrados en las maniobras delictivas, aunque sin resultados. Una fuente policial explicó: “Es difícil encontrar a estos empresarios vinculados al kirchnerismo, porque desde diciembre de 2015 están disfrazados de macristas”.
Según el funcionario policial, “cuando estas personas ingresaban al país con dinero eran claramente garcas, pero tenían un look informal, medio campechano, como si estuvieran cerca del pueblo. Pero ahora abandonaron este disfraz y, si bien siguen siendo igual de garcas, visten de traje, tienen pinta de banqueros y soretean a los empleados que los atienden”. La fuente reconoció que la capacidad para la metamorfosis de los empresarios corruptos cercanos a los gobiernos representa una de las dificultades más grandes para atraparlos. “Es como si un barrabrava cambiara de club cada vez que a su cuadro le va medio mal. ¿Cómo haríamos para identificarlos?”.