El Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) emitió este martes un aviso especial por el ingreso de una “gran nube de polvo” desde las áreas costeras, y luego agregó que permanecerá hasta este jueves, cuando se pronostican lluvias que producirán el cambio de la masa de aire, lo que contribuirá a disipar la nube.
El fenómeno es producto del polvo que se levantó en la Patagonia, Argentina, a raíz de incendios forestales en la zona; el material fue transportado por las fuertes rachas de viento del lugar.
Lo que ocurre es “la suspensión de material particulado fino en la atmósfera”, según publicó Inumet. Esto genera una reducción de la visibilidad y una tonalidad grisácea en el cielo.
El origen del incendio
Los incendios forestales que azotaron a esta región del país vecino comenzaron durante la tarde del lunes; según autoridades, se originaron en cercanías de un complejo de cabañas y se propagaron a las zonas de Cholila, Golondrinas, Puerto Patriada, Lago Puelo y El Maitén.
Este martes se mantenían activos y se registraron focos en varias localidades de la provincia de Chubut, con dificultades para controlarlos debido a las fuertes rachas de viento que entorpecen las tareas de los brigadistas, según informó Efe.
El fuego ya afectó más de 60 hectáreas de vegetación de la localidad de Epuyén, en el noreste de Chubut, según publicó la Secretaría de Bosques de la provincia andina en un comunicado.
El sur argentino suele verse afectado por incendios durante el verano. En los meses de enero y febrero de 2025 se registraron los peores focos en esta región en tres décadas: incendios en más de 37.000 hectáreas de Chubut, Río Negro y Neuquén, que perjudicaron viviendas y ecosistemas locales debido a la sequía, las altas temperaturas y los fuertes vientos.