Ciencia Ingresá
Ciencia

No culpen al alcohol

1 minuto de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago

Estudio examina la relación entre el alcohol y la agresión sexual.

Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

Nadie duda de que el argumento “borracho no vale” es tan estúpido como insuficiente para justificar un avasallamiento de los derechos de una tercera persona. En el caso de la agresión sexual tras el rechazo, una reciente investigación con citas simuladas lo hace ver más inadecuado aun.

Para el estudio, liderado por Jacqueline Woerner, del Departamento de Psicología de la Universidad Estatal de Wayne, Michigan, 62 hombres de entre 21 y 29 años fueron puestos a interactuar con una mujer simulada por computadora y se les pidió que se comportaran como lo harían si realmente quisieran obtener una cita. Para ello, también se les dio una lista de proposiciones, tanto sexuales como no sexuales, para hacerle a la mujer virtual. A su vez, “el agente femenino fue programado” para incentivar algunas propuestas sexuales pero rechazar otras, siendo el rechazo mayor cuanto más insistente fuera la otra parte. Parte de los hombres tomaron alcohol hasta llegar a un nivel de 0,08% en el aliento y otros mantuvieron el diálogo virtual completamente sobrios.

Los investigadores encontraron que “las actividades sexuales consensuadas estuvieron positivamente asociadas con la cantidad de veces que los participantes insistieron luego del rechazo de la mujer” y el efecto del alcohol fue claro, ya que insistieron mucho más los hombres intoxicados que los que no habían tomado. 40% de los participantes no recibió más de un rechazo por cita, “indicando que no continuaron insistiendo por sexo luego de que la mujer puso un límite”. Sin embargo, a la hora de las conductas agresivas, la sorpresa fue grande: “Cuanto más negaciones sexuales recibieron los participantes, hicieron más comentarios verbales hostiles hacia la mujer”, dicen en la publicación, y luego agregan: “Contrariamente a lo que pensábamos, la relación entre rechazo sexual y comentarios verbales hostiles no fue mayor en los hombres intoxicados”. Si bien los autores reconocen las limitaciones del estudio, al menos en este diseño experimental no hay que buscar en el alcohol la excusa para un comportamiento inaceptable.

Artículo: “The effects of alcohol intoxication and sexual interest on men's sexual persistence and hostility in a dating simulation”

Publicación: Aggressive Behavior (5/7/2018)

Autores: J. Woerner, A. Abbey, S. Pegram, B. Helmers.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

¿Te interesa la ciencia?
Suscribite y recibí la newsletter de Ciencia en tu email.
Suscribite
¿Te interesa la ciencia?
Recibí la newsletter de Ciencia en tu email cada dos viernes.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura