Tres de las empresas de cable beneficiadas por resoluciones de Presidencia de la República y el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) para ofrecer servicios de internet son de Montevideo: Monte Cable (Monte Cablevideo SA), TCC (Tractoral SA) y Nuevo Siglo (Riselco SA), ligadas a los canales de televisión abierta 4, 10 y 12, respectivamente; y dos son del interior: Korfield, de Colonia, y Praimar, de Pando.
De ese modo, Antel pierde el monopolio de la prestación de la servicios de internet, vigente desde sus inicios por entenderse este servicio como una continuación de su monopolio en telefonía fija.
La Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual vigente, aprobada en 2014 y que el gobierno actual buscó reformar –aún no obtuvo los votos en el Parlamento–, prohíbe en su artículo 56 que los prestadores de servicios de comunicación audiovisual puedan prestar al mismo tiempo “servicios de telecomunicaciones de telefonía o transmisión de datos”. Sin embargo, este artículo fue impugnado por varias empresas de cable y la Suprema Corte de Justicia (SCJ) lo declaró inconstitucional. Hasta 2018, la SCJ tenía una integración no favorable al reclamo empresarial, pero tras el cambio de ministros varió la postura.
Las cinco resoluciones –una por cada empresa– del Ejecutivo consignan las declaraciones de inconstitucionalidad de la SCJ y señalan que los informes de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones y de la Asesoría Técnica de la Dirección Nacional de Telecomunicaciones y Servicios de Comunicación Audiovisual agregados al expediente “dictaminan que se ha dado cumplimiento a los requisitos establecidos por la norma para conceder la licencia solicitada”.
Cambios en Colonia
Korfield, de Colonia, pertenece a Nicolás Scheck, Ignacio Ferrés y a Eduardo, Daniel y Gabriel Bomio, y es la propietaria de la empresa de cable Telespectáculo, de Colonia del Sacramento, que compite con Del Faro, propiedad del grupo Romay.