Las pruebas de la vacuna contra el coronavirus que desarrollan la farmacéutica AstraZeneca y la Universidad de Oxford fueron suspendidas porque uno de los voluntarios que recibió una dosis presentó una reacción grave.
La aparición de “una enfermedad potencialmente inexplicable” implica de forma rutinaria la suspensión de las pruebas mientras se investiga el hecho, indicó un portavoz de AstraZeneca a a la cadena estadounidense CNBC. Un vocero de Oxford señaló que “en los ensayos grandes, los malestares sucederán por casualidad, pero deben revisarse de forma independiente para verificar esto con cuidado”.
Desde que entró en la fase de ensayos clínicos, unas 30.000 personas recibieron dosis de la vacuna de AstraZeneca y Oxford en Brasil, Estados Unidos, Reino Unido y Sudáfrica. Previamente había sido probada en 1.000 personas en Reino Unido, país en el que están instaladas tanto la farmacéutica como la universidad. Según varios medios, el caso adverso se presentó en Reino Unido. La suspensión de las pruebas se extiende a los cuatro países.
Esta es una de las vacunas que ha generado más expectativas de las 30 que están en la etapa de ensayos clínicos en todo el mundo. Argentina y México tienen un acuerdo para fabricarla y distribuirla en la región, si es que finalmente es aprobada.
El portavoz de AstraZeneca indicó que se “está trabajando para acelerar la revisión de este incidente único con el objetivo de minimizar cualquier impacto potencial en los planes del ensayo”.