María José González es la directora del hospital de Young, en Río Negro, y también es médica en la Cooperativa de Asistencia Médica (CAMY) en esa ciudad. Según informó El Observador y confirmó la diaria con fuentes de la institución, González fue cesada del cargo en CAMY por haber presionado al personal del vacunatorio para vacunar a dos personas que no tenían autorización. Según supo la diaria, este jueves la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) también inició una investigación administrativa urgente para aclarar la situación.
Según explicaron a la diaria fuentes de las instituciones, el vacunatorio en Young funciona físicamente en el espacio de CAMY, pero quienes se encargan de vacunar son tanto los funcionarios del hospital como los empleados de la mutualista y miembros de la lucha antituberculosa.
La situación que terminó con la desvinculación de González tuvo lugar días atrás, cuando la jerarca presionó al personal sanitario para que vacunara a un argentino que no tenía cédula uruguaya y a otra persona que tampoco había sido agendada por el Ministerio de Salud Pública. González comenzó a insistir en vacunar a estas personas mediante mensajes de Whatsapp, llamadas e incluso se presentó en el vacunatorio para asegurarse de que recibieran sus dosis, a lo que los funcionarios se negaron.
Incluso, relatan las fuentes, llegó a decir que en el caso del ciudadano argentino, se lo podía inscribir “con otro número de cédula y cuando el hombre saque la suya se le corrige por el correcto”. Para los implicados en la situación hay un factor agravante, porque mientras que González era su par en CAMY, es su superior en el hospital público.
Además de las autoridades de ASSE, que ya iniciaron la investigación, está en conocimiento de la situación el subsecretario de Salud Pública, José Luis Satdjian.