Fue una gran y rotunda victoria de River Plate jugando como local en el Saroldi. El equipo darsenero fue muy superior, conjugando además una buena idea estratégica planteada por su entrenador y un gran desarrollo de sus futbolistas. Fue uno de esos triunfos redondos, en los que el que aparentemente lleva las de perder, por todo lo que representaba la avasallante marcha de Nacional, con siete victorias en igual número de presentaciones, lo termina ganando de manera inapelable.
El primer interrogante a develar era qué haría River si efectivamente Nacional le presentaba tres delanteros, teniendo en cuenta que los de Jorge Fossati juegan con tres centrales. En teoría, habría un riesgoso juego en igualdad numérica. Sin embargo, las respuestas empezaron a llegar por otro lado.
El enorme caudal ofensivo de River generó, a los siete minutos, una jugada por la izquierda en la que Luis Urruti, de primera, le cedió el balón a Adrián Leites para que levantara un centro de zurda directo a la frente de Juan Manuel Olivera, que lo transformó en gol. Un golazo de Juan Manuel, por todo.
Hubo más cosas para estudiar, contar y hasta para sorprenderse. La gran cantidad de futbolistas riverplatenses en el campo de Nacional propició jugadas precisas; por ejemplo, una que se produjo a los 15 minutos, con Leites de titiritero, Olivera de asistidor y Urruti de definidor: recibió de espaldas al arco y con un preciso movimiento de media vuelta sacó un remate cruzado con el que venció irremediablemente a Manotas Luis Mejía.
La inteligencia y adaptabilidad de los sistemas de Álvaro Gutiérrez promovió una rapidísima variante táctica en el campo. El director técnico tricolor llevó a Rafael García a jugar como central junto a Guzmán Corujo y Felipe Carvalho.
A los 35 minutos, cuando Nacional no encontraba la fórmula para achicar la diferencia, una jugada armada por la izquierda entre Gonzalo Castro y Matías Viña terminó en una definición exquisita del cordobés Gonzalo Bergessio, que puso el 2-1. ¿Empezaría otro partido? Quedaba una hora para verlo.
De lujo
Era previsible esperar una carga continua de Nacional en busca del empate. A los cuatro minutos de la segunda partió una linda jugada que, con una buena conexión, terminó en una definición de Felipe Carballo que propició una excepcional atajada de Gastón Olveira.
A los 15 minutos, una maravillosa jugada de Leites que incluyó una pisada en el área le dio el tercero a River. Un golazo, el 3-1. Y ni hablemos de lo que podría haber sido, apenas un minuto antes, una jugada maradoniana de Urruti, que dejó un tendal de rivales por el camino y definió cruzado pero afuera.
Desde la línea, Gutiérrez volvió a reaccionar: mandó cambios de nombres y otra vez de esquema, pero ya nunca pudo volver a ponerse en partido. River fue muy superior y por eso ganó así. Una bomba.
Detalles
Cancha: Parque Saroldi.
Árbitros: Esteban Ostojich, Richard Trinidad y Javier Irazoqui.
River Plate (3): Gastón Olveira; Horacio Salaberry, Gonzalo Viera, Joaquín Fernández y Nicolás Rodríguez; Sebastián Píriz, Maximiliano Calzada, Joaquin Piquerez (65′ Juan Pablo Plada) y Adrián Leites; Luis Urruti (61′ Matías Arezo) y Juan Manuel Olivera (79′ Matías Alonso). Entrenador: Jorge Fossati. Suplentes: Francisco Tinaglini; Agustín Ale, Facundo Ospitaleche, Gabriel Leyes.
Nacional (1): Luis Mejía; Guillermo Cotugno, Guzmán Corujo, Felipe Carvalho y Matías Viña; Rafael García (64′ Thiago Vecino); Brian Ocampo (59′ Santiago Rodríguez), Gabriel Neves, Felipe Carballo y Gonzalo Castro (65′ Pablo García); Gonzalo Bergessio. Entrenador: Álvaro Gutiérrez. Suplentes: Sergio Rochet; Mathías Cardacio, Pablo Barrientos, Sebastián Fernández.
Goles: 8′ Juan Manuel Olivera (RP), 15′ Luis Urruti (RP), 35′ Gonzalo Bergessio (N), 60′ Adrián Leites (RP).