Al final, y por los Rodríguez, Deportivo Cali y Peñarol empataron 1-1 en Colombia en un buen partido del carbonero que, con un poquito más de oficio y ejecutividad, se pudo haber quedado con el triunfo. Los aurinegros ganaban 1-0 con un buen gol de Gastón Rodríguez, que había sustituido al lesionado Cristian Rodríguez; al final y después de un error de Maxi Rodríguez —el hermano de Gastón—, que había sustituido a Ignacio Lores, Carlos Rodríguez, el colombiano, metió un golazo impresionante de esos que dan alas y hasta perpetúan el impulso hasta el último segundo. Una pena que Peñarol no se haya venido a Uruguay con los 3 puntos que casi tenía en el bolsillo, aunque no está nada mal el empate y el gol de visitante. Ahora todo se definirá el próximo miércoles en el Campeón del Siglo.
Moviendo el azucarero
El comienzo fue parejo, pero de inmediato los colombianos empezaron a adueñarse del juego, fundamentalmente abriendo por banda derecha y jugando en velocidad contra Lucas Hernández que en más de una oportunidad se vio superado. Pasados los 10 minutos iniciales los carboneros buscaron a través de combinaciones como en aquella en que Cristian Rodríguez habilitó a Ignacio Lores por derecha, que se sacó a uno de encima y su remate fue interceptado por el arquero Camilo Vargas. Empezó a liberarse de a poco el elenco uruguayo. Peñarol se fue acomodando y, a través de una combinación precisa de Hernández, Guzmán Pereira y Lucas Viatri, este último cabeceó al arco, estuvo cerca de abrir el marcador cuando sólo corrían 15 minutos de juego. Se pueden haber contado en la primera parte entre tres y cuatro posibilidades bien establecidas por Peñarol. En una de ellas, el Cebolla al internarse al área e intentar controlar sintió una molestia muscular en su pierna izquierda y debió abandonar el juego a los 40’, sustituido por Gastón Rodríguez.
Le puso cabeza al partido
No pareció cambiar el juego al salir de los vestuarios. Es más, Peñarol volvió a arrimar al gol y solo faltó más ajuste en el centro de Lucas Hernández, pero después la empezó a pasar mal el visitante porque Deportivo Cali apostó al juego aéreo del delantero argentino Juan Carlos Dinenno y con dos precisos testazos estuvo a punto de abrir el marcador. Primero fue un excepcional gesto técnico de cabeza impulsando la pelota con muchísima fuerza contra el travesaño, y después otra vez terrible cabezazo interceptado por Kevin Dawson.
Pero era una buena noche de los de Diego López, que volvieron a imponer condiciones. Finalmente el gol llegó de una jugada imprevista, porque era una pelota boba picando en el círculo central que agarró sesteando a Danny Rosero, que acosado por Gastón Rodríguez la perdió y el discontinuo zurdo se la llevó casi media cancha para definir con elegancia ante la salida de Camilo Vargas. Lo siguió haciendo de buena manera Peñarol en todas sus líneas, incluyendo una vez más a su arquero Dawson, que atajó una pelota increíble ante el peligroso ariete argentino Juan Dinenno.
En la hora, ya con Peñarol peligrosamente retrasado y Deportivo Cali cargando hasta con su golero, llegó el empate de los caleños en una definición que estará entre las mejores de la Sudamericana, pero que sin embargo fue propiciada por una serie de errores casi inconcebibles de los mirasoles que por dos veces perdieron la pelota que fue a parar a Carlos Rodríguez, que controló de zurda y sacó un derechazo impresionante que se estrelló contra las redes de Dawson a pesar del vuelo del coloniense.