Ya se sabe: en una final emocionante que se definió en alargue, Liverpool le ganó 4-2 a Nacional y se consagró campeón de la Supercopa uruguaya. Agustín Dávila, Alan Medina, Martín Correa y Fabricio Díaz metieron los goles para la festejada copa. Felipe Carballo y Gonzalo Castro hicieron los tantos del bolso.
Los méritos negriazules fueron varios. Primero, desde lo colectivo: juego con líneas apretadas, transiciones en bloque, buen trato de pelota y verticalidad ofensiva. Segundo, las individualidades: un arquero tan seguro como desconocido; un lateral izquierdo de gran rendimiento, Camilo Cándido –que a los 115 desbordó como si fuera el minuto 1–; dos volantes de la cantera ya certificados, Alan Medina y Agustín Ocampo, y tal vez la gran sorpresa de la tarde: Díaz, mediocampista de 16 años que jugó con la soltura de un adulto y, además, terminó colocándose de 9 porque estaba acalambrado, pero no por eso dejó de correrlos a todos (cuando pudo). Encima, hizo el definitivo gol.
Cuando es fútbol
Por aplicado y efectivo, Liverpool sacó ventajas de inicio. Convirtió en la ocasión más rápida que tuvo y desde ahí manejó el partido desde los espacios, porque la pelota fue de Nacional. Los negriazules, con Hernán Figueredo como tapón y con cuatro volantes más por delante, poblaron ese sector del campo y el bolso no pudo hacer andar su andamiaje.
Directo, Liverpool cada vez que robó la pelota fue vertical hacia el arco de Luis Mejía. Prueba de ello fue el gol: roba Díaz, entrega a Figueredo, este pone a correr a Correa, que tira el centro rastrero para la entrada de Dávila.
Como no pudo progresar con orden desde el sector central, Nacional buscó a Pablo García por derecha. Asociado con Chory Castro por el carril del 10, el puntero insinuó en varias ocasiones. El bolso contó con un par de tiros libres al borde del área, pero careció de acierto. La más cerca fue sobre el final, cuando se armó una suerte de flipper en el área de Liverpool y la sacaron dos veces en la línea.
Obligado a buscar el empate, Gustavo Munúa cambió el sistema táctico. Entró el argentino Claudio Yacob y Nacional se paró 4-3-3. Más allá del dibujo, el bolso buscó lo mismo: crear en el medio, descargar y profundizar por las bandas. Liverpool siguió con su receta de esperar y contragolpear. Receta que le siguió dando premio, porque, pese a estar muy atrás en su campo, se las ingenió para atacar. Atacar y tener puntería: tremendo golazo al ángulo se mandó Medina.
Con el 2-0 en contra y lleno de rebeldía, el tricolor apretó el acelerador. Yacob empezó a mover los hilos, Castro fue su compinche en el armado, Seba Fernández entró picante y, poco a poco, llegaron las chances de gol. Andrés Mehring, arquero argentino de Liverpool, fue erigiéndose como figura.
Los minutos finales fueron electrizantes. Con el partido planteado 2-1 tras el descuento de Carballo se jugó prácticamente en campo negriazul. Campo con murallón, porque la defensa de Liverpool sacó casi todo. En la última, con el corazón en la boca, Castro encontró el hueco y fue el 2-2.
Por cómo llegaron al alargue, física y anímicamente, parecía que Nacional se llevaría puesto a Liverpool. No fue así, sucedió todo lo contrario. El principio del cuento: Liverpool y los contragolpes. En dos casi seguidos llegaron el tercero y el cuarto, y la copa viajó a Belvedere.
Detalles
Cancha: Campus Municipal de Maldonado.
Árbitros: Gustavo Tejera, Richard Trinidad y Javier Irazoqui.
Nacional (2): Luis Mejía; Armando Méndez, Guzmán Corujo, Miguel Jacquet (77' Thiago Vecino) y Ayrton Cougo; Joaquín Trasante (46' Claudio Yacob), Felipe Carballo; Brian Ocampo, Pablo García (57' Sebastián Fernández), Gonzalo Castro; Gonzalo Bergessio. Entrenador: Gustavo Munúa.
Liverpool (4): Andrés Mehring; Federico Pereira (73' Maximiliano Pereira), Franco Romero, Ernesto Goñi y Camilo Cándido; Fabricio Díaz, Alan Medina (66' Gustavo Viera), Hernán Figueredo y Agustín Ocampo; Agustín Dávila (78' Guillermo Firpo) y Martín Correa. Entrenador: Román Cuello.
Goles: 4' Agustín Dávila (L); 58' Alan Medina (L); 79' Felipe Carballo (N); 95' Gonzalo Castro; 106' Martín Correa (L); 111' Fabricio Díaz (L).
Hincha de Liverpool, en los festejos tras el título de la Supercopa.
Foto: Federico Gutiérrez