La Premier League femenina marcó un récord total de asistencia, con 717.721 espectadores, a falta de seis partidos para que concluya la competición. La temporada pasada cerró con una marca de 689.297 asistentes en total.
Una de las claves para este hito fue que los distintos equipos utilizaron los mismos estadios que utiliza el fútbol masculino. El ejemplo más claro es el de Chelsea, que jugó el viernes pasado contra Arsenal en Stamford Bridge, con un récord de asistencia de 32.970 personas. Eso fue incentivado por el parate en el fútbol masculino debido al rodaje a nivel de selecciones.
En ese contexto, una vez finalizada la próxima jornada de la Women's Super League, todos los equipos habrán jugado al menos una vez en su cancha principal durante esta temporada, con la única excepción de West Ham United.
En esta liga, el récord de asistencia a un partido se marcó en la victoria de Arsenal sobre Manchester United en febrero, con más de 60.000 personas en el Emirates Stadium.
Hasta ahora, el Camp Nou sigue siendo el escenario que albergó un encuentro que marcó un antes y un después en la temporada de 2021-2022, llegando a batir el récord de asistencia en dos ocasiones: la primera en la vuelta de los cuartos de final de la Champions League femenina ante Real Madrid, cuando el Barça se impuso 5-2 a su adversario ante 91.553 aficionados. A las pocas semanas, el estadio culé fue el escenario de la ida de las semifinales contra Wolfsburgo, partido que el conjunto español ganó 5-1 ante 91.648 personas, siendo este el récord vigente de asistencia del fútbol femenino.
Todo esto luego de lo ocurrido en 1999 en la final del Mundial femenino disputada en el Rose Bowl de Pasadena, en el partido entre Estados Unidos y China, que reunió en las gradas del estadio de California a 90.185 aficionados que vieron cómo la selección anfitriona consiguió su primer título mundial antes de convertirse en la selección más fuerte del mundo.
Estos récords son la demostración clara de que el fútbol femenino viene creciendo a pasos agigantados a nivel mundial y que las iniciativas que ayudan a visibilizar tienen consecuencias positivas para la disciplina.