Luego del viaje de Ignacio Alonso por Estados Unidos, vinculado con el Mundial 2030, se citó a un Consejo de Fútbol Profesional para el jueves 25, con la finalidad de aprobar el pliego para participar en la licitación por los derechos de televisión para el período 2026-2029.
Los clubes profesionales, que recibieron el documento la semana pasada, lo evaluaron en sus comisiones directivas y llevarán sus respuestas. Una vez que el pliego quede aprobado, las empresas que quieran participar en la licitación tendrán 90 días para hacerlo. Vale recordar que si Tenfield se presenta, tiene derecho a igualar la mejor oferta, algo que está pactado en el contrato que rige hasta el 31 de diciembre de este año.
El pliego, tal como fue presentado, está dividido en lotes. Ese es el centro de las diferencias. Según pudo saber la diaria, la Unión de Clubes evalúa presentar en el consejo una propuesta de licitación que no sea divisible. Las instituciones que integran ese grupo son las entidades sociales –los que no son sociedades anónimas deportivas (SAD)– y Peñarol, aunque algunos deciden de forma independiente y no votan en bloque.
AUF vs Unión de Clubes
Este miércoles, la Unión de Clubes difundió su propuesta en la previa del encuentro del próximo jueves en la AUF. la diaria accedió al documento para su análisis.
A simple vista, se encuentran varias diferencias entre la propuesta de la Unión de Clubes y la ya difundida por la AUF. Por ejemplo, que el protagonismo en materia de toma de decisiones pase de la órbita de la AUF a la del Consejo de Fútbol Profesional, con respaldo en el artículo 39.3 del Estatuto de la AUF.
Este inciso refiere a que el Consejo de Fútbol Profesional deberá establecer “la forma de explotación comercial de todo lo atinente a los derechos económicos y a los contratos de explotación audiovisual en cualquiera de sus formatos actuales y futuros que pudieren surgir por los avances tecnológicos, de esponsorización, publicidad estática o similares, que provengan exclusivamente de los torneos oficiales del fútbol Pprofesional”.
Desde el comienzo, entonces, se sitúa al Consejo de Fútbol Profesional como “el responsable de determinar la forma de explotación comercial de los derechos económicos y los contratos de explotación audiovisual”. Partiendo de esa base, los clubes consideran que “les corresponde la elaboración del pliego de condiciones, el desarrollo del proceso licitatorio y la resolución final”.
En lo referido al proceso, mientras que la AUF apuntaba al asesoramiento de comités técnicos independientes y la auditoría bajo términos de “transparencia independiente de la firma contratada” con Ernst & Young, los clubes estipulan la conformación de “una Comisión de Adjudicaciones integrada por siete miembros, nombrados dentro del seno del Consejo de Fútbol Profesional (cuatro miembros de Primera División, dos miembros de clubes de Segunda División y el presidente de la Mesa de Fútbol Profesional)”. De esta manera, aseguran, la comisión se encargará de “llevar adelante el proceso licitatorio en nombre de los clubes que integran el Consejo de Fútbol Profesional hasta la firma del contrato con la empresa ganadora”.
Distintas propuestas
Los clubes hacen esta propuesta con el argumento de “intentar cerrar el tema a la mayor brevedad posible, considerando siempre los intereses de los clubes profesionales, sin mezclar con otros activos comerciales que puedan provocar desvíos de fondos. Separando claramente los activos comerciales de los clubes profesionales de otros activos”.
Mientras que la propuesta de la AUF apunta a la televisación de todas las categorías, incluyendo al fútbol del interior, el femenino, el fútbol playa y el fútbol sala, la propuesta de los clubes abarca únicamente a los “torneos oficiales: conjunto de espectáculos incluidos en el calendario regular anual, disputados por las instituciones que integran la Primera y Segunda División Profesional”.
Sin ahondar en detalles, otra diferencia importante se evidencia en los montos que maneja cada propuesta. La de la AUF sumaba un total de 46 millones de dólares anuales entre todos los sublotes, mientras que la de los clubes establece un “precio base anual de USD 35 millones de dólares” más un millón destinado a “obras de infraestructura”.
A pesar de que una de las novedades de la propuesta de la AUF apuntaba a la división en bloques, que llevaba a que la empresa adjudicada “sólo produciría la señal”, mientras que “el beneficiario comercial podría ser otra”, la licitación de los clubes establece que “el adjudicatario, a su entero costo, tendrá bajo su responsabilidad producir, promocionar, distribuir, comercializar, etcétera, el contenido”. Con esta medida, “los clubes pretenden evitar contingencias legales, comerciales, laborales, impositivas”, sostienen.
El pliego de los clubes también refiere a algunos aspectos comerciales, como que “el adjudicatario deberá ceder al club local el 20% de la cartelera led en cancha” y “entregará cinco piezas de video del partido para uso exclusivo en redes sociales de los clubes”, lo que permite que cada institución saque provecho de este activo según su preferencia. En la propuesta de la AUF, por su parte, se aclaraba: “Se reserva la aprobación y distribución de sublicencias”.
Finalmente, en relación con las garantías que los oferentes deben presentar para su participación en la licitación, la AUF solicitaba “una garantía de mantenimiento de la oferta del 2% de los montos mínimos totales requeridos hasta el monto límite de tres millones de dólares”. Los clubes estipulan una “garantía de participación de 10.000 dólares”, aunque aclaran que “quien resulte ganador deberá presentar una garantía efectiva por el valor anual del contrato”.
Cronogramas y plazos
Los pliegos de la AUF detallan un cronograma con varias etapas formales. Tras la aprobación, denominada “día cero”, pasarán a la publicación de la Licitación Competitiva inmediatamente. Luego habrá un período de “preguntas y respuestas” con los potenciales oferentes, que se extendería por 20 días.
Los 20 días siguientes a esa etapa comprenden el plazo de recepción de propuestas; 15 días después de finalizada esta otra etapa, se comunicarán los oferentes habilitados y, tras otros cinco días, se realizará la “preadjudicación o selección provisoria”. Se comunicará a Tenfield para que pueda igualar y la empresa tendrá otros diez días para hacerlo; cinco días después, se comunicará oficialmente quiénes son los adjudicatarios de la licitación. Los plazos están predeterminados y son perentorios, es decir, no prorrogables, salvo casos excepcionales.
Todo el plazo de licitación de la AUF se extiende por 90 días desde la publicación de las condiciones aprobadas por los clubes. Por eso, la garantía de la oferta debe tener una vigencia de 90 días desde su cierre.
La Unión de Clubes impulsa un cronograma similar, aunque con matices. Una primera etapa de publicación de la licitación y cierre de preguntas, los primeros diez días. Luego, 20 días más para la entrega de propuestas, 25 días para la comunicación de los habilitados y cinco días para la selección de la propuesta ganadora. Desde entonces cuentan con 15 días para “notificar a la actual concesionaria para igualar” la mejor oferta y Tenfield tendrá cinco días para ejercer el derecho de igualación. La adjudicación final será publicada tras 85 días de proceso.
En el caso de los clubes, los plazos son también perentorios, pero aclaran que el Consejo de Fútbol Profesional “podrá variar estos plazos, actividades y fechas, según lo requiera, incluso, agregando o eliminando actividades del Cronograma”. Además, como detalle, se admite expresamente la posibilidad de “segunda o más rondas” adicionales en caso de quedar desierta la licitación o de que sea baja la concurrencia.
Teniendo en cuenta el poco margen para la evaluación que deja esta documentación, se desconoce si esta alternativa planteada por los clubes será validada y tenida en cuenta en el orden del día del Consejo de Fútbol Profesional de este jueves o si el encuentro mantendrá su objetivo original de “tratar como único punto del orden del día” la “consideración del pliego presentado por la AUF del proceso licitatorio de derechos de TV”. Hay dos puntos que invalidan esta propuesta: primero, para que el pliego sea considerado tiene que pasar por la Comisión de Transparencia, para que sea ella quien lo apruebe. Una vez aprobado, recién ahí puede elevarse al Consejo del Fútbol Profesional: no es viable que todo esto suceda este jueves. Además, por estatuto, el pliego tiene que ser elaborado por el Consejo Ejecutivo y él el único que pueda proponerlo a los clubes.
Fuente: AUF