Desde la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) se informaron las fechas oficiales de culminación de cursos en todos los niveles de educación: las escuelas finalizan los cursos el 21 de diciembre; ciclo básico (de 1° a 3° de liceo) termina el 10 de diciembre; y bachillerato culmina el 3 de diciembre. Por su parte, la UTU termina las clases el 11 de diciembre. Además, las autoridades de ANEP anunciaron cuestiones asociadas a la promoción en todos los niveles, los exámenes y un sistema de tutorías para el apoyo.
La Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP) emitió un comunicado en el que denuncia: “Nuevamente nos enteramos de definiciones muy importantes por los medios de comunicación, actitud que se ha vuelto costumbre en la actual administración”.
Manifiestan que “no tiene ningún tipo de sentido ni justificación pedagógica” que se extienda el año lectivo. “Esto pone de manifiesto el desconocimiento del trabajo intenso que se ha realizado durante todo el año para mantener el contacto y promover los aprendizajes”, señalan. Según dicen, esto “ha significado un enorme compromiso por parte de las y los docentes de todo el país”. Indican que “no es novedad” el trabajo que se desplegó mientras estuvo la presencialidad suspendida. “La sociedad en su conjunto tiene claro que desde las escuelas se implementaron diferentes estrategias para continuar con los aprendizajes”, resaltaron.
Sobre las tutorías, dijeron que “no tiene ninguna coherencia el recorte” que se está realizando en esta área, que tiene como finalidad “el apoyo, acompañamiento y seguimiento de alumnas y alumnos con diferentes situaciones de rezago, principalmente generadas por la suspensión de clases en el marco de la emergencia sanitaria”. Según indican, está previsto que el comienzo de las tutorías sea el próximo lunes y en varios departamentos “ya están designados las y los docentes”. Por eso dicen que “todo esto supone una evidente desprolijidad y atropello, puesto que los recortes se informan en la tarde de hoy”. Indican que al bajar las funciones asignadas a cada inspección, “maestras y maestros que ya tienen su nombramiento van a quedar sin trabajo, y las niñas y niños sin mayor tiempo de atención pedagógica”. “Todo ello para ahorrar más dinero a costo de recorte de derechos y políticas para proteger las infancias”, sentencian.
Desde FUM-TEP exigen a las autoridades que modifiquen “de inmediato su posición” y que den cumplimiento a la Ley 18.508, de negociación colectiva del sector público.