Desde este lunes, varios centros del Consejo de Formación en Educación (CFE) están ocupados, a raíz de reclamos de distintos gremios estudiantiles. El Instituto de Profesores Artigas (IPA) fue ocupado por el Centro de Estudiantes del IPA (Ceipa), que entre sus reivindicaciones incluyó los problemas edilicios y “la desregulación en las condiciones de estudio”.
Al respecto, también rechazan que las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) hayan tapado las pintadas de los estudiantes en la fachada del IPA, a la que consideran “un lugar de expresión”. “Esta opción que hace el consejo la entendemos como censura y la enmarcamos en el propio programa de persecución que otros compañeros y compañeras de clase están sufriendo por llevar adelante su actividad sindical”, afirmó el centro de estudiantes en un comunicado.
Al igual que se reclamó este domingo en la marcha por el Día de los Mártires Estudiantiles, desde el Ceipa rechazan la reforma educativa en marcha, a la que consideran “regresiva” y sin una adecuada participación de docentes y estudiantes.
Con una plataforma similar, el Centro de Estudiantes de Magisterio ocupó los Institutos Normales de Montevideo, donde, al igual que en el IPA, se instalaron parlantes con música y reivindicaciones, que también se leen en distintos carteles. En el caso del CEM, entre estas están la falta de jardines de práctica para la carrera de Maestro en Primera Infancia, que las autoridades se habían comprometido a solucionar meses atrás. Además, exigen la renuncia de la directora de los Institutos Normales por “desconocer” el trabajo del centro de estudiantes y del presidente del CFE, Víctor Pizzichillo.
La misma medida fue tomada por la Asociación de Estudiantes de Educación Social (AEES) de Montevideo, que ocupó el Instituto de Formación en Educación Social. En su caso, hacen algunas reivindicaciones específicas de esa carrera, como el reclamo de que se vuelva a contar con un tutor docente por estudiante para las monografías finales, ya que actualmente tienen un tutor cada 20 estudiantes. También rechazan cambios en la malla curricular y la eliminación de prácticas preprofesionales. La AEES también reclama que haya más becas para estudiantes, ya que actualmente sólo cuentan con cuatro para una matrícula de 1.200, y denuncian que el edificio en el que estudian está en peligro de derrumbe desde 2015.
En el interior desde la mañana se ocupó el Centro Regional de Profesores (CERP) del Este, ubicado en Maldonado, al que en la tarde se sumó el CERP del Sur, con sede en Atlántida. Por su parte, los estudiantes hicieron un paro activo en el Instituto de Formación Docente de la Costa, cuyo edificio está en Solymar. Si bien el Ceipa y los estudiantes del CERP del Sur ya definieron que la ocupación continuará por tiempo indeterminado, en la noche del lunes los demás centros estaban deliberando en asamblea sobre la continuidad de las medidas. Por su parte, el CERP del Este definió levantar la ocupación en la noche y volver a ocupar el martes.
Sindicato docente en preconflicto
Después de que informaran que las salas docentes de la mayoría de los institutos y centros del CFE rechazaron el documento de reforma curricular de las autoridades, el Sindicato de Docentes de Formación en Educación (Sidfe) se declaró en preconflicto, según informó en un comunicado. Para el Sidfe, si el proceso de reforma sigue adelante será con “fragilidad”, y rechazan que las autoridades reclamen propuestas a los docentes que se oponen a los cambios, cuando ellos “desconocen todo el trabajo realizado por las salas nacionales desde 2015 en adelante”. Al respecto, lamentan que los consejeros políticos en el CFE hayan hecho “oídos sordos” a las salas docentes y también al pronunciamiento de la asambleas técnico docentes y a cuestionamientos de los gremios docentes y estudiantiles.
Según el sindicato, la última muestra de “improvisación” de las autoridades se dio en una reunión bipartita la semana pasada, en la que manifestaron que este año no se modificará el capítulo 14 del Estatuto del Funcionario Docente de la ANEP, que justamente regula la carrera de los profesores en el CFE. “Se trata de llevar a cabo una transformación curricular según tiempos políticos, sin tener en cuenta lo pedagógico ni lo laboral. Se quiere imponer un plan semestralizado sin resolver la situación funcional y laboral de cientos de docentes que elegirían horas en 2023. La inexistencia de una propuesta sobre el cargo docente, por desidia y poco apego, generará inestabilidad laboral y reducción salarial”, afirman.