Después de que la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria (CNHSM) rechazara el pedido de reconsideración de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), el Consejo Directivo Central (Codicen) del organismo decidió avalar la colocación de una placa de la memoria en el Instituto de Formación Docente (IFD) de Paysandú. El tema fue planteado en la sesión de este miércoles por los consejeros docentes en el organismo, que están preocupados por el cumplimiento de la Ley de Declaración y Creación de Sitios de Memoria Histórica del Pasado Reciente.
La norma coloca la atribución de definir sitios de memoria o colocar placas conmemorativas de violaciones a los derechos humanos en la CNHSM, dependiente de la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo. Según la postura de los consejeros docentes en el Codicen, la ANEP no tiene la potestad de desconocer o modificar una disposición de la comisión. Por lo tanto, después de recibir la negativa sobre la reconsideración de la colocación de una placa en el IFD de Paysandú en conmemoración de la detención y posterior muerte de la maestra Raquel Culnev, el organismo no tenía otra alternativa que acatar lo resuelto.
Sin embargo, la resolución de avalar la colocación de la placa y encomendar al Consejo de Formación en Educación la coordinación de las acciones para hacerlo no salió por unanimidad. Según supo la diaria, el consejero Juan Gabito votó en contra y la consejera Dora Graziano se abstuvo, por lo que la resolución fue posible por el voto de la presidenta, Virginia Cáceres, y los dos consejeros docentes, Julián Mazzoni y Daysi Iglesias.
Precisamente, el tema generó diferencias en el seno del Codicen, a partir de un informe de una de las asesoras letradas del organismo, que sostenía que no correspondía la colocación de la placa en el IFD. La conclusión principal del informe señalaba que la ley de sitios de memoria no es aplicable al caso de Culnev, primero porque fue detenida por incumplir una ley vigente en el momento y, en segundo lugar, porque la militante tupamara no sufrió la vulneración de sus derechos humanos en el lugar donde se pretende colocar la placa. Además, el informe de la abogada Marcela Pérez Pascual señala que Culnev no era docente ni estudiante del centro educativo cuando fue detenida.
La CNHSM entendió que esos argumentos no son de recibo y los atribuyó a una lectura “parcial” de la ley, según dijo en ese momento Mercedes Cunha, una de sus integrantes. Precisamente, la norma plantea que se pueden colocar placas de la memoria en lugares que “las víctimas, familiares o las comunidades” asocien con las violaciones a los derechos humanos de los que fueron víctimas y que surgen como forma de “homenaje y de reparación a las víctimas y a las comunidades”.