“Las víctimas de delitos sexuales en nuestro país tienen claramente rostro de niños, niñas y adolescentes”, dijo el comisario mayor Richard Gutiérrez, subdirector de Políticas de Género del Ministerio del Interior (MI), durante la presentación del informe anual de gestión del Sistema Integral de Protección a la Infancia y a la Adolescencia contra la Violencia (Sipiav). El jerarca fue uno de los representantes de organismos del Estado que habló en el evento del viernes y complementó con cifras actualizadas de denuncias el panorama de violencia que viven las infancias y adolescencias en Uruguay.
En ese sentido, aseguró que en 2024 el MI recibió 3.287 denuncias policiales por delitos sexuales, una categoría que incluye abuso sexual, abuso sexual especialmente agravado, abuso sexual sin contacto corporal, atentado violento al pudor y violación. Se trata, en promedio, de nueve denuncias por día. Gutiérrez dijo que esas denuncias tienen detrás a alrededor de 3.800 víctimas, de las cuales 80% son mujeres y 20% varones.
El subdirector señaló que, en este escenario, un tema que particularmente “ha alarmado y ocupado” a la Policía Nacional “en los últimos tiempos” es la violencia sexual contra las infancias y adolescencias, porque se observa “un crecimiento exponencial de las denuncias que nos están llegando”. Así, destacó como un “dato que sin duda impacta fuertemente” es que, de ese total de víctimas identificadas en 2024, “siete de cada diez son niños, niñas y adolescentes”.
A su vez, dijo que “hay un gran desafío particularmente con la violencia que se está dando en entornos digitales”. Al respecto, informó que en los últimos años hubo un aumento de las denuncias por “contacto informático con contenido sexual”: el MI registró 85 en 2022; 77 en 2023; y 103 en 2024.
Las denuncias del año pasado derivaron en 110 víctimas, 78% mujeres y 22% varones, especificó Gutiérrez. Cuando se desagrega la cifra por tramos etarios, “al igual que pasa con los delitos sexuales”, se observa que “siete de cada diez [víctimas] corresponden a adolescentes”. “Por lo tanto, una vez más, por lo menos desde lo que son las denuncias que está recibiendo la Policía Nacional, también tenemos una clara incidencia hacia esta vulneración de derechos en niños, niñas y adolescentes”, afirmó el comisario mayor.
En paralelo, Gutiérrez se refirió a “otro dato” que “preocupa y ocupa” a la cartera, que tiene que ver con “la cantidad de niños, niñas y adolescentes que están transcurriendo por el monitoreo de tobillera electrónica a través de la Dimoe [Dirección de Monitoreo Electrónico]”. En esa línea, puntualizó que durante 2024 ingresaron al programa 161 niñas, niños y adolescentes; 141 en calidad de víctimas y 20 en carácter de ofensores. “Tenemos mucho para trabajar como Estado sobre este tema en particular, porque si sabemos y están probadas las dificultades que genera portar un dispositivo y estar siendo monitoreadas a mujeres adultas víctimas [de violencia de género], lo dejo para ustedes debatir y pensar lo que genera en nuestros niños, niñas y adolescentes”, remató el jerarca.
Desafíos a futuro
Después de presentar los datos, Gutiérrez enumeró cuáles serán los principales desafíos que se trazó el MI en 2025 para abordar la violencia contra infancias y adolescencias.
Entre otras cosas, nombró los cursos específicos de violencia hacia niñas, niños y adolescentes impulsados por la Dirección Nacional de Educación Policial; la incorporación de dos nuevos cursos sobre violencia basada en género y violencia en las TIC (tecnologías de información y comunicación), así como “políticas públicas de seguridad e intersecciones donde hay un módulo específico para abordar las violencias que están sufriendo los niños, niñas y adolescentes”.
También mencionó capacitaciones que se están impartiendo a policías que desempeñan tareas en el ámbito rural, en el marco del programa de fortalecimiento del acceso a la Justicia de mujeres y niños, niñas y adolescentes, y la implementación de la guía de actuación dirigida al personal policial para el abordaje de delitos sexuales contra infancias y adolescencias, presentada en abril de 2024, elaborada por el Fondo de Población de las Naciones Unidas y Gurises Unidos. El subdirector dijo que el MI está “en plena etapa de implementación [de la guía] y de capacitación” por todo el país, y que sólo “quedan cinco departamentos”.
En materia de prevención, destacó el programa HM, una intervención socioeducativa y comunitaria para la prevención de la violencia de género “con una mirada específica en adolescentes de entre 13 y 15 años” de distintos contextos, que se realizará en el marco de un convenio entre el MI, el Instituto Nacional de las Mujeres y la Administración Nacional de la Educación Pública.