Ayer arribó al puerto de Montevideo el buque escuela de la Armada española Sebastián Elcano. Entre la tripulación se encontraba la princesa Leonor, heredera al trono de España, quien está haciendo el servicio militar, tal como indica la tradición. La infanta aprovechó la oportunidad para pasear por la Ciudad Vieja, pero dejó una mala imagen entre los artesanos de la peatonal Sarandí. “La verdad es que me deslumbró un poco, porque yo nunca había conocido a una princesa. Pero ella se aprovechó de eso y se me llevó como 30 caravanas y 20 pulseras a cambio de un par de espejitos de colores”, se quejó uno de ellos.
Otra artesana relató que Leonor le pidió cinco esculturas fabricadas con tenedores, pero, en lugar de pagarle con dinero, le entregó tres pequeños espejos de color rojo. “Ojalá que se agarre una buena diarrea como consecuencia de que su sistema inmunológico no está preparado para procesar nuestros alimentos autóctonos, como chivitos y choripanes”, disparó.
El halago: “El virreinato del Río de la Plata me pareció un lugar muy hermoso”. Leonor de Castilla, infanta que está conquistando América.