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Traslado del tercer herido al Centro Nacional de Quemados (Cenaque), el 9 de diciembre, en el ex Comcar, en Montevideo.

Foto: Federico Gutiérrez

Dos muertos y tres heridos graves en el módulo 4 del Comcar por un incendio

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Santiago González dijo que fue por “un cortocircuito” y que la Policía “no podía hacer nada para evitarlo”

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Dos personas privadas de libertad murieron en un incendio en el módulo 4 de la Unidad 4 Santiago Vázquez (ex Comcar). Otras tres resultaron heridas de gravedad, con compromiso en las vías aéreas.

El fuego comenzó en una celda y, según el Ministerio del Interior, fue “por un cortocircuito” que habría ocurrido en la madrugada de este jueves. El incendio ocurrió a las 5.00 en la celda 35 del sector 2A. Es un sector donde hay personas que no son jóvenes y que trabajan. No hay antecedentes de conflictos en el lugar porque es un espacio de convivencia. Los fallecidos tenían 44 y 49 años y los heridos tienen 37, 38 y 52 años.

Dos de los heridos están internados en el Centro Nacional de Quemados (Cenaque). El pronóstico de ambos es reservado. El tercero está internado en el Hospital Español, con un pronóstico también reservado, está intubado y tiene quemaduras en el cuerpo. El Ministerio del Interior no difundió la identidad de las personas fallecidas ni heridas, pero aseguraron que el director de la cárcel se comunicó con las familias.

Santiago González, director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, dijo en rueda de prensa que “no hubo pelea, no hubo problema”. “Lo primero a descartar es que no hubo ningún incidente en la cárcel, sí se dio un accidente. En principio, lo que está investigando Bomberos, y es la hipótesis que manejan, es que fue un cortocircuito dentro de una celda, donde agarra fuego la celda”, aseguró. “Una falla, un hecho lamentable”, agregó.

“Hay que destacar varias cosas, la primera es el trabajo sumamente profesional, abnegado y el arrojo de los policías para ir a abrir esa celda. La abrieron con llave, porque se podía abrir con llave porque aguantó el candado. Entraron, las medidas de seguridad para incendio de los bomberitos funcionaron, entraron, pudieron apagar y ellos mismos fueron trasladando a los privados de libertad” a la policlínica, afirmó.

Según González, “es un hecho lamentable, muy triste para todos”. “Se hizo y se está haciendo todo lo imposible para que la salud de las personas y la vida pueda primar”, aseguró.

También afirmó que no fue un incendio intencional: “No hay mucho para decir cuando suceden estos hechos porque no hubo un enfrentamiento, no fue quemado de afuera, no hubo ningún problema, como a veces pasa en las cárceles. Es un hecho lamentable”.

Consultado sobre por qué asegura que no fue intencional y si la celda estaba trancada, señaló: “Es eso. Es que los técnicos de Bomberos indican que el incendio comienza adentro y no de afuera hacia adentro. Nosotros hemos tenido en este período problemas de enfrentamiento y celdas que han ido a atacar a otras celdas y este hecho es absolutamente distinto. Entonces, dentro de la gravedad del hecho, [hay que] hacer la aclaración, poner en contexto. Es una tragedia, una tragedia que obviamente nos sacude a nosotros, porque más allá de los cargos que ocupamos somos seres humanos: hijos, padres, hermanos, nos duelen mucho este tipo de hechos”. Aseguró que “por eso nosotros acostumbramos a venir prontamente en cuanto nos enteramos”. “Está todo el equipo del INR [Instituto Nacional de Rehabilitación], encabezado por el director Luis Mendoza y toda la gente que trabajó, están todos los médicos y enfermeros de SAI-PPL de ASSE [Servicio de Atención Integral para Personas Privadas de Libertad de la Administración de los Servicios de Salud del Estado], está la gerenta del Cenaque trabajando, ya me llamó la doctora [Cecilia] Hackembruch”, indicó.

“Estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para ayudar a estas personas a sobrevivir, en definitiva”, aseguró. Reiteró que “es un hecho trágico, un accidente”. Y resaltó: “Nos gusta estar siempre tratando de apoyar a los policías, que son los que en definitiva estaban acá, estaban de noche, arriesgan su vida y son los que pudieron, en caso de que salven las personas que están mal, si se salvan, se salvan por el trabajo y el arrojo de estos policías, que hay que felicitar a ellos por lo que realizaron”.

Sobre las medidas que se tomaron, González dijo que “la cárcel no tiene ningún inconveniente, no pasó absolutamente nada”. “Fue algo lamentable, como puede pasar en un barrio, que a veces hay un incendio en una casa. Es tristísimo, pero no por triste podía hacer algo la Policía para evitarlo. Porque uno puede evitar que haya un enfrentamiento con presencia policial, puede evitar una pelea, cualquier cosa se puede evitar, pero no puede evitar un cortocircuito, porque es algo accidental. Y los accidentes son eso”.

Por su parte, Luis Mendoza, director del INR, explicó que si bien el módulo “tiene instalación eléctrica, después ellos hacen instalaciones para los otros artefactos que pueden tener”. “Yo estuve en la celda y estuve mirando un televisor que está todo quemado, y hay otros elementos sobre los que ellos hacen instalaciones caseras y derivaciones”, resaltó. Y repitió la versión oficial: “Aparentemente, lo que Bomberos está periciando es que fue a causa de eso que se produjo el cortocircuito y a posterior la llama”. Mendoza ordenó una información de urgencia: “Se está tomando declaración a los policías que intervinieron y posteriormente a los internos que estaban en el sector”.

Según explicó el director del INR, “en ese módulo no es donde están más hacinados”. “En esa celda había cinco personas, los dos fallecidos y los tres lesionados. Es un sector de convivencia, que no es de los más afectados por el hacinamiento”, agregó.

Mendoza destacó el trabajo de la Policía: “El oficial que está a mi lado, Feliciano Suárez, fue el primero que llegó, está la ropa de él manchada por todo el accidente”. Resaltó “la rapidez con la que actuaron los policías”. “Ellos entraron, el candado estaba caliente, entonces se arriesgaron, abrieron la celda”, y apuntó que en estos casos, cuando se abren las celdas, “sale una llamarada para afuera” producto de la combustión. Mendoza contó que “los policías, encabezados por el oficial, fueron los que entraron en la celda, apagaron el fuego y llevaron a los cinco privados de libertad a la enfermería”. “Hay que reconocer el arrojo”, planteó.

Personas privadas de libertad en el módulo incendiado filmaron un video en el que muestran la celda; este contradice la versión oficial de que fueron policías quienes actuaron: “Este es el módulo 4, tuvimos que sacar a la gente de adentro de la celda. Mira cómo está esto acá, se prendió todo fuego. Murieron dos personas. La Policía no estaba donde tenía que estar. Miren cómo está toda la gente acá. Tuvimos que sacar a todos. En el módulo 4 ni un botón [policía] en la guardia había. Está todo prendido fuego. No sabemos si hay gente viva o gente muerta”.

Luis Alberto Heber, ministro del Interior, estuvo en la celda incendiada. Luego, dijo en rueda de prensa que “todo indica que es un accidente eléctrico que desprendió fuego, por el primer informe de Bomberos”. “Es una desgracia horrible”, afirmó. Y agregó: “Quiero destacar la colaboración no solamente de la Policía sino de los otros presos de otras celdas, que abrieron y ayudaron a sacar a la gente”, indicó el ministro.

Heber planteó que “es un episodio horrible y tenemos que hacer una inversión. Lo que pasa es que mucha de la gente que está recluida rompe los cables y hacen conexiones diferentes, colocan muchos aparatos y eso lleva a que estén recargados y puede generar lo que generó, un accidente fatal”.

También dijo que a partir de este hecho va a contemplar “un proyecto de los reclusos para mejorar la instalación eléctrica”. Uno de los privados de libertad que murió en el incendio era electricista.

Juan Miguel Petit, comisionado parlamentario penitenciario, que también estuvo en el lugar, dijo que “frente a esto tan triste que ocurrió hoy, mucha reflexión y mucho diálogo, pensamiento y trabajo para tratar de que haya garantías para que ciertos mínimos estén cumplidos y que el Estado pueda cumplir su rol”. Petit aseguró que quienes sacaron a las personas fueron policías y presos, a los que la guardia les abrió las celdas para que apoyen en el rescate. Los policías abrieron cuatro celdas, tomaron colchones para que oficien como camillas y corrieron a la enfermería, que está a pocos metros del módulo, para alertar sobre la situación.

El hecho ocurrió en la primera jornada de Anthony Vallejo como director del Comcar, que relevó a Jorge Camargo, que dejó su cargo por decisión personal.

El 18 de noviembre, ya con Vallejo suplantando a Camargo durante una licencia que se tomó previo a dejar el cargo, hubo incidentes en el mismo módulo donde esta madrugada se desató el incendio. En esa oportunidad, personas privadas de libertad incendiaron una celda.

Por otra parte, ayer encontraron dos armas, una granada y dos kilos de marihuana en el baño de las visitas del Comcar, que queda frente a la puerta de ingreso a la cárcel.

En lo que va de 2021 hubo 75 muertes en cárceles. 17 fueron homicidios, 14 casos de suicidio, 9 muertes dudosas y 2 en este presunto accidente. Además, 33 personas tuvieron muertes “naturales”, es decir, por problemas de salud.

Hasta ahora el año con el récord histórico de muertes había sido 2020, con 48, mientras que en 2019 hubo 44. En estos meses de 2021 las muertes aumentaron 56% respecto de todo 2020 y 70% en comparación con 2019. La población privada de libertad aumentó 10%. En los años anteriores hubo 37 muertes en 2018, y 47 fue el registro de 2015, 2016 y 2017. Previamente, de 2006 a 2015, había 40 muertes en promedio por año. De antes no hay registros.

La tasa de homicidios en cárceles es 15 veces mayor que la tasa nacional de homicidios. Por su parte, la tasa de suicidios es siete veces mayor que la de la población general. En 2020 fue el pico máximo de suicidios en cárceles, con 17 casos. El aumento respecto del año anterior fue de 89%; en 2019 hubo nueve suicidios.

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