Un total de 27 organizaciones socioambientales (dentro de las cuales hay numerosas agrupaciones) divulgaron, este miércoles, una extensa carta abierta a la ciudadanía y a las autoridades departamentales en la que expresan su “profunda preocupación” por las galas de luces que programó la Intendencia de Maldonado (IDM) para Piriápolis y La Barra.
La oposición de las agrupaciones a las galas de luces que el gobierno departamental promueve como “atractivo cultural y turístico” se repite cada verano, pero esta es la primera vez que tantas logran expedirse en conjunto, destacó a la diaria la vocera Karina Kokar, de la Coordinadora Pirotecnia Cero.
El intendente, Enrique Antía, tomó la decisión política de promover estos espectáculos, aunque “diversas organizaciones sociales, académicas y profesionales han advertido de manera recurrente” sobre los riesgos y las consecuencias para el ambiente, personas y animales derivadas de la elevada carga de material pirotécnico utilizado, lamentó.
No obstante, Kokar señaló que cada vez más personas se suman “a la causa” y consideró importante convocarlas a que no asistan a estos eventos. “Llamamos a que no participen, porque, por más que nos apoyen, se quedan mirando. Pedimos a la sociedad una señal. Es lo único que tenemos para cambiar esta situación cuando las autoridades no entienden que no deberían organizar espectáculos donde claramente hay daño”, remarcó.
Este “llamado a la solidaridad de la población” tiene, además, el objetivo de “fomentar la empatía, la compasión, la educación y la sensibilidad” con respecto a los impactos negativos. Asimismo, las organizaciones aspiran a que “las autoridades competentes reconsideren” la realización de este tipo de eventos.
Para Kokar es “inentendible” que la IDM insista con estos espectáculos. “En el mundo hay otras tecnologías, se puede optar por drones que iluminen el cielo”, comentó la activista a modo de ejemplo. También advirtió sobre el gasto de recursos públicos en una actividad que, aunque dure unos minutos, tiene “mucho más impacto negativo” que los beneficios que se invocan desde el gobierno departamental.
Daños al ambiente y las personas
En su carta abierta, las organizaciones enfatizan que estos eventos se realizan en la faja costera y que, según informes de acceso a la información pública, no cuentan con las autorizaciones correspondientes del Ministerio de Ambiente. En este sentido, recuerdan que el artículo 47 de la Constitución establece que “la protección del medioambiente es de interés general y que las personas deben abstenerse de cualquier acción que cause daño grave al medioambiente”.
“En camino hacia un desarrollo sostenible es necesario evaluar y mitigar los efectos negativos de estos eventos sobre el medioambiente y la salud pública”, indica la carta, que además ofrece un punteo sobre cómo afecta la pirotecnia “especialmente en lo que respecta a la contaminación ambiental y los efectos perjudiciales sobre poblaciones sensibles, animales de compañía y especies silvestres”.
Además, advirtieron que la detonación de fuegos artificiales libera una cantidad considerable de contaminantes al aire, incluidos partículas sólidas (PM2.5 y PM10), gases tóxicos como monóxido de carbono, dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno, así como metales pesados como estroncio, bario, cobre y plomo.
“Estos contaminantes no sólo afectan la calidad del aire, sino que se dispersan y pueden llegar al mar y la playa”, señalaron. En consecuencia, “contaminan la arena y pueden afectar la salud de los bañistas que estén en contacto con esos tóxicos”.
Asimismo, enfatizaron que el montaje de los explosivos y la logística necesaria para las detonaciones “generan perturbación y modificación perjudicial” sobre las dunas y la flora y fauna costeras. “En el caso de las aves, las explosiones cercanas a sus nidos alteran su comportamiento, provocando que abandonen sus nidos y poniendo en peligro su supervivencia”, expresaron.
Kokar agregó que, en años anteriores, los activistas han encontrado los restos de los artefactos desperdigados en la arena y numerosas aves muertas. “La IDM piensa que son unos minutos, pero están tirando productos altamente químicos en la faja costera, cambiando el comportamiento de la fauna y de las personas que tienen que tolerar los ruidos. Hay muchas personas afectadas y son muchas más que las que pueden disfrutar este show”, enfatizó.
"Los abajo firmantes"
La carta dirigida a la población y las autoridades está firmada por las siguientes organizaciones: Red Ambiental Piriápolis y Alrededores, Coordinadora Pirotecnia Cero, Red de Unión de la Costa, Coendú, Red Pro Cielos Oscuros Uy, Naturalmente Piriápolis y Zona Oeste, Asociación de Fomento y Turismo de Sauce de Portezuelo, Asociación Civil de Vecinos de la Rinconada y Portezuelo, Asociación Vecinos de las Grutas de Punta Ballena, Comisión de Vecinos de La Barra y El Tesoro, Vecinos del Club del Lago y Laguna del Sauce, Radio Mangangá, Punto Verde Punta Negra, Comisión de Fomento Playa San Francisco, Proyecto Ñacurutú, Medioambiente La Capuera, Grupo por la Defensa de los Espacios Naturales de Playa Hermosa, Guardianes de la Laguna del Diario, La Flotante Arroyo Solís Grande, Vivero Psamófilo Amigo de la Arena, Flora y Fauna Indígena, GuazúVerde, Nativos Punta Colorada, Aguará popé Educación y Gestión Ambiental, Asociación Civil Nativos Punta Negra, Grupo Alas de Piriápolis y Espacio Agreste Piriápolis.