Los ministros de Relaciones Exteriores de los países que integran el G7 –Estados Unidos, Alemania, Francia, Reino Unido, Canadá y Japón–, así como la Unión Europea (UE), hicieron pública su postura conjunta contra una posible invasión rusa de Ucrania, que implicaría “enormes consecuencias” para Moscú.
El comunicado se conoció este domingo tras un encuentro celebrado en la ciudad inglesa de Liverpool en el que todos sus participantes declararon estar “unidos en la condena de la acumulación militar de Rusia” en la frontera de Ucrania “y su retórica agresiva” hacia Kiev, informó el portal Europa Press.
Según informó Efe, la alianza reclama al presidente ruso, Vladimir Putin, que “desescale, recurra a los canales diplomáticos y respete sus compromisos internacionales en transparencia de actividades militares”, algo que ya le había pedido el presidente estadounidense, Joe Biden, en la comunicación por videollamada que tuvieron la semana pasada.
El texto consensuado por el G7, además, remarca que cualquier uso de la fuerza para mover fronteras “está estrictamente prohibido por el derecho internacional”. “Rusia no debe tener duda alguna de que una mayor agresión militar contra Ucrania tendría enormes consecuencias y un grave costo”, expresa el comunicado de las potencias.
“Reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, así como el derecho de cualquier Estado soberano a determinar su propio futuro. Encomiamos la actitud moderada de Ucrania e intensificaremos nuestra cooperación en nuestra respuesta común e integral”, concluye el comunicado.
El G7 también reafirmó su apoyo al llamado Formato de Normandía, que agrupa a Rusia, Ucrania, Francia y Alemania y cuya misión es asegurar que se implementen los Acuerdos de Minsk, que en 2014 pusieron fin a la guerra en la región oriental ucraniana del Donbás, donde operan milicias separatistas prorrusas.
Pero desde Rusia inmediatamente llegó una respuesta a la declaración del G7. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, lamentó que el presidente Biden haya creído en la posibilidad de una supuesta “invasión” de Rusia a Ucrania, cuando en realidad no es más que una serie de “noticias falsas”.
“Biden llegó a hablar de una invasión efímera de Ucrania, porque, al parecer, los propios estadounidenses ya creen que eso no son noticias falsas, sino la pura verdad”, lamentó Peskov en una entrevista brindada al canal televisivo Rossiya 1.
Estados Unidos lanzó la voz de alerta tras constatar mediante una serie de imágenes aéreas un incremento de las fuerzas rusas en la frontera con Ucrania, a lo que Peskov respondió que “esas tropas no amenazan a nadie” y, además, se encuentran en territorio ruso. El funcionario del gobierno ruso recordó también que Washington tiene a militares desplegados “a 1.000 kilómetros de nuestro territorio”, según hizo saber en la entrevista, recogida por la agencia oficial de noticias rusa Sputnik.
A comienzos de diciembre el ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, dijo que Rusia sigue desplegando tropas alrededor de Ucrania y estará lista para una eventual “escalada” militar a finales de enero. Según el funcionario del gobierno que lidera Volodímir Zelenski, cerca de 100.000 soldados rusos podrían participar en una eventual ofensiva. “Una escalada es un escenario posible, pero no inevitable. Nuestra tarea es prevenirla”, remarcó el ministro.