Organizaciones indígenas, civiles y estudiantiles se movilizaron este lunes en Guatemala, en rechazo a las acciones legales que el Ministerio Público (Fiscalía) viene interponiendo en relación con el proceso electoral en Guatemala.
El último de estos hechos se produjo el sábado, cuando integrantes de la Fiscalía ingresaron, custodiados por la Policía, a la sede del Tribunal Supremo Electoral (TSE), de donde se llevaron actas de escrutinio de las dos vueltas electorales de los recientes comicios, ganados por Bernardo Arévalo, líder del centroizquierdista Movimiento Semilla.
De acuerdo a lo que informó el diario guatemalteco Prensa Libre, la Junta Directiva de los 48 Cantones de Totonicapán, una de las principales entidades indígenas del país, convocó el fin de semana reciente a un “paro nacional indefinido” para pedir la renuncia de la fiscal general Consuelo Porras, el fiscal Rafael Curruchiche y el juez Fredy Orellana. Los tres funcionarios están incluidos en una lista de “actores corruptos” y antidemocráticos de Estados Unidos.
“Nos declaramos en paro nacional indefinido desde el día lunes 2 de octubre de 2023 haciendo una convocatoria a todos los ciudadanos y organizaciones del país” a sumarse a la protesta, expresaron los líderes indígenas en un comunicado.
En el marco de las movilizaciones, se produjeron al menos 17 cortes en varios tramos de importantes carreteras del país, como la Interamericana, así como las que conducen a las fronteras de México, El Salvador y Honduras, informó la Dirección General de Protección y Seguridad Vial.
Paralelamente, informó AFP, en la capital, Ciudad de Guatemala, los manifestantes bloquearon dos vías de acceso a la capital y se movilizaron frente a la sede de la Fiscalía.
Ante los bloqueos, el ministerio del Interior del gobierno que preside el derechista Alejandro Giammattei aseguró en un comunicado que instruyó a la Policía Nacional Civil a utilizar la fuerza para disolver las medidas, aunque deben hacer un análisis para no “poner en riesgo la integridad física de quienes intervengan”.
También este lunes y mientras se estaban produciendo las protestas, el presidente electo Bernardo Arévalo se trasladó junto a la futura vicepresidenta, Karin Herrera, hasta la sede del Tribunal Supremo Electoral, donde brindó una conferencia de prensa.
Ni bien arribó a la dependencia estatal, Arévalo expresó que fue hasta allí para mostrar el apoyo y agradecer el trabajo de los magistrados en defensa de la democracia. Luego el líder del Movimiento Semilla expresó: “Todos tenemos que arropar a nuestro sistema electoral, a los magistrados, a los trabajadores del TSE, a los miembros de las juntas electorales”, porque están siendo objeto de ataque por parte de la Fiscalía.
También habló durante la conferencia de prensa la presidenta del TSE, Irma Palencia. “Estamos consternados por los últimos acontecimientos, pero también luchando para darle a la población tranquilidad y que sepa que vamos a seguir en esa lucha incansable”, expresó la magistrada.
Ante una pregunta de un periodista acerca de si las acciones de la Fiscalía pueden afectar la asunción de Arévalo, prevista para el próximo 14 de enero, Palencia respondió de manera contundente: “Ese temor es algo que de manera desinformada y de manera irresponsable se ha estado diciendo en distintos foros, o escenarios o redes, de que posiblemente por los allanamientos o por denuncias no se llegue a la fecha prevista para que los candidatos electos tomen posesión. Sin embargo, vale recordar que los resultados de estas elecciones ya fueron oficializados, se certificaron, se adjudicaron ya los cargos y se dieron las credenciales”.