En la madrugada de este viernes, Estados Unidos y Reino Unido atacaron posiciones de los rebeldes hutíes en Yemen. Según informó Efe, se lanzaron 73 bombardeos que produjeron cinco bajas, de acuerdo a lo que comunicó esa milicia. El diario madrileñoEl País agregó que los ataques alcanzaron posiciones en la capital yemení, Saná, y también en las ciudades de Hodeida (costa oeste) y Taiz (centro del país).
Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Baréin, Canadá, Países Bajos, Dinamarca, Alemania, Nueva Zelanda y Corea emitieron un comunicado conjunto en el que indicaron que la acción busca defender el comercio internacional, que estaba siendo afectado, aseguran, por los ataques hutíes a embarcaciones que circulaban por el mar Rojo, lugar de tránsito del 15% del comercio marítimo global.
Esos ataques responden al rechazo de los hutíes a la ofensiva israelí en Gaza y apuntan, en particular, contra barcos que se dirigen a Israel o están vinculados con ese país.
Joe Biden, el presidente de Estados Unidos, emitió un comunicado al respecto en el que detalló que se trató de una acción de respuesta. Destacó que más de 50 países se han visto perjudicados como consecuencia de los 27 ataques que hasta el momento los grupos rebeldes han llevado adelante. En la misma línea, la OTAN subrayó que los ataques fueron “defensivos” y estuvieron “diseñados para preservar la libertad de navegación” en el mar Rojo.
Efe destacó que los hutíes declararon luego del bombardeo una “guerra abierta” contra Estados Unidos y el Reino Unido. Hasta el momento, según informó la Marina británica, se disparó sólo un misil a un barco frente a las costas de Yemen. Sin embargo, la ofensiva de los hutíes no tuvo éxito dado que el misil impactó en el agua, sin causar víctimas ni daños.
El gobierno internacionalmente reconocido de Yemen señaló que los hutíes se encargaron de “arrastrar al país a un escenario de enfrentamiento militar”. Asimismo, acusó a la milicia de “depender de las órdenes del régimen iraní, sirviendo a sus proyectos en la región a expensas de los intereses del pueblo yemení”.
En un comunicado difundido en la agencia de noticias oficial yemení Saba, el Ejecutivo justificó los recientes ataques sobre el territorio de su país sosteniendo que se produjeron “en respuesta a los continuos ataques y amenazas de las milicias terroristas hutíes” contra la seguridad marítima en el mar Rojo y en el estrecho de Bab al Mandeb.