Una serie de ataques lanzados por Israel en Siria dejaron este lunes 18 muertos y 37 heridos e intensificaron la violencia en otro frente bélico abierto en Medio Oriente. Desde el comienzo del conflicto en Gaza, Israel bombardeó varias veces en Siria objetivos de las milicias libanesas Hezbolá.
Pero el ataque de este lunes fue uno de los más mortíferos en el territorio sirio desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamas, hace 11 meses.
El Ministerio de Defensa sirio informó que la ofensiva tuvo como objetivos puestos militares, sin embargo, el director de Salud de Hama, la región atacada, dijo a la agencia Efe que en el hospital de la ciudad de Masyaf fueron ingresados varios de los heridos y que entre ellos había militares, pero también civiles, incluso niños. También dijo que algunas de esas personas sufrieron heridas “serias”.
Según fuentes de inteligencia que citó la agencia Reuters, esta vez el objetivo del ataque israelí fue un centro de producción de armas químicas vinculado con Irán. Pero las autoridades de Israel no informaron al respecto, ni tampoco lo hicieron las de Siria, que no suelen brindar datos sobre la presencia de fuerzas iraníes en su territorio.
El gobierno de Irán calificó como “criminal” el ataque, pero tomó distancia y negó que los objetivos tuvieran que ver con su país. El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Naser Kananí, manifestó a la agencia ISNA que “en base a lo que fuentes sirias han anunciado, el régimen sionista ha atacado centros sirios, incluido un centro de investigación perteneciente al Ejército sirio”.
Para el grupo islamista palestino Hamas, el ataque de este lunes fue una “flagrante violación” de la soberanía siria y del derecho internacional, así como una continuación de la arrogancia practicada por el gobierno de ocupación sionista contra los países de la región”.
Hamas pidió a los países árabes y a la comunidad internacional que también expresen su rechazo a la “agresión repetida y creciente” contra el pueblo palestino.
Presión internacional
A medida que la tensión regional crece, también aumentan los llamados a que nuevos actores se involucren y presionen por un cese del fuego. Estados Unidos llamó este lunes a los otros dos países que actúan como mediadores entre Israel y Hamas -Egipto y Qatar- a que presionen a Hamas para que retire algunas de sus demandas para llegar a un acuerdo, informó Haaretz. El diario israelí publicó que Washington considera “excesivas” las exigencias de Hamas y que además considera que no merece concesiones después de que asesinó días atrás a seis rehenes israelíes.
También los otros mediadores llamaron a aumentar la presión sobre las partes. El primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abderrahmán, pidió al ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergéi Lavrov, la “presión necesaria” para “imponer” un alto el fuego en Gaza. Señaló que “pese a los esfuerzos de Qatar y de sus socios”, no se ha logrado “hasta el momento el resultado deseado”. Agregó que su país cuenta con sus “socios regionales e internacionales” para “ejercer todo tipo de presión necesaria para imponer un alto el fuego”.
El primer ministro hizo esas declaraciones durante la apertura de una reunión de “diálogo estratégico” entre Rusia y el Consejo de Cooperación del Golfo. Pidió aumentar los esfuerzos que conduzcan “a un alivio del sufrimiento de los hermanos palestinos y a la liberación de los rehenes [israelíes] y prisioneros [palestinos]”.
Lavrov dijo que, si bien fue posible “superar los obstáculos de Estados Unidos y hacer que en la ONU se adopten algunas resoluciones a favor del alto el fuego en Gaza”, “desafortunadamente, la comunidad internacional ha fracasado en parar la agresión y las matanzas diarias de los habitantes civiles” de la región, y ahora se puede ver también una “escalada entre Israel e Irán”.
El tercer país que actúa como mediador en este conflicto, Egipto, pidió a la Unión Europea que presione para que se alcance un acuerdo de cese del fuego. El presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, que recibió en El Cairo al jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, señaló que recae sobre la comunidad internacional la responsabilidad de “ejercer una intensa presión para alcanzar un acuerdo que ponga fin a la guerra en curso” en la Franja de Gaza.
Al Sisi y Borrell también conversaron sobre la necesidad de buscar una solución de dos estados, uno israelí y otro palestino, “que abriría perspectivas de paz, coexistencia, estabilidad y desarrollo en la región”.
El gobierno de Israel ha mostrado su recelo ante a esta solución, e incluso algunos de sus integrantes se han manifestado abiertamente en contra. Es el caso, entre otros, del ministro de Finanzas, el extremista Bezalel Smotrich, que este lunes insistió: “Mi misión vital es construir la tierra de Israel y frustrar la creación de un Estado palestino que pondría en peligro al Estado de Israel”.