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Flores y banderas frente al velero Cuauhtémoc de la Armada de México.

Foto: Spencer Platt, AFP

Buque escuela mexicano era controlado por piloto de puerto especializado de Nueva York al chocar contra el puente

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El titular de la Secretaría de Marina de México informó que “toda la maniobra que hizo el barco desde que zarpa del muelle hasta que tiene la colisión” estuvo bajo el control del piloto; el accidente provocó la muerte de dos cadetes.

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Aún hay muchas interrogantes sobre las causas que provocaron el choque de los mástiles del buque escuela mexicano Cuauhtémoc contra la parte inferior del puente de Brooklyn, en Nueva York, la noche del sábado. El incidente causó la muerte de dos tripulantes y dejó a otras 22 personas heridas de las 277 que estaban a bordo.

El almirante Raymundo Morales Ángeles, titular de la Secretaría de Marina (Semar) de México, confirmó este martes, en la conferencia de prensa mañanera de la presidenta Claudia Sheinbaum, que al momento del incidente el buque estaba siendo controlado por un piloto de puerto especializado de la ciudad de Nueva York, de acuerdo a la normativa internacional y local.

“Toda la maniobra que hizo el barco desde que zarpa del muelle hasta que tiene la colisión está bajo el control del piloto. ¿Quién decide cómo se hace la maniobra y con qué medio se va a ayudar? Es precisamente el piloto de puerto”, afirmó Morales. Para el almirante, es pronto para “especular” si el piloto usó los medios adecuados para evitar el desenlace de la nave, pero afirmó que sí “dispuso de poco tiempo para hacerlo”, entre 80 y 90 segundos para reaccionar. “Hay que analizar si ese tiempo fue suficiente de acuerdo a las condiciones de viento, corriente y distancias”, acotó.

Morales sostuvo que la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB, por sus siglas en inglés) y la Guardia Costera “van a determinar cuáles fueron las causas y cuáles son las responsabilidades”, y requerirán de al menos 30 días “para tener una información preliminar”.

“Todo el tiempo el gobierno del municipio, el alcalde de Nueva York, nos ayudó para que los heridos fueran trasladados a los hospitales. Solamente tuvimos cuatro heridos de gravedad, de los cuales desafortunadamente dos perdieron la vida”, aseguró el almirante. Agregó que los otros dos heridos permanecen en la ciudad estadounidense, fuera de peligro, por lo que “probablemente mañana les den el alta”.

Los cuerpos de las dos víctimas, los cadetes América Yamilet Sánchez Hernández (20 años) y Adal Jair Maldonado Marcos (23 años), fueron trasladados a México ayer y se realizó un homenaje póstumo en la Heroica Escuela Naval Militar de Veracruz, informó el titular de la Semar.

Choque del buque Cuauhtémoc

El buque escuela zarpó del puerto de Acapulco el 6 de abril y su travesía incluía 22 puertos en 15 naciones. El puerto de Nueva York era la cuarta parada que realizaba, luego de visitar Kingston, La Habana y Cozumel; de allí se dirigiría al puerto de Reikiavik, en Islandia.

El Cuauhtémoc abandonó el muelle 17 de Manhattan, a unos 300 metros del puente, asistido por un remolcador, con la intención de navegar hacia el sur para salir del puerto de Nueva York y dirigirse al mar. Michael Graham, miembro de la NTSB y la principal autoridad estadounidense encargada de la investigación, confirmó que autoridades estadounidenses informaron que recibieron tres llamadas de asistencia del buque sólo cuatro minutos después de que zarpara.

“A las 20.24 una emisión de radio de alta frecuencia fue emitida requiriendo asistencia de otros remolcadores en el área del puente de Brooklyn. A eso le siguieron otras dos llamadas de asistencia. A las 20.24 y 45 segundos el mástil del navío chocó con la parte de abajo del puente”, afirmó el investigador en jefe, Brian Young, según consignó Efe.

Graham sostuvo que la NTSB no “especulará” ni ofrecerá “causas probables” del accidente mientras continúe la investigación, que incluirá conocer el trabajo de los remolcadores y las posibles fallas de la nave. Una primera hipótesis apuntó a un fallo mecánico; Graham dijo que analizarán “el estado del motor para ver si tuvo fallos” en cuanto accedan a él.

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