Opinión Ingresá
Opinión

Octubre: dos modelos de políticas de drogas en juego

4 minutos de lectura
Contenido exclusivo con tu suscripción de pago
Contenido no disponible con tu suscripción actual
Exclusivo para suscripción digital de pago
Actualizá tu suscripción para tener acceso ilimitado a todos los contenidos del sitio
Para acceder a todos los contenidos de manera ilimitada
Exclusivo para suscripción digital de pago
Para acceder a todos los contenidos del sitio
Si ya tenés una cuenta
Te queda 1 artículo gratuito
Este es tu último artículo gratuito
Nuestro periodismo depende de vos
Nuestro periodismo depende de vos
Si ya tenés una cuenta
Registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes
Llegaste al límite de artículos gratuitos
Nuestro periodismo depende de vos
Para seguir leyendo ingresá o suscribite
Si ya tenés una cuenta
o registrate para acceder a 6 artículos gratis por mes

Editar

Las posturas de cada uno de los candidatos a la presidencia respecto a las políticas públicas sobre drogas están claras, y pueden resumirse en la tabla que acompaña a esta columna.

Posturas de los candidatos sobre políticas públicas relacionadas a drogas

Andrés Ojeda Álvaro Delgado Yamandú Orsi Guido Manini Ríos Pablo Mieres
Soberanía de consumo NO NO SÍ*
Allanamiento nocturno SI NO
Prohibicionismo NO SÍ* NO NO
Gestión de daños NO NO NO SÍ*
Pro-mercado regulado NO* NO NO
Guerra a drogas NO NO
Internación compulsiva NO NO
Seguridad
Salud
Educación SÍ*

Fuente: Elaboración propia en base a notas de prensa y programas de gobierno. (*) Los candidatos no se han expresado explícitamente, pero se puede deducir sus posturas por otras declaraciones relacionadas con el tema.

Las variables consideradas para elaborar la tabla fueron las siguientes:

  • La soberanía del consumo, vinculada a la libertad de los individuos a consumir la droga de su elección y que, por lo tanto, el consumo no sea penalizado.
  • Los allanamientos nocturnos, como resultado de la propuesta actual de algunos políticos, a partir de la cual se habilitaría a la policía a irrumpir en determinados domicilios durante la noche, con el fin de “atacar” las bocas de venta de drogas.
  • El prohibicionismo, referido al marco filosófico que propone la noción de lo prohibido, tanto en lo que respecta a la venta como al consumo de cualquier sustancia declarada ilegal.
  • La gestión de daños, sustentada en un abordaje del consumo de sustancias en el cual se asume que las personas van a consumir drogas (y que por lo tanto no tiene sentido prohibirlo), sino que se orienta al aporte de herramientas aplicables a la reducción y gestión de los daños generados como consecuencia de su consumo.
  • Las posturas “pro-mercado”, apoyadas por quienes están de acuerdo con mantener y crear mercados regulados de drogas.
  • La guerra a las drogas, que plantea la persecución de la producción, comercio y consumo de ciertas sustancias psicoactivas, consideradas prohibidas o ilegales. Para esta persecución, se utilizan todas las herramientas del Estado, como la fuerza policial y militar.
  • La internación compulsiva, ley votada por el gobierno actual donde se crea un protocolo de internación de personas con adicciones en contexto de calle, aunque no estén dispuestas.
  • La salud, educación y seguridad, en acuerdo con quienes incluyen al “problema” de las drogas en esas áreas, en sus respectivos programas de gobierno.

Al analizar la tabla, podemos ver homologías entre partidos o candidatos que permiten armar dos grupos que están “bastante” de acuerdo en sus posturas y modelos. Por un lado, el modelo A: Delgado (Partido Nacional) y Manini Ríos (Cabildo Abierto), y por otro lado, el modelo B: Orsi (Frente Amplio) y Mieres (Partido Independiente). Ojeda (Partido Colorado) presenta elementos en común con ambas posturas, pero de acuerdo a sus declaraciones, parece encontrarse más emparentado con el modelo A.

En octubre se va a elegir entre dos modelos de políticas aplicadas a las drogas. Por un lado, un modelo vetusto y anticuado que ya ha demostrado que no sirve, pero que se propone una y otra vez, contra un modelo actualizado e innovador.

Así quedan armados dos modelos teóricos y prácticos de cómo pensar y resolver el “tema drogas”:

Modelo A:
Desarticular el mercado regulado de marihuana.
No crear nuevos mercados regulados.
Énfasis en la agenda sanitaria y el prohibicionismo.
A favor de los allanamientos nocturnos.
A favor de la internación compulsiva de adictos.
Guerra a las drogas y al narcotráfico.

Modelo B:
Mejorar el mercado regulado de marihuana existente.
Crear nuevos mercados (ejemplo: psicodélicos).
Énfasis en sanidad y derechos (soberanía).
En contra de allanamientos nocturnos.
En contra de la internación compulsiva de adictos.
Enfrentar el narcotráfico sumando perspectiva social.

Estos modelos tienen algunas cosas en común: ambos plantean que hay que mejorar la prevención, hacer énfasis en el consumo de drogas en jóvenes, y en la necesidad de mejorar la asistencia a adictos. También ven la importancia de luchar contra el narcotráfico y de incluir el tema drogas en las áreas de salud, educación y seguridad.

Estos dos modelos que estamos planteando se pueden ver nuevamente analizando otros datos. Por ejemplo, El Observador en enero de este año realizó una encuesta a 123 parlamentarios consultando sobre quiénes están de acuerdo con regular todas las drogas. En esta encuesta, el 61% de los encuestados dijo estar de acuerdo o muy de acuerdo con regular otras drogas. Al desglosar las respuestas por partido político, se muestra que el 96% de los legisladores del Frente Amplio están de acuerdo con regular el mercado de otras drogas, mientras que en los partidos Nacional, Colorado y Cabildo Abierto, son menos los que están de acuerdo (48%, 26% y 34% respectivamente). Quedando de nuevo en evidencia cómo el Frente Amplio representa el modelo B, y la coalición de derecha el modelo A, antes explicados.

Otra encuesta realizada a la población general (5.357 casos) por El Observador publicada a fines de julio estudió algunas premisas sobre el mercado regulado de marihuana. Dentro de las preguntas, indagó cuántos uruguayos están de acuerdo con crear nuevos mercados regulados de drogas y cómo las opiniones al respecto se pueden separar según sean votantes del Frente Amplio o de la coalición de derecha. Dentro de los votantes del Frente Amplio, el 77% está de acuerdo con regular otras drogas, mientras que dentro de los votantes de la coalición de derecha, sólo el 30% está de acuerdo. Nuevamente, el Frente Amplio queda emparentado con el modelo B y la coalición de derecha con el modelo A.

Para cerrar, me gustaría plantear algo que me interesa mucho, y es analizar ambos modelos a la luz de la evidencia científica disponible. Si volvemos sobre las premisas de cada uno, claramente, el modelo A no parece tener mucho respaldo científico; el prohibicionismo no funciona y no cumple su función, la guerra a las drogas tampoco ha sido de ayuda (a veces vulnerando los derechos humanos) y no ha obtenido buenos resultados. De la mano, aplicar allanamientos nocturnos no ha demostrado ser efectivo en los lugares en los que se pueden hacer, y la internación compulsiva de adictos es una práctica que se hace cada vez menos en el mundo porque no es eficiente y vulnera derechos.

En tanto, el modelo B tiene bastante más respaldo, no sólo por el aspecto de los mercados regulados, sino por la perspectiva de derechos y por hacer énfasis en cuestiones sociales (y no sólo punitivas) al querer abordar el problema de las drogas. La ciencia no es la respuesta a todo, pero sin dudas es mejor manejarse con propuestas basadas en evidencia (queda a disposición de cualquier interesada/o los artículos científicos que fundamentan esta explicación).

En definitiva, en las elecciones de este año se van a elegir muchas propuestas, y dentro de ellas se va a elegir entre dos modelos de políticas aplicadas a las drogas. Por un lado, un modelo vetusto y anticuado que ya ha demostrado que no sirve, pero que se propone una y otra vez, contra un modelo actualizado e innovador... ¿Usted, qué prefiere?

Paul Ruiz Santos es licenciado y doctor en Psicología, docente de la Universidad de la República y miembro del Sistema Nacional de Investigadores del Uruguay.

¿Tenés algún aporte para hacer?

Valoramos cualquier aporte aclaratorio que quieras realizar sobre el artículo que acabás de leer, podés hacerlo completando este formulario.

¿Te interesan las opiniones?
None
Suscribite
¿Te interesan las opiniones?
Recibí la newsletter de Opinión en tu email todos los sábados.
Recibir
Este artículo está guardado para leer después en tu lista de lectura
¿Terminaste de leerlo?
Guardaste este artículo como favorito en tu lista de lectura