“Éste es el nuevo gobierno de las reformas, de la recuperación definitiva y del empleo”, declaró ayer el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, al anunciar cambios en casi la mitad de los ministerios. El nuevo gabinete “políticamente reforzado” está formado para “completar una tarea de gran envergadura” con “fuerza renovada”.
Zapatero explicó que los nuevos ministros son “personas con un perfil político muy claro, con gran capacidad de comunicación para explicar mejor a la sociedad española lo que estamos haciendo”.
El único cambio que se había anunciado era el del Ministerio de Trabajo, cuyo titular, Celestino Corbacho, se presentará en las elecciones catalanas por el Partido Socialista. En su lugar entrará Valeriano Gómez, un economista e histórico sindicalista de la Unión General de Trabajadores (UGT) que respaldó los recientes paros contra el gobierno en rechazo a la reforma laboral de Zapatero. Sus credenciales incluyen una buena sintonía con los sindicatos y una extensa experiencia en asuntos laborales, que conectan con los principales objetivos de Zapatero: restablecer la relación con los sindicatos e impulsar las reformas laborales pendientes.
En el nuevo gobierno, será Alfredo Pérez Rubalcaba el “hombre fuerte” que mantendrá la cartera de Interior y asumirá como vicepresidente primero y portavoz del gobierno, cargos que dejará María Teresa Fernández de la Vega, quien fue la cara del gobierno de Zapatero desde sus inicios, en 2004. Al despedirla, Zapatero aseguró que la ministra “deja una huella imborrable en este país y entre todos nosotros”. De la Vega también era ministra de Presidencia, cartera que ahora quedará en manos del eurodiputado Ramón Jáuregui, quien es también un histórico dirigente del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Junto con Rubalcaba, es uno de los políticos que mejor conocen la situación política del País Vasco y la política antiterrorista del gobierno, informó el diario español El País.
El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino también verá un cambio en su titularidad con forma de guiño a la izquierda. Elena Espinosa fue sustituida por Rosa Aguilar, ex alcaldesa de Córdoba por el partido Izquierda Unida, quien era hasta ahora consejera de Obras Públicas y Vivienda en Andalucía.
Trinidad Jiménez, quien el mes pasado perdió las elecciones internas por la candidatura socialista a la Comunidad de Madrid, dejará el Ministerio de Sanidad y pasará a dirigir la política exterior, mientras que Miguel Ángel Moratinos, canciller desde el comienzo de la administración de Zapatero, se retirará del gobierno. El Ministerio de Sanidad será liderado por la cara más joven del nuevo gobierno: Leire Pajín, de 34 años, hasta ahora secretaria de Organización del PSOE.
Zapatero explicó que los ministerios pasaron a ser 15 como resultado de un recorte en el presupuesto. Una de las carteras que fue eliminada es la de Igualdad, que nació como una apuesta personal de Zapatero, que apuntó en particular a la igualdad de género y a la diversidad sexual y que fue duramente criticado por la derecha. A la ahora ex ministra, Bibiana Aído, se le criticaron declaraciones y decisiones, como su propuesta de que el feminismo fuera una “asignatura troncal en la Universidad”, recordó el diario español Público. Las funciones de Igualdad pasarán al marco del Ministerio de Sanidad. El diario El País señaló que a la eliminación de esta cartera se suma el dato de que por primera vez Zapatero tiene un gabinete que no es paritario; con ocho ministros y siete ministras.
También las carteras de Exteriores y Vivienda fueron criticadas en los últimos años. Moratinos fue señalado por la oposición como responsable de la crisis de las relaciones de su país con Marruecos, y recibió cuestionamientos por la relación que España mantiene con Cuba y con Venezuela.
En la renovación desapareció el Ministerio de Vivienda, cuya titular, Beatriz Corredor, tuvo que enfrentar la crisis inmobiliaria, que estuvo muy vinculada a una crisis económica más amplia. Ahora las competencias de Vivienda pasarán al Ministerio de Fomento.
Con las bajas, la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, es la única ministra que se mantiene en el gabinete desde que comenzó la gestión de Zapatero, en marzo de 2004. Los nuevos ministros jurarán hoy ante el rey y probablemente asuman sus cargos en los próximos días.
La respuesta del opositor Partido Popular fue clara e inmediata: “No necesitamos cambios en el gobierno, necesitamos un cambio de gobierno [...] un cambio de director de orquesta”, dijo el líder del partido, Mariano Rajoy. Además, el dirigente popular celebró la supresión de los ministerios de Vivienda e Igualdad porque lleva “más de dos años pidiéndolo”, dijo. Por otra parte, el ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco, sostuvo en declaraciones a Cadena SER que estas modificaciones darán la victoria a su partido en las elecciones de 2012.